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Batllismo


Enviado por   •  11 de Octubre de 2015  •  Síntesis  •  1.544 Palabras (7 Páginas)  •  418 Visitas

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A la hora de hablar de las diferentes etapas del batllismo es importante tomar en cuenta que es el batllismo como tal, o lo que de alguna manera encierra para la historiografía. Sería por demás superficial el tomar esta acepción y enmarcarla en las dos presidencias de José Batlle y Ordoñez, ya que sin lugar a dudas su importancia en la arena política y social de finales del siglo XIX y principios del XX, trascendió ampliamente la duración de sus dos  periodos en la primera magistratura.

 Las características del batllismo están marcadas por diferentes líneas políticas en las que se afilian una gran cantidad de ideas que de hecho ya venían  siendo aplicadas con diferentes respuestas en distintas partes del mundo. En cierto sentido estas ideas en su conjunto son una continuación de la intención de fortalecer el aparato estatal, para de esta manera llevar adelante cambios estructurales y replantear la posibilidad de golpes de poder por parte de la oposición a través de la lucha armada. Hacerse de una base popular capaz de sostener y ser la vanguardia del gobierno. Esta tarea de reformar el estado en muchos aspectos precedió la tarea gubernamental de Batlle y Ordoñez, y forman parte de un proceso de modernización que incluyó a Latinoamérica toda y abarcan un cariz político, social y económico que transformo la realidad de todo una época. En Uruguay estas modificaciones están signadas por el proceso económico de inserción al mercado mundial de nuestros bienes exportables. El pasaje del Uruguay “pastoril y caudillesco”, al Uruguay de la modernidad. Es por esto que es muchas veces difícil  dirimir desde cuando nace el impulso batllista diferenciado del empuje modernizador que desde 1860 se puede divisar en varias acciones llevadas adelante por los diferentes gobiernos que se sucedieron, pero sin lugar a dudas los periodos de gobierno que se pueden caracterizar como batllistas, comienzan con su propia presidencia de 1903. Esta primera etapa en el ámbito económico está marcada por un empuje al alza de los productos que nuestro país ofrecía al mercado mundial. Un acontecimiento que formo parte de las marchas y contramarchas de esta etapa es el desarrollo de la última y más importante de las revoluciones de carácter caudillesco que ocurrieron en nuestro país.

Los frigoríficos hicieron su irrupción en el mercado, cambiando la lógica exportadora de nuestro sistema productivo. La revolución lanar dejo paso a la etapa de la exportación de carne enfriada o congelada. Este acontecimiento abrió una perspectiva exportadora que cambio la estructura económica de nuestra producción. La llegada del frigorífico a nuestras tierras trajo la necesidad del cambio de la materia prima utilizada. La industria del frigorífico venia acompañada de la necesidad de un cambio en la forma de explotación del ganado, el tratamiento de las pasturas y otros aditivos. El llamado primer batllismo tuvo en su nacimiento la ventaja de un auge exportador que sin lugar a dudas fomento una prosperidad que sirvió para catapultar un cumulo de cambios que irán siendo capitalizados a lo largo de varios años.

Podemos hacer una clara distinción entre el primer gobierno de Batlle y Ordoñez, y su segundo periodo presidencial. Con el paréntesis del gobierno de Williman, el segundo paso por la primera magistratura fue de una mayor profundidad en cuanto a las reformas realizadas, muchas veces es citado como la  “radicalización” del batllismo. Tanto es así que a la hora de la periodificación del batllismo desde una mirada económica, este comienza durante el segundo periodo presidencial, marcando el punto de inflexión en el año 1911 y no en 1903 como a priori podría ser esperable. Esto se resuelve de esta manera por entenderse que durante la primera presidencia, el modelo económico no varió en sus bases, sino que perpetuó el sistema imperante desde el siglo XIX. No obstante otras miradas dan lugar a  interpretaciones  distintas, Benjamín Nahum reconoce dos etapas desde la evolución económica, una llamada de “expansión y auge”, que sitúa 1905 y 1920, y otra a la que nombra  “recuperación y crisis” que abarca el período  1920 a 1930. Aquí los puntos de inflexión están marcados por la llegada del frigorífico, la crisis de posguerra, y finaliza con la crisis de 1929.

En todas las periodificaciones que se puedan hallar, desde la mirada económica, es indudable la importancia de los acontecimientos exteriores que marcan el ritmo de la economía local. Es que el arribo de la industria frigorífica como ya hemos mencionado es de vital importancia para el desarrollo de las actividades futuras del país en su conjunto. Al habernos insertado definitivamente en la economía mundo, los vaivenes del mercado externo tienen una repercusión enorme en nuestra hacienda. Ya los últimos años del siglo XIX lo dejo marcado con la crisis de 1890, pero el efecto de la primera guerra mundial y la crisis del año 1929 dejan en claro que el grado de dependencia con respecto a las variables financieras mundiales han estrechado el margen de maniobra y la capacidad de respuesta de nuestro país.

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