Antígona tragedia

ANTÌGONA

Hace 2449 años, Sófocles escribió esta tragedia, puesta en escena por vez primera en el año 442 a.c., desde entonces sigue ocupando un sitial dentro de la literatura Universal.

La tragedia comienza luego de haber ocurrido una serie de sucesos trágicos en la familia del ex monarca de Tebas, Edipo. Luego de la muerte de los reyes de Tebas

Los dos hijos de Edipo pelean por obtener el poder, Etocles incumple el pacto de gobernar alternando el poder con su hermano, Polineces,

Polineces, al ver que su hermano le niega el trono, decide ir a una ciudad vecina y ataca a Tebas, en esa batalla ambos hermanos mueren. Creonte llega al poder y se llena de soberbia y gobierna como un tirano cruel e inhumano. Creonte decide cambiar las leyes establecidas por los dioses: "Todo difunto debía ser enterrad", pero Creonte, como todos los dictadores se creen tener más poder que los dioses y ordena que el cuerpo de Etocles sea enterrado con todos los honores ya que éste dio su vida por la patria, mientras ordena que el cuerpo de Polineces sea dejado sin enterrar para que su cuerpo sea consumido por las aves y los perros.

Mientras tanto, Antígona, hermana de Eteocles, Polineces e Ismene , que había acompañado a Edipo al exilio y a la muerte regresa a la ciudad de Tebas.

La tragedia comienza con un diálogo muy intenso y dramático entre Antígona y su hermana, Ismene. Antígona se ha enterado del decreto de Creonte de no enterrar a su hermano y de condenar a la horca a todo aquel que desobedezca sus órdenes. Antígona le declara a su hermana que ella lo va a enterrar, ya que es la ley de los dioses y le pide ayuda a Ismene, quien temerosa se niega. Antígona trata de persuadirla, pero ella, temiendo a Creonte decide no hacerlo.

Luego vemos a Creonte conversando con la Asamblea de anciano en a la cual le informa sobre sus planes. Aquí hace un recuento de la historia pasada y de su forma de gobernar a la ciudad: Habla de los honores y de la sepultura de Eteocles y del castigo a Polineces "Nunca los criminales tendrán el honor que corresponde a los ciudadanos justos".

Más tarde Creonte se entera de que han enterrado el cuerpo de Polineces, estos lo llena de ira y promete matar al culpable o a los culpables. Posteriormente Antígona es llevada ante el tirano por el guardián, quien la acusa de ser la autora de los hechos. Sófocle nos presenta un diálogo muy intenso en el cual Antígona acepta la culpa con valentía y Creonte la condena a muerte. La enterrará viva en una cueva para que muera de hambre. Antígona se enfrenta al tirano, ella ha de obedecer a su conciencia y a las leyes de los dioses, no va a aceptar las imposiciones del tirano cruel y asesino:¡Difícil es la victoria, cuando el enemigo es una serpiente!.¡No nací para para compartir el odio, sino el amor!

Ismenes, luego del arresto de Antígona, quiere compartir la culpa, llora ante Creonte

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