UN DESARROLLO MÁS HUMANISTICO

UN DESARROLLO MÁS HUMANISTICO

Por: Keyna Fernández

Si bien es cierto, en nuestra actual sociedad, inmersa en aspectos como la globalización y la revolución tecnológica se manifiesta un proceso de gran importancia en el cual es pertinente reflexionar, se trata del desarrollo humano, un concepto que quizás en épocas pasadas no hubiese llamado tanto la atención como lo hace hoy en día.

Dada la impresionante evolución de las sociedades, la concepción del desarrollo humano ha ido tomando cada vez más importancia ya que esta es hoy el precepto que determina el nivel de los diversos estados. Pero, ¿es propio relacionar el desarrollo humano llanamente a una simple medida? En mi opinión no, ya que el desarrollo humano va más allá del crecimiento o caída de los ingresos de una nación el Desarrollo Humano representa un proceso constante de crecimiento humano, forjado y encaminado a expandir su potencialidad hacia nuevos horizontes que le permitan no solo vivir dignamente satisfaciendo sus necesidades básicas, sino también expresándose y viviendo sus valores con libertad. Esta concepción me evocan el pensamiento del fallecido orador estadounidense Jim Rohn con el cual estoy muy de acuerdo, este, alguna vez dijo: “El ingreso casi nunca excede el desarrollo personal. Lo que Ud. Consigue depende directamente de lo que Ud. haya llegado a ser. El gran reto es llegar a ser todo lo que se es capaz de ser. Es increíble lo que se transforma el espíritu cuando el potencial humano se desarrolla al máximo, y uno se extiende hasta el límite”.

Interesante y discutible, pues ¿cómo podríamos llegar a desarrollar nuestro potencial humano al máximo? Creo indudablemente que la respuesta está en la educación, ya que, la educación está hecha para el desarrollo, es humanística y está encaminada a facilitar la promoción individual y social de los miembros de la sociedad, y no olvidemos que en el desarrollo humano el ingrediente principal lo constituyen los valores, los cuales son un medio y fin a trabajar en esta. Podría decirse entonces que la educación del individuo en medio de la sociedad ha de ser el eje central del desarrollo humano en cuanto que esta lleva a ampliar las opciones que tienen las personas para llevar la vida que valoran. Sabiamente se refiere a esta cualidad de la educación el filósofo Immanuel Kant al decir que la educación es el desarrollo en el hombre de toda la perfección de que su naturaleza es capaz.

Desde otra perspectiva, es preciso decir que en nuestro medio el desarrollo humano está enmarcado en la dichosa medida económica que hace que los países pobres sean cada vez más pobres y los ricos cada vez más ricos, esto ocurre quizás por la errónea creencia de que el desarrollo humano pueda estar relacionado con la acumulación de bienes materiales y la llana supleción de las necesidades básicas para vivir, cuando lo que en realidad debería

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