Armando Reveron

El presente material escrito se reflejara la Biografía del artista Armando Reverón, así como un análisis de su película, con el objetivo de hacer entender al lector acerca de la importancia del conocimiento de la vida de quien ha sido considerado como el mejor artista plástico de Venezuela, así como uno de los más influyentes en el mundo del arte. Desde su infancia Reveron mostraba señales de interés o afición hacia la pintura, debido a que su tío-abuelo materno, Ricardo Montilla lo instruyo en dibujo, lo que trajo como resultado, despertar su vocación artística. Al fracasar el matrimonio de sus padres, Armando es enviado al hogar de los Rodríguez-Zucca, quienes se ocuparon de su primera educación, Las paredes de la casa eran algunos de los primeros lienzos de Reverón, donde éste intentaba retratar a la sirvienta de la familia.

En 1910 pinta su primer autorretrato en el que posa con cierta apariencia de bohemio. Tiempo después Reveron realiza un viaje a Valencia y allí se inscribe en la Academia Nacional de Bellas Artes teniendo como profesores y compañeros a grandes artistas reconocidos en la actualidad. Debido a su gran rendimiento y por recomendación de sus profesores, le permitió obtener una pensión de estudios en Europa al finalizar el curso en 1921. Establecido en España ingresa a la Escuela de Artes y Oficios, el cual se mostró tanto interesado como cautivado por el trabajo de Francisco Goya. En 1912 regresa a Venezuela, Pinta el retrato de Enrique Planchart. Tras una corta estadía vuelve a España. Se inscribe en la Academia de San Fernando de Madrid en los cursos de Antonio Muñoz Degrein y José Moreno Carbonero.

En 1916 ya establecido nuevamente en Venezuela, Reverón pinta al aire libre sus primeros paisajes resueltos dentro de una tonalidad azul. Poco después se traslada a La Guaira donde vive de dar clases privadas de dibujo y pintura. En el carnaval de 1918 conoce a Juanita Ríos, quien sería su modelo para todas las obras que tenían por venir y así también como su esposa. A partir de esta época Reveron comienza a experimentar cambio que fueron muy significativos para su vida, la muerte de su hermana de crianza fue el comienzo de una serie de actos que hundirían en gran depresión al artista y que poco a poco comenzaba a manifestarse en su comportamiento y en sus obras artísticas.

En La Guaira, se encuentra al pintor ruso Nicolás Ferdinandov, a quien Reveron consideraba un gran amigo. Durante este tiempo Reverón visita con frecuencia el rancho de pescadores que el pintor ruso ocupaba en Punta de Mulatos. Siguiendo los consejos de Ferdinandov, Reverón decide instalarse en el litoral, iniciando con esto una nueva etapa en su vida y en su obra. Para 1921, vive en un rancho de la playa, en el sector de Las Quince Letras. Poco tiempo después se muda y comienza a construir, un poco al sur, "El Castillete" que le serviría de morada para el resto de su vida y el cual sería el lugar para la realización de sus pinturas y otras esculturas usando elementos que le proveía el ambiente que lo rodeaba y siempre utilizando como modelo e inspiración a su esposa Juanita.

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