Cuento De Amistad

Una amistad con pocas palabras

Narra la hermana mayor:

Todo comenzó un día como cualquier otro, estaba recostada viendo televisión, hasta que se oyó un “toc toc” en mi puerta, al oír el sonido de mi puerta me morí del miedo, al pasar una pequeña gota de sudor por mi frente se oyó una voz conocida, así que decidí armarme de valor y al igual decidí abrir la puerta, al tener un dedo sobre el picaporte decidí juntar los demás dedos y girar la perilla, al ver a mi pequeña hermana fuera de mi habitación di un respiro de alivio, así que la deje entrar. Mi hermanita es mui diferente a mí, es demasiado social en cambio yo, prefiero un día a solas con migo misma, se preguntaran el porqué, bueno como todos los seres humanos me conozco perfectamente por el exterior, pero si no te conoces por el interior ¿Quién eres tú en realidad?, bueno cambiando de tema ,al estar mi diminuta hermana en mi habitación, la pequeña me dijo muy entusiasmada que deseaba con ansias ir a la biblioteca, a lo que decidí preguntarle ¿Por qué este entusiasmo de ir a la biblioteca?, ella me respondió con esa hermosa sonrisa : he conocido a una nueva persona muy importante, al que yo le respondí con curiosidad, ¿a qué te refieres con interesante?, dije respondiéndole con una sonrisa, es que la verdad te contagia, la pequeña nueva mente me respondió: se trata de un niño sordo mudo quiero conocerlo mejor, creo que será uno de mis nuevos amigos, cuando mi hermanita me respondió, me ofrecí a llevarla en el auto a la biblioteca.

Narra la hermana menor:

En el auto de mi hermana, ella me sacaba temas para platicar, los cuales los respondía con gusto, contaba muchos chistes, con los cuales reía demasiado, al parecer somos el par de locas perfecto.

(Minutos después)

Hemos llegado a la biblioteca, empecé a buscar el libro indicado hasta que al fin lo encontré, empezare a leerlo.

(Horas después)

Decidí cerrar el libro, ya que estas continuas horas me sirvieron demasiado como para poder comunicarme con él, y poder hacer de unas simples señas una hermosa amistad.

(Años después)

Narra la hermana mayor:

En este momento lloro de alegría por mi hermana hace unas cuantas semanas decidí acompañar a mi hermana a la biblioteca y adivinen para que; para buscar las señales indicadas y poder decir con gusto y entusiasmo ACEPTO.

Fin

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