ENSAYO DEL LIBRO “A LA CARGA DE GUNG HO”
Enviado por luisemi15 • 7 de Octubre de 2014 • Tesina • 651 Palabras (3 Páginas) • 1.274 Visitas
Título
ENSAYO DEL LIBRO “A LA CARGA DE GUNG HO”
Introducción
Se basa en tres grandes principios que son: El espíritu de la ardilla, El estilo del castor y el don del ganso. En esta fábula Andy Longclaw un indio americano le enseña a Peggy Sinclair como ponerlos en práctica en Walton Works una empresa que está al borde de la quiebra y que gracias a estas enseñanzas ella logra sacarla adelante, por desgracia Andy muere pero antes de hacerlo deja un legado aprendido de la naturaleza que se puede poner en práctica en cualquier organización.
Desarrollo
El espíritu de la ardilla: Trabajo que vale la pena. Saber que contribuimos a mejorar el mundo. Trabajamos juntos para lograr una meta compartida. Los valores son la guía de todos los planes, las decisiones y las actuaciones.
Empecemos con el ejemplo que le hace Andy a Peggy cuando le explica que estamos contribuyendo a mejorar el mundo; le pregunta ¿Cuál ha sido el empleo más insignificante que has tenido? Y ella le responde que lavar platos en la cafetería de la Universidad a lo cual él le dice que si ella no hubiese lavado todos esos platos en la Universidad se hubiesen intoxicado por las bacterias de los platos sucios.
Y lo de “trabajar juntos” pues claro que los empleados de una organización deben trabajar unidos para que la empresa genere muchos ingresos que van a parar a los “bolsillos” de los “dueños”.
Y estoy totalmente de acuerdo con este punto no solo en las empresas hay que tener principios sino también en todos los otros contextos en los que interactuamos.
El estilo del castor: Control sobre el cumplimiento de la meta. Un campo de juego con el territorio claramente de marcado. Los pensamientos, las necesidades y los sueños son respetados, escuchados y llevan a la acción.
Capaces pero conscientes del reto que nos queremos proponer.
Continuando con el estilo del castor pues lo que yo entendí fue que en Walton Works les estaban dando ascensos a los empleados de acuerdo a sus habilidades y después daban un paso hacia atrás confiando en que ellos iban a dar buenos resultados por estos estímulos que son como una recompensa por su actitud hacia el cargo, este principio me parece más “aterrizado” que el de la ardilla porque en un mundo corporativo perfecto deberían darle a cada empleado el cargo que se merece de acuerdo a sus capacidades y con un salario proporcional a la cantidad de horas de trabajo y a lo difícil que deba ser.
Los jefes deben dar órdenes con respeto sin ser “mandones” hay jefes que llegan a ser irrespetuosos, groseros y desagradables entonces si sería ideal que hubiese una empresa donde los jefes fueran respetuosos.
Y eso no está bien porque si trabajas por decirlo así bajo presión te sale el trabajo mal, y si estamos bien
...