EL PODER: SU PASADO, SU PRESENTE Y SU FUTURO

EL PODER: SU PASADO, SU PRESENTE Y SU FUTURO

FERRERO, Guglielmo.

Camilo Andrés Rodríguez Villegas | Universidad Libre. Derecho Año 1

Desde siempre los principios de legitimidad han sido desconocidos e ignorados por las ciencias humanas y el derecho, ante este planteamiento el autor se pregunta si es este acaso un tema tabú del cual está prohibido hablar o no se le ha dado la relevancia que en realidad merece este asunto.

La legitimidad consiste en un acuerdo tácito y sobreentendido entre gobernantes y gobernados en virtud de la cual se establecen ciertos principios y reglas que sirven de pauta para fijar atribuciones y límites a los que necesariamente se habrán de ceñir las acciones de los titulares del poder.

Cuanto más miedo sienta el poder mayor necesidad tendrá de generar miedo convirtiéndose en círculo vicioso con consecuencias que pueden llegar a ser catastróficas, la legitimidad es así, un esfuerzo para salvar a los hombres de este indeseable tormento.

Todas las formas de poder que se han sucedido en la historia antigua fueron totalmente ilegítimas con la excepción de la República romana, la cual llegó a tener una forma de poder plenamente legítima y aceptada por todos sus ciudadanos.

El primer principio de legitimidad fue el heredado Aristocrático-monárquico que no fue más que un estado de exaltación mística en la cual era preferible creer ciegamente en él como un principio único y absoluto para así asegurar su persistencia en el tiempo. Asimismo este principio permitió que reyes, emperadores y nobleza fueran tratados por sus siervos con total reverencia propia del papa o del mismo Dios.

Hoy en día el problema del poder para el hombre es una especie de montaña enorme llena de dificultades que amenazan con cortar el paso a toda la humanidad, detrás de esta gran montaña están las fértiles llanuras del porvenir, pero solo es posible llegar a ellas atravesando esta gran montaña y sorteando las dificultades del ascenso. Esta está compuesta por siete cotas escalonadas hasta la cima de la gran montaña.

La primera etapa corresponde a la rebelión de los súbditos contra el poder, esto es, la revolución. De acuerdo con la comparación de Bismarck, el liberalismo es algo muy trivial en comparación con el inminente peligro que la revoluciónrepresenta. El termino revolución nos muestra dos sentido, la primera nos traduce una nueva orientación del espíritu humano, el otro se refiere a la destrucción total o parcial de una legalidad preexistente. La revolución como destrucción de la legalidad tiene como causa principal e debilitamiento y/o envejecimiento de progresivo de la forma de poder gobernante y como consecuencia, el desencadenamiento de sentimientos de miedo entre los hombres contemporáneos a esta.

Los principios de legitimidad constituyen la segunda etapa en el ascenso a la gran montaña, contrario a lo que se podría creer estos principios no son fácilmente reemplazables, además de ser numerosos, la humanidad no ha tenido la posibilidad de escoger libremente el principio de legitimidad

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