Derechos Humanos Disctadura Militar

Los derechos humanos son parte de la integridad de cada individuo, Se supone que cada persona nace libre de igualdad y derechos, pero en la dictadura militar esta no fue respetada.

Los militares eran los encargados de apresar a todo individuo que se encuentre en contra del gobierno actual siendo sometido a distintos tipos de tortura, pero ¿es justo humillar, atormentar e incluso asesinar a personas que presentan su descontento por el gobierno actual?

Los animales, así los vamos a llamar por la forma en las cuales fueron tratadas, sufrieron tanto psicológicamente como físicamente a través de horribles y sangrientos métodos ¿con qué fin? simplemente obtener información acerca de las personas involucradas en la oposición.

Es una pena imaginar mujeres e incluso hombres siendo violados sexualmente, pasar hambre, y los que no debían ganárselo a través de ilusos combates , los militares más que sacar información buscaban humillar a los individuos, hacerlos sentir una porquería, abusaban de su poder, dando a los individuos la sensación de tener a la muerte en sus propias manos.

“Me ubicaron en una parrilla donde me aplicaron corriente (electricidad) en las manos, tobillos, cabeza y testículos, perdiendo el conocimiento por este hecho, pero con baldes de agua fría me hicieron revivir.” Hombre, detenido en septiembre de 1973.

Este método llamado parrilla era uno de los más utilizado para obtener información, debido a que a través de corrientes eléctricas en distintas partes del cuerpo amenazaban la integridad del individuo.

¿Dónde se mantenían a los apresados? este es otro de los temas más fuertes. Las personas luego de ser torturadas eran encerradas en las conocidas casas corvi, con el fin de presionarlos psicológicamente, ¿Por qué se preguntaran? La pieza era tan pequeña que tenían que turnarse para dormir e incluso sentarse.

“En todo este tiempo se me mantuvo en una pieza con cuatro o seis presos. Con luz encendida todo el día y con salidas a tomar aire de quince a treinta minutos cada quince días. Muchas veces pasábamos más de un mes sin salida.” Arturo Villavela

No puedo creer tanta crueldad en los hechos, tanta injusticia, tanta ley pasada a llevar, nadie nunca jamás en la historia logrará comprender el sufrimiento que aquellas personas tuvieron que soportar, nunca nadie entenderá el dolor de los familiares de aquellas víctimas, la desesperación de querer saber tanto de la integridad física como psíquica.

¡somos seres humanos! No animales . Es difícil ponerse en el lugar de aquellas víctimas de la represión de la dictadura militar

si bien soy partidaria de que los derechos humanos están para cumplirse y respetarlos, como cualquier ley que existe en el país, y se debe resguardar al individuo bajo cualquier punto, la dictadura militar marco un antes y un después en este ámbito, pero ¿fueron

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