Filosofia “Bioética y Cine”

Trabajo Práctico de Filosofía II

Materia: Filosofía II

Alumno/a: Ariadna Valentina Lesa Witschi

Profesor: Enzo G. Cabrera

Tema: “Bioética y Cine”

Curso y división: 6to año “B”

Turno: Mañana

Orientación: Humanidades

Ciclo lectivo: 2018

Fecha de entrega: 21/08/2018

Introducción

Para realizar el trabajo asignado en la materia Filosofía II, he elegido hacer un análisis de la película “Diario de un rebelde” (1995) del director Scott Kalvert.

Esta cinta nos presenta la autobiografía del poeta, escritor y músico estadounidense Jim Carrol, en el transcurso de su adolescencia, donde comenzó soñando con ser un jugador profesional de baloncesto, y luego de una series de eventos desafortunados, como la muerte de su mejor amigo Bobby, el acoso sexual que sufría por parte de su entrenador Swifty y la tendencia de su ámbito a probar drogas, es llevado a una espiral de decadencia, siendo despojado de su beca, de su sueño en las grande ligas, y con una fuerte adicción a la heroína que a su vez hace que su madre lo eche de la casa, viéndose así a su suerte en las duras calles de Nueva York, donde comete crímenes como el robo y la prostitución para así sostener su adicción. Durante el transcurro de la cinta, Jim mantiene el habito de escribir poesía a modo de relatar los eventos de su día a día, los cuales, eventualmente, se vuelven conocidos y le permiten empezar otra vida.

Desarrollo

Tema principal y temas secundarios de la película.

El tema principal de esta obra es la adicción a las drogas.                                                      

Los temas secundarios son la violencia y la prostitución.

Adicción a las drogas.

En la película se puede observar como las drogas arruinan la vida del joven Jim, comenzando como una simple actividad de ocio con sus amigos, con sustancias suaves de poco efecto como los productos de limpieza, pero subiendo cada vez más el nivel de estímulo, pasando por drogas como la cocaína, hasta llegar al punto de quiebre: la heroína.

Esto eventualmente conlleva a la pérdida de su beca, lo cual arruina su sueño de volverse un jugador de las grandes ligas de baloncesto, y luego a su expulsión de la escuela y hasta de su propia casa, de modo que termina a su suerte en las oscuras calles de Nueva York, llevando una complicada vida de vagabundo, con gran dependencia y adicción a las drogas, que lo afectan psicológicamente hasta el punto que decide cometer todo tipo de crímenes para seguir consumiendo y calmar su mente, a lo largo de los cuales pierde a todos sus amigos adictos.

Esto se ve muy a menudo en la vida real, donde muchos jóvenes se ven en una situación similar, comenzando como una actividad recreativa de fin de semana con drogas como la marihuana, para luego terminar en drogas más fuertes, que pasan a tomar control total de sus vidas. Aunque esto no es la situación de todos los adolescentes, muchos son influenciados por su entorno y no reciben la atención necesaria por parte de sus padres para realmente entender su situación y buscar salir de ella. También hay que tener en consideración que muchos de estos jóvenes usan las drogas como una manera de escapar la difícil realidad en la que viven, y los problemas con los que tienen que lidiar día a día, justamente por ello, son las personas más vulnerables y con bajos recursos, las que más sufren y se ven afectados por esta adicción.

Creo que esta cita lo refleja claramente:

Sepan que hay distintos, tipos de drogadictos. Esta ese cabron de dinero, aficionado ocasional que tiene suficiente dinero para ir a la costa si siente que se acerca el peligro. Los de la calle odian a esos ricos. Pero siempre caen y su dinero los hace tolerables. También están los presumidos de barrio rico. Básicamente igual que los otros, solo sirven para abrir los ojos de sus papás sobre ese virus social, y para presionar al gobierno para que haga algo. Y luego estamos nosotros, los chicos de las calles. Empezamos muy pronto, hacia los 13 años. Pensamos que tenemos todo bajo control y pocos intentan ayudarnos. Pocas veces funciona. Yo soy una prueba de ello. Al fin y al cabo, el trabajo de un drogón es otro empleo de 9 a 5. Aunque suelen salir a la hora de la penumbra. ^[1]

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