A la sombra de la revolución la sombra de la revolución Mexicana

 A la sombra de la revolución la sombra de la revolución Mexicana.

Capítulo I, Por el camino de Madero.

No se creía posible una revolución; varios personajes importantes del momento lo afirmaban y también era publicado en el primer diario de la nación (pág. 11)

Hace un señalamiento que en el gobierno de Díaz fueron años de grandes cambios en la economía, ya que hubo un realce en los diferentes sectores productivos, como en la minería, la agricultura, la ganadería, así como también la creación de muchas nuevas empresas, fábricas, plantas textiles, fundidoras y claro está el primer ferrocarril.

Estas nuevas condiciones de expansión económica dieron paso a grandes cambios en la nación, así también trajeron consigo consecuencias que pronto se vieron reflejadas en los sectores más bajos. Uno de los datos que resalta es que la tasa de la población aumentó considerablemente durante estos años. Muestra que la revolución se dio en un momento de gran auge de diferentes campos de trabajo, pero por ello se fracturo y desajusto los niveles sociales que en ese momento se encontraban.

Pros y contras del progreso porfiriano.

Inversión extranjera: desarrollo ciudades, fundó emporios pero afectó el salario de obreros y clase media.

Vinculación de mercado norteamericano:

• Fuentes de trabajo y exportación pero México se vuelve dependiente a la economía estadounidense.
• Auge minero: se crean ciudades pero genera discriminación laboral anti mexicana.
• Ferrocarril: acortó distancias, abarató fletes y unificó mercados pero aumento el despojo de tierras.
• Modernización agrícola: consolidó sector dinámico pero destruyó la economía campesina (hambre, peonaje y migración)

La ruptura agraria

Grandes cambios traen consigo grandes consecuencias la ruptura agraria se dio entre otras cosas debido al despojo de las tierras de los campesinos que las trabajaban y defendieron durante varios años, el gobierno se apropiaba de las tierras porque habían alcanzado un alto valor, siendo estás utilizadas para proyectos del gobierno o bien ampliando las fincas de los hacendados y gente influyente. El maltrato al sector campesino, la ruptura con el clero por el despojo de sus tierras, la fractura entre familias patriarcales fueron el principio de un descontento generalizado. Esta situación es fueron levantando inconformidades y desacuerdos que más tarde darían pasó a un levantamiento. Emiliano Zapata formaba parte del grupo campesino maltratado por el gobierno y años posteriores se convertiría en un principal representante de esta revolución que se encontraba a sus inicios.

Caminos cerrados (pág. 16)

En los sectores sociales existía una Clara visión entre la gente trabajadora y la gente influyente, en esos años del gobierno de Díaz no había forma de tener un buen empleo a base de esfuerzo y dedicación pues tan sólo sus amistades y parientes tenían la oportunidad de formar parte de esta élite dirigente y campos relacionados al gobierno.

Territorio minado

En otras partes del país la minería asimismo trajo grandes cambios en pequeñas comunidades, personas extranjeras invirtieron en la extra extracción de minerales, esto ocasionó una fuente de empleo y con ello una oleada de injusticias para los obreros pues no contaban con dignas condiciones de trabajo. Tras años de injusticias y maltratos al sector obrero y campesino, las rebeliones y huelgas (1906) nos hicieron esperar, hechos que se presentaron en Cananea y Río Blanco, terminando en revueltas y disturbios en dichos lugares.

Naufragio en Río Blanco

Obreros fastidiados del ultraje al que eran sometidos organizaron un mitin que se salió de control, marcharon gritando consignas, buscaron armas y liberaron presos. Fue una revuelta que movilizó al ejército que trato de contener y diluir a los trabajadores enardecidos. Esto mostró la incapacidad porfiriana de controlar un estallido.

La aparición del Norte.

Durante los 30 años del gobierno de Díaz el norte del país presentó grandes modificaciones. El ser vecino de los Estados Unidos dio paso al crecimiento económico en toda la zona, inversionistas invirtieron grandes capitales en la industria, en la minería y con el nuevo ferrocarril se acordaban las distancias. Se podía exportar con mayor rapidez, se elaboraba y construir lo que antes se importaba. Fuentes de empleo nacían por todo este territorio, los campesinos ya no trabajaban sus tierras, ahora formaban parte del grupo obrero. Ante todo esto se enfrentaron tiempos de crisis para el sector agrícola como falta de cosecha y por ello escasez de alimentos, por la poca mano de obra en consecuencia del auge de la industria minera que era mejor pagada. Un grupo importante que apareció en esta etapa, era el grupo de personas que viajaban de un lado a otro en busca de trabajo, no teniendo un lugar fijo para vivir, ni familia, gente que no tenía vinculaciones con nadie que se uniera al grupo de revolucionistas que pelearían contra el ejército federal.

Nuevas ramas, añosos troncos.

A todo esto se sumó el descontento de las familias patriarcales importantes en el país que fueron desplazadas por incondicionales al porfiriato. Por ello estas familias que por años fueron los actores principales en cada una de las decisiones de su patrimonio y del orden de su comunidad como pasaron a ser los principales representantes de la revolución Mexicana, de estas familias surge Francisco I. Madero.

El autor nos muestra que una de las causas por la cual el gobierno de Díaz se encontraba en declive era a causa de ya no tener la misma veracidad y fuerza, a sus 75 años era más un anciano con los sentimientos a flor de piel y no el hombre capaz de hacerse frente a cualquier circunstancia con la inteligencia que lo caracterizaba; como él sus colaboradores que en conjunto dirigían el país tenían la edad promedio de 60 a 70 años y la población de aquel momento era mayormente joven con ideas e inquietudes deseosos de una revolución para darle un giro a todo.

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