Cultura Manteña

La Cultura Manteña existió en los años 600 a 1530 D.C, ubicados generalmente desde Bahía de Caráquez hasta Cerro de Hojas (entre Manta y Portoviejo). Se destacaron por ser excelentes navegantes, comerciantes, agricultores esencialmente hacían rituales para espiritualizar sus almas, bebían la llamada “CHICHA” que era una jugo fermentado con todas las buenas vibras de los dioses. Durante el periodo de integración, la gente de esta cultura aumento su desarrollo cultural en la agricultura, en la pesca de playa y de mar adentro, en la cacería pero sobretodo en la artesanía y en el comercio. Mantenían una organización social rígida basada en la estratificación o rangos de poder bien establecidos, sustentados en subdivisiones territoriales de mayor a menor jerarquía socio-económica. La ciudad más importante era Jocay (Manta), poseía alrededor de 20 mil habitantes. A lo largo de la costa existieron varios centros urbanos que debieron funcionar como lugares de intercambio. Las excavaciones arqueológicas han encontrado muchas de sus ruinas, pudiéndose comprobar que pudiéndose comprobar que había entre ellos marcadas diferencias en relación al tamaño, población, arquitectura civil y religiosa, razón por la cual algunos asentamientos alcanzaron el estatus de grandes metrópolis, y centros ceremoniales como el caso de Manta, Cerro de Hojas, Agua Blanca, Salango, etc. Los Manteños tuvieron un importante centro ritual localizado en el este de la Plata, 43 km de noroeste de Salango, lugar de peregrinación desde tiempos tan remotos como Valdivia III. Muchos de los habitantes de esa época creían en muchos de los dioses entre ellas la Diosa Umiña, que fue la más importante, las mujeres le rendían culto a la Diosa Venus que era la Diosa de la Fertilidad, adoraban al cielo, a las estrellas, al mar, a la luna, especialmente al sol y a la tierra. Creían en los 3 mundos o cielos: El mundo Celestial, El inframundo y el Mundo en el cual vivimos en muchas ocasiones a los muertos se los enterraba con sus pertenencias, al lado de sus casas, cuando ya estaban esqueleto se les pintaba los huesos más largos de color rojo, los llevaban a casa para que les traiga bendiciones a sus cultivos.

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