MASCULINIDAD HEGEMONICA

MASCULINIDAD HEGEMONICA

Repensar el concepto R. W. CONNELL Universidad de Sydney, Australia. JAMES W. MESSERSCHMIDT Universidad del sur de Maine

El concepto de masculinidad hegemónica ha influido en los estudios de género en muchos campos académicos, pero También ha atraído serias críticas. Los autores trazan el origen del concepto en una convergencia de ideas. a principios de la década de 1980 y mapear las formas en que se aplicó cuando se expandió la investigación sobre hombres y masculinidades. Al evaluar las principales críticas, los autores defienden el concepto subyacente de masculinidad, que en La mayoría del uso de la investigación no es ni reified ni esencialista. Sin embargo, la crítica de los modelos de rasgos de género y Las tipologías rígidas son sólidas. El tratamiento del tema en la investigación sobre la masculinidad hegemónica puede ser mejorado con la ayuda de modelos psicológicos recientes, aunque los límites a la flexibilidad discursiva deben ser Reconocido. El concepto de masculinidad hegemónica no equivale a un modelo de reproducción social; nosotros Es necesario reconocer las luchas sociales en las que las masculinidades subordinadas influyen en las formas dominantes. Finalmente, los autores revisan lo que se ha confirmado a partir de formulaciones tempranas (la idea de las masculinidades múltiples, el concepto de hegemonía y el énfasis en el cambio) y lo que debe descartarse (unidimensional tratamiento de las concepciones jerárquicas y de rasgos de género). Los autores sugieren reformulación del concepto en cuatro áreas: un modelo más complejo de jerarquía de género, enfatizando la agencia de mujer; Reconocimiento explícito de la geografía de las masculinidades, enfatizando la interacción entre los locales, niveles regionales y globales; un tratamiento más específico de encarnación en contextos de privilegio y poder; y un mayor énfasis en la dinámica de la masculinidad hegemónica, reconociendo las contradicciones internas. y las posibilidades de movimiento hacia la democracia de género. Palabras llave: masculinidad; hegemonía; género; poder social; agencia; encarnación; globalización.

El concepto de masculinidad hegemónica, formulado hace dos décadas, tiene bastante influyó en el pensamiento reciente sobre los hombres, el género y la jerarquía social. Tiene proporcionó un vínculo entre el creciente campo de investigación de los estudios de hombres (también conocido como
estudios de masculinidad y estudios críticos de hombres), ansiedades populares sobre hombres y niños, relatos feministas del patriarcado y modelos sociológicos de género. Tiene usos encontrados en campos aplicados que van desde la educación y el trabajo antiviolencia hasta la salud y asesoramiento. Las búsquedas en la base de datos revelan más de 200 artículos que usan el término exacto "hegemónico masculinidad ”en sus títulos o resúmenes. Artículos que usan una variante o se refieren a "Masculinidad hegemónica" en el texto, corre a muchos cientos. El interés continuo es mostrado por conferencias. A principios de mayo de 2005, una conferencia, "Masculinidades hegemónicas y Política Internacional ", se llevó a cabo en la Universidad de Manchester, Inglaterra; en 2004, una conferencia interdisciplinaria en Stuttgart se dedicó al tema "Hegemoniale Männlichkeiten" (Dinges, Ründal y Bauer 2004). El concepto también ha atraído serias críticas desde varias direcciones: sociológica, psicológica, postestructuralista y materialista (por ejemplo, Demetriou 2001; Wetherell y Edley 1999). Fuera del mundo académico, ha sido atacado como: para citar una publicación reciente de reacción violenta en Internet: "una invención de los psicólogos de la Nueva Era" decidido a demostrar que los hombres son demasiado machos. Este es un concepto controvertido. Sin embargo, los problemas que nombra están muy en juego en la actualidad. luchas sobre el poder y el liderazgo político, la violencia pública y privada, y cambios en las familias y la sexualidad. Un reexamen integral de El concepto de masculinidad hegemónica parece valioso. Si el concepto sigue demostrando útil, debe reformularse en términos contemporáneos. Intentamos ambas tareas en Este artículo.

ORIGEN, FORMULACIÓN Y APLICACIÓN

Origen

El concepto de masculinidad hegemónica se propuso por primera vez en informes de un campo estudio de la desigualdad social en las escuelas secundarias australianas (Kessler et al. 1982); en un discusión conceptual relacionada de la fabricación de masculinidades y la experiencia de cuerpos de hombres (Connell 1983); y en un debate sobre el papel de los hombres en Australia política laboral (Connell 1982). El proyecto de la escuela secundaria proporcionó evidencia empírica de múltiples jerarquías, tanto en términos de género como de clase, entretejidas con proyectos activos de construcción de género (Connell et al. 1982).

Estos comienzos se sistematizaron en un artículo, "Hacia una nueva sociología de

Masculinidad ”(Carrigan, Connell y Lee 1985), que criticó ampliamente la Literatura sobre el "rol del sexo masculino" y propuso un modelo de masculinidades múltiples y relaciones de poder. A su vez, este modelo se integró en un sistema sociológico sistemático teoría del género. Las seis páginas resultantes en Género y poder (Connell 1987) en "Masculinidad hegemónica y feminidad enfatizada" se convirtió en la más citada fuente del concepto de masculinidad hegemónica. El concepto articulado por los grupos de investigación en Australia representaba una síntesis. de ideas y evidencia de fuentes aparentemente dispares. Pero la convergencia de ideas no fue accidental. Cuestiones estrechamente relacionadas fueron abordadas por investigadores y activistas en otros países también; el tiempo era, en cierto sentido, maduro para un síntesis de este tipo. Las fuentes más básicas fueron las teorías feministas del patriarcado y las relacionadas. debates sobre el papel de los hombres en la transformación del patriarcado (Goode 1982; Snodgrass 1977). Algunos hombres de la Nueva Izquierda habían tratado de organizarse en apoyo del feminismo, y El intento había llamado la atención sobre las diferencias de clase en la expresión de la masculinidad. (Tolson 1977). Además, las mujeres de color, como Maxine Baca Zinn (1982), Angela Davis (1983) y Bell Hooks (1984) criticaron el sesgo racial que ocurre cuando el poder se conceptualiza únicamente en términos de diferencia de sexo, estableciendo así trabajo preliminar para cuestionar cualquier afirmación universalizadora sobre la categoría de hombres. El término de Gramscia "hegemonía" era actual en el momento en intentos de entender La estabilización de las relaciones de clase (Connell 1977). En el contexto de sistemas duales teoría (Eisenstein 1979), la idea se transfirió fácilmente al problema paralelo sobre las relaciones de género. Esto arriesgó un malentendido significativo. Gramsci la escritura se centra en la dinámica del cambio estructural que involucra la movilización y desmovilización de clases enteras. Sin un enfoque muy claro sobre este tema histórico cambio, la idea de hegemonía se reduciría a un modelo simple de cultura controlar. Y en gran parte del debate sobre género, a gran escala histórica El cambio no está enfocado. Aquí está una de las fuentes de dificultades posteriores con el concepto de masculinidad hegemónica. Incluso antes del movimiento de liberación de las mujeres, una literatura en psicología social. y la sociología sobre el "rol sexual masculino" había reconocido la naturaleza social de la masculinidad y las posibilidades de cambio en la conducta de los hombres (Hacker 1957). Durante el 1970, hubo una explosión de escritura sobre "el papel masculino", criticando severamente Las normas de roles como la fuente del comportamiento opresivo de los hombres (Brannon 1976). Crítico La teoría de roles proporcionó la base conceptual principal para el movimiento de hombres antisexistas primitivos. Sin embargo, las debilidades de la teoría del rol sexual fueron cada vez más reconocidas (Kimmel 1987; Pleck 1981). Incluían la falta de definición del comportamiento y la norma, la efecto homogeneizador del concepto de rol y sus dificultades para contabilizar poder. El poder y la diferencia eran, por otro lado, conceptos centrales en la liberación gay.

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