Argentina 1960 - 1966

Introducción

La década de 1960 comienza con una Argentina fragmentada debido al golpe de estado del  55’ contra el entonces presidente Juan Domingo Perón.

Tras el derrocamiento asume a la presidencia Arturo Frondizi, que gobernó hasta 1962 donde es depuesto por las fuerzas armadas en un segundo golpe, quedando al cargo el presidente provisional del Senado, José María Guido, que tan solo duró un año y medio en el puesto ya que en 1963 se llama a elecciones, las cuales fueron manipuladas por los militares. En estas elecciones estuvo proscripto el partido peronista (continuó así por casi dos décadas), por lo cual se registraron aproximadamente unos dos millones de votos en blanco. Quedó electo con un poco más del 20% de los votos Arturo Illia.

En lo económico, luego del golpe de estado, se mudaron muchos factores, dándole libertad de acción a ciertas áreas privadas, pero básicamente se continuó con la estructura piramidal de poder construido por Perón.

Trabajo Práctico Historia

1960-1966

Ascenso e imagen de Arturo Umberto Illia.

Arturo Illia fue un respetable médico y político. En 1938 fue electo como diputado provincial. Fue de los primeros políticos argentinos en denunciar las ideologías de Mussolini y Hitler. Ese año, en el estadio Luna Park, tuvo lugar una gran manifestación nazi. Illia, ante el avance de la ideología vio estos actos y los denunció. Así, poco a poco se fue ganando un puesto como vicegobernador en 1940.

En 1943, en el golpe de Estado, fue expulsado de su puesto. Así volvió, a Pergamino (su pueblo), donde hubo una colecta para comprarle una casa. Luego fue electo como diputado nacional, donde sería parte del grupo de los 44 (radicales que le daban pelea a los abusos de poder del gobierno de turno).

Sancionó una importante ley de medicamentos la cual implicaba más control sobre los laboratorios donde estos se fabricaban.

En 1962, las fuerzas armadas realizan un golpe de estado donde deponen al en ese entonces presidente Frondizi, encarcelándolo en la isla Martín García y, por la Ley de Acefalía del poder ejecutivo, asume José María Guido, el presidente provisional del Senado, el cual duró poco debido a que en 1963 hubo elecciones nacionales, estas fueron manipuladas por las fuerzas armadas del país ya que se proscribió al Peronismo. Luego de las elecciones quedó como presidente Illia, que contó con solo un 25% de los votos debido a los numerosos votos en blanco de los peronistas. Al asumir con tan pocos votos, se lo vio como un hombre débil. Lo cual fue cambiando durante su mandato.

Frenó temporalmente al peronismo y al comunismo. Hizo crecer la economía en grandes niveles. La educación también creció en su mandato. Tuvo un gran gabinete con hombres que terminarían trabajando para Alfonsín luego.

Sin embargo a pesar de todo esto, querían sacar a Illia del poder cuanto antes. La prensa no valoraba ni un poco sus logros.

En una gran cantidad de encuestas, Illia fue votado como el presidente más honesto de toda la historia política argentina. Poco a poco su figura fue creciendo y cada día Illia es uno de los presidentes más respetados.

No tuvo un solo caso de corrupción en su presidencia. El diario La Nación, lo catalogo como el Mahatma Gandhi de la política argentina.

Día a día se van reconociendo sus logros y crece el arrepentimiento por no haberlo dejado terminar su mandato. El golpe a Illia dio a comienzo a una nueva etapa de la violencia política en nuestro país.

Las Fuerzas Armadas

Las fuerzas armadas estaban divididas en dos grupos en consecuencia a que Frondizi en 1958 hizo un pacto para ganar las elecciones con los votos de Perón, que estaba exiliado, y al ejército no le gusto esto, causando que lo derroquen y asuma el Partido Militar, se dividió este partido en: los “Azules”, que decían que el peronismo había salvado del comunismo a la clase obrera, y los “Colorados”, que indicaban que el peronismo era violento y  motivaba al comunismo. Entre 1962 y 1963 se generan enfrentamientos entre estas dos partes y terminan triunfando los “Azules”, que apoyaban al gobierno de Guido, que luego nombran a Juan Carlos Onganía como Jefe del Ejército. En 1963 hubo elecciones en donde Perón, que estaba exiliado, había llamado a votar en blanco a la población pero termina ganando Arturo Illia con un bajo porcentaje de 25% de los votos. En el Ejército no estaban de acuerdo al gobierno de Illia pero a pesar de esto no le generaban problemas como meter presión o generar planteos en contra de su gobierno. Las Fuerzas Armadas estaban en ese momento al mando del General Juan Carlos Onganía y decidió enfocarse más en la reconstrucción de la Institución, recuperar el orden y la disciplina y fortalecer la autoridad del comandante. En realidad lo llevaron a cabo ya que cualquier intervención que hagan causaría nuevas divisiones; y a raíz de esto Juan Carlos Onganía fue fortaleciendo su poder a nivel nacional.

En 1965 se reúnen en Estados Unidos, precisamente en West Point los jefes de las Fuerzas Armadas en donde aceptan la Doctrina de la Seguridad Nacional, que dice que las Fuerzas Armadas eran la garantía de los valores supremos de la nacionalidad y tenían que actuar cuando se vieran amenazados por los comunistas. Luego en Brasil, donde los militares habían derrocado a João Goulart, acepta la doctrina Fronteras Ideológicas, que indicaba que en cada país dividía a los partidarios de los valores occidentales (dentro de estos no estaba el de sistema democrático) y cristianos de los que querían alterar o revolucionarse. A causa de esto Estados Unidos y los militares (de los países apoyados por Estados Unidos), empiezan la intervención política, ya que había militancias anticomunistas, haciendo que derroquen a los gobiernos democráticos. Para las Fuerzas Armadas la democracia era una especie de traba para la modernización de la economía y la seguridad.

Política económica

A lo largo de la presidencia de Arturo Illia, la política económica tuvo un perfil muy definido, dado por un grupo de técnicos con fuerte influencia de la CEPAL (Comisión Económica de América Latina y el Caribe). El gobierno, combinando elementos keynesianos, se benefició con la recuperación industrial y de dos años de buenas exportaciones.

Durante este periodo, las exportaciones llegaron a  niveles muy altos en comparación a los años anteriores. Esto es atribuido a las condiciones climáticas favorables para los cultivos y al mejoramiento de los precios internacionales, pero también fue el resultado del aumento productividad agropecuaria. A su vez, se promovió adelantos tecnológicos en la agricultura, además de adoptar una política de ajustes graduales para evitar que los precios de exportación se alejaran demasiado de los crecientes costos internos. Esto permitió que los ingresos de los trabajadores aumentaran y el Congreso vote una ley de salario mínimo.

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