Aciendo Ela Mor

ASPECTOS ÉTICOS DEL DOPING – MODELOS Y ESTRATEGIAS DE PREVENCION

Dr. Carlos P. D’Angelo*

Concepto del Deporte.

Toda actividad deportiva se asienta en tres pilares básicos: el placer, la salud y la competencia. Todos son complementarios y sólo una adecuada articulación entre ellos garantiza una correcta práctica deportiva. La proporción de cada uno de estos componentes variará de acuerdo con las razones de quien realiza la actividad deportiva correspondiente.

SALUD COMPETENCIA

-DEPORTE

PLACER

En el alto rendimiento , los aspectos competitivos serán predominantes, aunque deberá tener presente aspectos lúdicos y de salud. De no ser así, correríamos el riesgo de convertir a la alta competencia en una patología en sí misma.

Por el contrario, quien realiza actividades físicas teniendo como objetivo la salud deberá también gozar del placer de su práctica. Esta actividad placentera hará que se pueda prolongar en el tiempo , que es la condición básica de todo programa de salud. También tendrá competencia a través del mejoramiento de sus capacidades y performance.

Por último, en el niño que juega serán relevantes los aspectos lúdicos. Aunque éste también compita y busque alcanzar algún tipo de éxito.

Concepto de prevención.

El concepto de prevención en las ciencias sociales es relativamente moderno

Su antigüedad no pasa de 40 años.

Su referente es el modelo médico sanitario basado en la inmunización. Si nos retrotraemos en el tiempo, los primeros modelos occidentales fueron en la Europa del siglo XIX y estaban relacionados más con la vigilancia que con la prevención. Aparece el concepto de policía sanitaria para los casos de enfermedades infecciosas con el fín de evitar su difusión.

Ese concepto, que aún se mantiene, es el de la vigilancia epidemiológica.

Este orígen, así como la noción difusa del concepto de prevención, hace que desde distintas instancias: la policía, la justicia, y en otras veamos utilizar la palabra prevención.

En el campo de la salud, prevención es toda aquella medida, que tomada con anticipación, está orientada a que un hecho no se produzca y en caso de ocurrir, disminuir su gravedad o consecuencias.

Yendo al Doping, debemos convenir que no constituye un problema exclusivo del campo de la salud, sino que, por el contrario- es complejo, heterogéneo y donde se entrecruzan diferentes variables. De allí que se requiera de un enfoque multidisciplinario, donde converjan médicos, sociólogos, psicólogos, dirigentes deportivos, periodistas, deportistas, etc. como única manera de enfocar el tema con seriedad.

La problemática del Doping como fenómeno de gran repercusión social surge en el año 1960, con la muerte de un ciclista durante los Juegos Olímpicos de Roma por uso de anfetaminas.

A partir de entonces, los organismos vinculados al deporte comienzan a interesarse en la erradicación de esta metodología.

En las Olimpíadas de Tokio de 1964, FIMS da la primera definición sobre Doping : Es la administración a un atleta ( o el uso por parte de un atleta ) de cualquier sustancia ajena al cuerpo o de cualquier sustancia fisiológica en cantidades anormales o por una ruta de ingestión anormal, con la sola intención de aumentar artificialmente su rendimiento en una competencia. Desde 1968, en las Olimpiadas de México se empiezan a realizar los controles junto con la publicación del primer Listado de Sustancias Prohibidas en el Deporte.

A partir de entonces hasta hoy se ha ido ampliando el número de sustancias y perfeccionando la metodología de su detección con técnicas y aparatología, cada vez más sofisticados. Como correlato, si nos preguntáramos sobre los progresos en el campo de la prevención, creo que seguimos manteniendo conceptos e ideologías totalmente anacrónicas.

La droga y sus mitos.

Es fundamental pensar qué representa la droga en el deporte en el imaginario colectivo y cuáles son los mecanismos que esta sociedad pone en marcha para controlar dichos fenómenos.

Si prestamos atención a la imagen que tiene la opinión pública, los medios y la dirigencia deportiva, vemos que identifican drogas con dinero-corrupción-éxito-fraude- enfermedad-delito.

Todas estas asociaciones, la mayoría en conjunto, se encuentran teñidas de un alto nivel emotivo.

La droga aparece como una amenaza contra la que hay que actuar en contra y rápidamente.

Creemos que esta imagen es errónea. No está basada en datos concretos, objetivos sobre la auténtica gravedad del problema, sino en factores emocionales, destinados más a conmover que a informar y, en consecuencia, más a movilizar que a hacer pensar, reflexionar.

Es que sobre las drogas existen muchos preconceptos, fruto de una mala información que se da a la sociedad.

Quizás el más importante sea su fetichismo. Esto significa identificarla con una agente mágico, de propiedades diabólicas, que aparece como algo externo a la sociedad deportiva y que la afecta en su totalidad.

Enfocada desde esta perspectiva, la droga asumiría hoy en día el mismo papel que la peste en la Edad Media.

Es vista como peligrosa "per se", dándole un papel activo, de sujeto.

La identificación de la droga con el doping ofrece a la sociedad deportiva una explicación tranquilizadora en cuanto sus causas son atribuidas a un agente externo, ajeno tanto al deporte como al deportista.

Por otra parte, ese poder mágico que se le adjudica a la droga ha llevado a que se le asigne intencionalidad. Habrá entonces drogas buenas, malas o peligrosas, cuando no lo son en sí mismas. Depende lo que las personas hagan con ellas.

Con mucha frecuencia vemos que en el deporte se promocionan medicamentos asignándoles propiedades mágicas , induciendo su uso como una manera de mejorar valencias físicas cuando en realidad son inocuos.

Modelos de prevención.

Lo intrincado de esta problemática hace que los modelos de prevención en esta área se encuentren en permanente evolución. En el uso de sustancias prohibidas en el deporte hay tres elementos básicos : la sustancia , el deportista que la usa, y el contexto socio cultural de tal uso. Estos tres factores habrá que tenerlos en cuenta siempre , cualquiera sea el modelo con que se quiera enfrentar esta problemática. En la medida que la complejidad de cada uno de estos tres elementos sea ignorada o

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