Valores morales

Universidad Privada del Estado de México

Ética Profesional

Carolina Hernández Naves

Oscar Cisneros Guadarrama

8° “B”

AMOR

El concepto del amor siempre se relaciona con el aprecio y cariño que se le tiene a algo o a alguien, en la gastronomía no es diferente, pues un cocinero debe tener cariño por lo que hace, de tal manera que no solo cocine porque es su trabajo si no porque le gusta y disfrute hacerlo.

Disfrutar cada proceso de cocinar, desde que se llega al sitio de trabajo, acomodar las materias primas, tratar con los proveedores, hacer la producción necesaria, la elaboración de los platillos hasta el momento en que llega al cliente sabiendo que cada acción te dejo aprender algo nuevo o reafirmar un conocimiento ya obtenido, esa satisfacción de hacer lo que nos apasiona. En pocas palabras el amor a la cocina debe ser disfrutar cada proceso y no verlo solo como un trabajo o solo hacerlo esperando una remuneración económica.

PACIENCIA

Los  cocineros deben tolerar, comprender, padecer y soportar los contratiempos y las adversidades ya sea con los compañeros cocineros o con los clientes moderando sus palabras y su conducta para actuar de manera acorde a cada situación.
Uno de los grandes obstáculos que impiden el desarrollo de la paciencia, es, curiosamente, la impaciencia de esperar resultados a corto plazo, sin detenerse a considerar las posibilidades reales de éxito, el tiempo y esfuerzo requeridos para alcanzar el fin. Una buena comida requiere paciencia. No apresuremos el proceso y nadie se intoxicará con nuestros servicios. También la paciencia al aprender procesos de producción y no abandonar si llegamos a fallar.

LEALTAD

Es una llave que nos permite tener auténtico éxito cuando nos relacionamos. La lealtad es un valor que no es fácil de encontrar. Es deber del cocinero ser leal con aquellos que dependen de nosotros: familia, amigos, compañeros de trabajo o nuestro empleador. La lealtad desarrolla nuestra conciencia, el saber que somos fieles a nuestros principios y ser agradecidos con los compañeros y superiores que confiaron en nosotros para desarrollarnos y seguir aprendiendo teniendo su respaldo y saber que unos con otros se ayudan mutuamente. En la cocina un compañero te puede ayudar en un momento que tengas muchas cosas que hacer sabiendo que si a él le llega a ocurrir, nosotros le corresponderemos de igual manera.

SACRIFICIO

El cocinero debe hacer un esfuerzo extraordinario para alcanzar un beneficio mayor, venciendo los propios gustos, intereses y comodidad. Debemos tener en mente que el sacrificio, es un valor muy importante para superarnos en nuestra vida por la fuerza que imprime en nuestro carácter. Compromiso, perseverancia, optimismo, superación y servicio, son algunos de los valores que se perfeccionan a un mismo tiempo, por eso, el sacrificio no es un valor que sugiere sufrimiento y castigo, sino una fuente de crecimiento personal.

Debemos sacrificar ciertas cosas para llegar a alcanzar el éxito como cocineros, como lo puede ser; sacrificar relaciones personales, horas de sueño, tiempo con la familia, para lograr dar un servicio adecuado en momentos que se crea que ya hemos dado todo, sacar fuerzas y seguir trabajando hasta lograr el objetivo.

RESPONSABILIDAD

El cocinero debe dar cumplimiento a cualquier costo de las funciones encomendadas a una persona, una actitud responsable conduce al éxito de la persona; la persona responsable es apreciada considerada y sobre todo buscada y preferida para realizar trabajos. Las buenas acciones son resultado de la responsabilidad del equipo, los errores los comete el individuo y se asume esa responsabilidad.

Debemos ser responsable en todo sentido ya que en nosotros confían los clientes para hacer un buen platillo que valga lo que se pague por él, y en caso de cometer algún error, en nosotros queda el dar la cara y arreglar lo que salió mal. Debemos de ser responsables en cumplir con los horarios de trabajo, responsables de cuidar cada materia prima y utensilio que nos facilite el trabajo en cocina, y así sacar el mayor provecho para beneficio de todos.  

PUNTUALIDAD

El valor de la puntualidad es necesario para dar a nuestra personalidad  carácter, orden y eficacia, ya que al practicar este valor en plenitud estamos en condiciones de realizar más actividades, desempeñar mejor nuestro trabajo, ser merecedores de confianza. El ser puntuales no solo se aplica a llegar a tiempo al lugar de trabajo, sino también en sacar cada plato a su tiempo correspondiente, para no afectar a los compañeros o hacer esperar a los clientes, ya que si nos retrasamos un poco, estamos retrasando todo el servicio.

DISCIPLINA

Efectuar todos los procedimientos necesarios para asegurar las buenas prácticas y el placer del paladar. Esto nos dice que debemos ser constantes desde nuestra formación culinaria ya que con esto puliremos nuestras habilidades y así seremos más productivos a la hora de hacer platillos. No buscar atajos para lograr nuestros objetivos y acatar lo que se nos quiera enseñar ya que esto nos dará como resultado el aprender nuevas técnicas o mejorar las conocidas.

RESPETO

A las personas que nos rodean y en especial, a los que depositan la confianza en nosotros al ingerir los platillos que preparemos. Respeto a nuestros compañeros, superiores, a los clientes, tener respeto a cada alimento, a cada utensilio para el mejor aprovechamiento de cada uno. Significa  entender el valor de cada cosa o persona dentro y fuera de una cocina para que todo funcione adecuadamente. También respetarnos nosotros mismos como cocineros sin hacernos menos que otro compañero, ni sentirnos más que otros, ya que podemos aprender de unos y enseñar a otros

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