RELATORIA: LOS CONDENADOS DE LA TIERRA
Enviado por pecora • 25 de Octubre de 2015 • Trabajo • 1.569 Palabras (7 Páginas) • 195 Visitas
UNIVERSIDAD SAN BUENAVENTURA
MAESTRIA EN FILOSOFIA CONTEMPORANEA
ESTUDIANTE: EDWIN AUGUSTO CORREA CETINA
RELATORIA: LOS CONDENADOS DE LA TIERRA
DOCENTE: GIOVANNI PÚA
El proyecto de alienación eurocentrista titulado “colonización” refleja el interés de mostrar un proceso colonizador mediado por la violencia con un momento permanente de imposición de la cultura occidental. Para ello el europeo creo una elite falsificada a la que llamara indígena, negro ¿ O acaso no es falsificar una cultura cuando se le impone otra y no le resta nada más al colonizado sino respirar el cadáver pútrido de lo que fue lo propio de sí.
A esa fase de cultura y valores, a ese llamado humanismo que impone el colono intelectual occidental se contradice en teoría y práctica, lo profesan y lo transcriben, pero en la praxis no paran de negar su humanismo con el genocidio, exterminio y esclavitud del hombre negro e indígena.
Esta imperativa circunstancia de segregación conviene y tipifica a dos clases de hombres: Por un lado aquellos hombres despojados. ¿ Despojados de qué?... de su cultura, de su libertad, de su tierra, de su lengua, de su condición humana ; y otro hombre que se vanagloria con atributos de cultura y civilización. Que pedantería y que condicion tan absurda y contradictoria la del hombre europeo el fratricida por excelencia.
Pero el hombre colonizado se bofa y no se perturba frente al discurso humanista del colono porque saben que en si mismos encarnan su negación a esa falacia, lo usan para reprochar justamente, la falta de humanidad.
El viejo mundo está en decadencia anuncia Sartre como intermediario de Fanon . Naufraga en la deshumanización , pero su idea no es rescatar al hombre blanco sino invitar a la descolonización al hombre oprimido.
Ahora el pueblo colonizado quiere rebelarse y el europeo se convierte en un objeto de razonamiento. Este es el primer paso de la insurrección, se analiza al colonizador como el usurpador que debe ser exiliado. Cita Sartre: “Europa ha dado un zarpazo a nuestros continentes; hay que acuchillarle las garras hasta que las retire.”( Fanon Frantz, los condenados de la tierra. p12)
“Fanon explica a sus hermanos de África ,Asia , América Latina: realizaremos todos juntos y en todas partes el socialismo revolucionario o seremos derrotados uno a uno por nuestro antiguos tiranos”( 11)
¿De dónde vendrá la emancipacion? es la pregunta clave , la respuesta es de la clase que conoce la opresión al desnudo, del mejor ejército nacional revolucionario: del campesinado, de las masas rurales, de ahí depende el triunfo sobre el ejército invasor . Y los blancos les temerán porque no tienen nada que perder y sí mucho que ganar.
Y cuando se levanten victoriosos “la revolución será socialista. Si la burguesía colonizada toma el poder , el nuevo Estado, a pesar de su soberanía formal queda en manos de los imperialistas”.( 11)
Los colonizados, entonces, deben unirse bajo la dirección del campesinado. Y el socialismo será la nueva cultura de revolución. Es decir, la revolución es inevitable.
Este prefacio destaca a la violencia como un elemento necesario, e imprescindible e íntimamente relacionado con el proyecto liberador. Esta violencia revolucionaria es presentada como una práctica que empieza a liquidar el sentimiento de indignidad, y extiende las voces que piden se restituya la humanidad del hombre postrado al servilismo europeo.
El colonizado, debe dejar de ver al colonizador, con ojos envidiosos, de querer ocupar su lugar, y dejar de desatar su cólera y su furia con sus mismos hermanos; el llamado radica en que el sentimiento reprimido sea liberado pero no hacia nosotros mismo sino al directamente implicado, es decir al opresor.
Esta idea de la insurrección se convierte en el primer inconveniente para el opresor, por que dejaría a su centro colonial sin recursos; es decir la metrópolis a la que representa el núcleo de expansión imperialista; sin la apropiación de tierras y riqueza se vería comprometida a la desintegración, quedándose sin el recurso operante que lo convierten en mejor ladrón etnocida.
Cuando llegue el momento de superación de la explotación no parara la memoria del oprimido en seguir reconociéndose como víctima, porque en el recuerdo evoca a la identidad perdida, a la lengua arrebatada y al resto de cultura desvanecida y allí aparece una nueva necesidad de conquistar y volver a lo nuestro.
¿Para que debe un europeo leer este libro? Para ver cómo la quita de la condición humana al colonizado se la hace perder también al colonizador. Lanza aquí, Sartre, una de sus frases más contundentes: “Nuestras víctimas nos conocen por sus heridas y por sus cadenas” (Pág.11)
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