ÉPOCA COLONIAL EN MÉXICO

ÉPOCA COLONIAL

"En los caminos yacen dardos rotos,

los cabellos están esparcidos.

Destechadas están las casas,

enrojecidos tienen sus muros.

Gusanos pululan por calles y plazas,

y en las paredes están salpicados los sesos.

Rojas están las aguas, están como teñidas,

y cuando la bebimos,

es como si bebiéramos agua de salitre.

Golpeábamos, en tanto los muros de adobe,

y era nuestra herencia una red de agujeros.

Con los escudos fue su resguardo,

pero ni con escudos puede ser sostenida su soledad".

Manuscrito Anónimo de Tlatelolco (1528),

Edición facsimilar de E. Mengin, Copenhagen, 1945.

COLONIZACIÓN ESPAÑOLA

A las travesías de los navegantes hacia América siguieron las hazañas de los conquistadores, guerreros movidos tanto por el fervor religioso como por la ambición de fama, poder y riquezas. Con mejores armas y técnicas guerreras, unos cuantos cientos de soldados lograron someter a millones de indígenas.

Para la historia de México, el siglo XVI es el siglo de la conquista. Dicho nombre abarca tanto el hecho militar mismo como el largo período de acomodo que no sin violencia produjo una nueva forma de vida: la Colonia.

La conquista se divide en dos períodos diferentes: El primero, que abarca de 1519 hasta aproximadamente mediados de siglo, caracterizado por el triunfo de los intereses particulares de los conquistadores sobre los indígenas, el cual se ve inmerso al sometimiento de una explotación sistemática. El segundo período del siglo de la conquista se caracteriza de manera opuesta al primero por un aumento de la función real en la toma de decisiones, un mayor control de los abusos de los conquistadores y es cuando surge una política de protección legal hacia el indígena.

El conquistador es quien domina la historia de los cien años iniciales del conflicto, el cual consiste en el desequilibrio de la antigua sociedad prehispánica sometida a un nuevo estado de cosas.

En la conquista de México-Tenochtitlán, los soldados españoles tuvieron aliados inapreciables: el odio que muchos pueblos sentían hacia sus opresores mexicas y las enfermedades infecciosas desconocidas para los indígenas fueron las armas más mortales de los europeos. La conquista significó la desaparición de los antiguos señoríos prehispánicos, pero no la destrucción total de la civilización mesoamericana; los antiguos reyes indígenas y los nuevos señores españoles emparentaron entre sí, y dentro de un nuevo orden político gobernaron s sus pueblos al lado de sacerdotes cristianos, trayendo una nueva religión compartida por todos los pobladores de la Nueva España.

Hernán Cortés (1485-1547) fue capitán y conquistador de México, un hombre inteligente y audaz. Muy joven llegó a México y desde la isla de Cuba salió al mando de una expedición hacia México. En un lugar de Tabasco, le regalaron veinte doncellas, entre ellas la Malinche, quien fue su intérprete (ver nota al final de esta sección en donde se detalla el papel preponderante que jugó la Malinche dentro de la conquista). Después, fundó la Villa Rica de la Vera Cruz (Veracruz), marchó al interior y luchó contra los ejércitos tlaxcaltecas, quienes se convirtieron en sus aliados. Al llegar a Tenochtitlán fue recibido por el emperador Moctezuma. En 1521, después de un año de lucha, ocurre el sitio y la caída de Tenochtitlán, abarcando desde el retorno de Cortés a tierras tlaxcaltecas, donde se había repuesto con sus hombres, hasta la prisión de Cuauhtémoc. El sitio de México lo realizan (en palabras de Cortés) mil españoles sostenidos por cincuenta mil aliados indígenas.

El siglo XVI no es solamente el de la lucha militar. En el se esbozan las estructuras permanentes que pervivirán durante la Colonia. El triunfo de los conquistadores y el reparto que hacen de la riqueza de las nuevas tierras, el sojuzgamiento de los hombres por medio de la esclavitud primero y de la encomienda después, y la distribución de tierras por medio de mercedes, prefiguran la nueva sociedad colonial. El desequilibrio entre dos mundos: la república española y la de los indios.

La Malinche

Conocida también como Malintzin, Malinali o Doña Marina. Fue una mujer que provocó gran polémica viéndola como traidora de la cultura indígena, la madre de los mestizos y una heroína al mismo tiempo. Como traidora es que se gesta el término "malinchista" que proviene de su nombre y significa desleal, vende patria y antipatriota. El cronista Bernal Díaz del Castillo en su crónica "Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España" nos informa que la Malinche fue hija primogénita de un señor noble de Paynala, La Malinche fue regalada a un cacique de Tabasco junto con otras diecinueve mujeres, después de que Cortés derrotara a los tabasqueños en la "Batalla de Centla". Fue regalada a un capitán de Cortés, quien descubre que habla Náhuatl y empieza a utilizarla como intérprete náhuatl-maya. Hasta que la Malinche aprendió español fue utilizada por Cortés como intérprete. Bernal Díaz del Castillo escribió de ella: "Sin la ayuda de Doña Marina, no se hubiera entendido el lenguaje de la Nueva España y México". Como aconsejadora de Cortés le informaba acerca de las costumbres y algunos planes de los indígenas. También fue amante del conquistador, dando a luz un hijo, llamado Martín. No hay otra mujer en la conquista que destaque como la Malinche. Por su sabiduría, ocupa un lugar destacado en la historia de esa época. Tal vez la historia no hubiera sido la misma sin su presencia en la conquista.

MÉXICO VIRREINAL – CONQUISTA ESPIRITUAL – POLÍTICA Y SOCIEDAD – RELIGIÓN Y CULTURA – ARTES Y CIENCIAS

Hernán Cortés se hizo cargo del gobierno de la recién conquistada colonia, llegando después a la ciudad de México. Durante su gobierno, consolidó la misión de las encomiendas entre los conquistadores, repartiendo las mercedes de la tierra y estableciendo talleres de producción artesanal. En 1527, el rey de España forma la Audiencia. Juan de Zumárraga, primer arzobispo de México, comunicó todas las anomalías cometidas por la audiencia y el rey establece una segunda audiencia. Posteriormente, la corona española consideró conveniente instaurar el Consejo de Indias, órgano regulatorio que debía regular las leyes y a las autoridades de la Nueva España. Su acción fue limitada debido a los poderes casi ilimitados de los virreyes. Carlos I instaura el virreinato en México, siendo su primer virrey Antonio de Mendoza y Pacheco en 1535, quien debía reconciliar las diferencias entre españoles e indígenas. El virrey era el representante

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