Derecho Romano

1.1-Concepto del Derecho romano

El Derecho romano es un derecho histórico, lo cual quiere decir que no se encuentra en vigor. Se desarrolló entre el año 753 a.C. (fundación de Roma) y el año 565 d.C. (muerte del emperador Justiniano). El lugar de origen del Derecho romano fue la primitiva ciudad de Roma y su pequeña área de influencia. En su origen, el Derecho romano contó con unas instituciones muy básicas, que se desarrollaron con el tiempo según lo exigió la sociedad.

El Derecho romano es un sistema perfecto, puesto que lo conocemos de principio a fin, nos permite estudiar sus fallos y aciertos. Constituye además un sistema válido para el estudio del Derecho, una forma de aproximarse a los conceptos jurídicos básicos.

El Derecho romano puede definirse como el “conjunto de normas jurídicas que rigieron la vida social del pueblo romano desde su fundación, en el año 753 a.C. hasta la muerte de Justiniano, acaecida en el año 565 d.C.”. Es entendido como la experiencia jurídica del pueblo romano. Lo encontramos en la compilación de Justiniano, el Corpus Iuris Civilis. Se trata pues, de un ordenamiento jurídico impuesto por instituciones ajenas al individuo y que todos estamos obligados a respetar, puesto que el Derecho pretende evitar conflictos sociales. Sorprende además por su perfección, su pervivencia en el tiempo (siendo aplicado directamente en Alemania hasta 1900) y su extensa área de influencia, siendo la raíz común de los derechos nacionales de los estados europeos: el Derecho romano sirvió más allá del pueblo en que nació.

El Derecho romano, el Cristianismo y la Filosofía griega son los núcleos fundamentales de la civilización europea, es la raíz común de los derechos nacionales de los Estados europeos.

1.2-Fuentes. Fuentes de conocimiento; fuentes de producción

Las llamadas fuentes de conocimiento son aquellos instrumentos a los que acudimos para conocer el Derecho romano, por ejemplo, las leyes, los textos, un papiro. Las denominadas fuentes de producción son los organismos productores de normas jurídicas romanas y los organismos capaces de organizar el comportamiento, por ejemplo, una Constitución.

Las fuentes de conocimiento pueden ser inmediatas o mediatas, directas o indirectas, técnicas o atécnicas:

-Inmediatas: aportan información directa, como, por ejemplo, la Ley.

-Mediatas: así conocemos el Derecho romano por comparación con otras fuentes (Códex)

-Directas: por su proximidad nos conducen a la información (Edicto del Pretor)

-Indirectas: aportan información pero no de manera directa (mores maiorum o costumbres)

-Técnicas: documentos o escritos jurídicos, como el Corpus Iuris Civilis de Justiniano.

-Atécnicas: no dan información exclusiva de Derecho, sino que deriva de forma casual (usos)

En la actualidad se entiende por fuentes del Derecho cualquier testimonio del mundo antiguo que se demuestro válido para aportar información sobre

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