Capitulo 1 – El Paraíso Colombiano

Informe Nº 2.

Capitulo 1 – El Paraíso Colombiano.

Como Somos los Colombianos.

Alejandro Echavarría 11º2.

Religión.

Wilmer Ribón G.

I.E Mariscal Robledo.

19 de mayo.

Los conquistadores llegaron y lo primero que pensaron fue el inaudito paraíso al que había llegado. Tal riqueza en las tierras de Colombia les parecía inimaginable.

Otro historiador de la conquista dice que cuando los ibéricos llegaron querían quedarse para no pasar pena otra vez. Y Colon escribió este acontecimiento es su diario personal, “que había llegado al paraíso terrenal”.

Deslumbrados por todas las riquezas del nuevo mundo, pero limitado por cuatro ríos, y sólo tres de ellos siguen aquí en Colombia.

Muchos conquistadores creyeron en la historia del El Dorado, e hizo que su codicia aumentara.

Siempre los propios colombianos se han encantado con las maravillas de su país, sus magníficos tesoros naturales, por su paisaje.

Pero su prodigiosa riqueza es el agua. Colombia es una nación privilegiada con dos océanos llegando a sus costas. El agua es el factor de progreso, en el pañis es tres veces superior al promedio de los demás países suramericanos. Colombia es el país más rico en biodiversidad.

En las selvas húmedas tiene origen algunas medicinas, que hoy son comercializadas industrialmente.

Colombia no sólo posee agua, también posee una gran extensión de páramos que tiene mucha importancia en el papel de generación de agua.

Colombia es el primer país del mundo en diversidad de ecosistemas: bosques húmedos, selvas, desiertos y páramos.

Las minas de oro, de níquel, de esmeraldas, de carbón y el petróleo y la recién descubierta mina de diamantes y de titanio y de plomo, así sus inmensos bosques y selvas son parte de la gran riqueza de Colombia.

Colombia tiene una gran comunicación lo que hace tener facilidad geopolítica.

Las bellezas y riquezas del país, han llevado a tener una buena economía.

Aunque esta economía nos cueste la destrucción de los recursos naturales del país.

Los colombianos se adaptaron ante tal arrebato de recursos, en vez de rebelarse y proteger su país. Y al contrario también han ayudado a la destrucción masiva del país.

No sólo destruyen sus riquezas y las bellezas naturales lo que hacen al país un edén terrenal.

Los colombianos se han enfrentado a la pena de tener como país dos caras en contraste: lo bello y lo horrible del país.

Se hace cada vez más importante entender que hay que ver el problema del país desde un punto de vista más amplio.

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