Educacion Chilena

En Chile, la educación ha sido históricamente una responsabilidad y una tarea que asumió el Estado, apoyado por privados. Desde el gobierno de Pedro Aguirre Cerda en donde señalaba que “gobernar es educar”, la educación se convirtió en orgullo nacional, una tarea docente llevada con sacrificio en donde privados fueron actores principales, a través de establecimientos educacionales sin fines de lucro, complementados y apoyados por el Estado, establecimientos ligados a instituciones religiosas o filosóficas en donde la formación de sus alumnos regía en torno a la entrega de valores. En aquellos tiempos la educación tenia el fin de mejorar el país, educación era sinónimo de pasión y vocación por la mejora del país, para la educación de sus ciudadanos y por ende la mejoría de este, y en donde no había cabida para el lucro.

Entonces, ¿Por qué existe hoy algo que nos perjudica tanto como lo es el lucro?

Según la Real Academia el lucro es una "ganancia o provecho que se saca de algo". Esta definición es parecida a la de beneficio: "Ganancia económica que se obtiene de un negocio", el que a su vez es definido como: "Aquello que es objeto o materia de una ocupación lucrativa o de interés". Si existen institutos educacionales que tienen el fin de generar dinero en vez de mejorar la sociedad a través de la educación, entonces difícilmente podremos ser un país desarrollado con igualdad de opciones educativas para todos.

Desde la municipalización de la educación y la incorporación de instituciones educacionales con fines de lucro en la década de 1980, la educación pasó a ser un negocio más en donde ya no se tenía como objetivo la mejora de la sociedad, sino, lucrar.

Por más de 20 años esta ha sido el racional que ha imperado en nuestro país, y en donde los resultados están a la vista. Los resultados globales de nuestra educación están por los suelos. A nivel mundial contamos con un esquema en el que la introducción de la lógica del lucro no ha producido mejora alguna.

Desde que el lucro se incorporó en la educación y los establecimientos educacionales se vieron envueltos en la competitividad, la calidad en la educación solo empeoró ya que ahora la educación era directamente proporcional a la cantidad de dinero que tuvieran los padres para pagar por ella, y teniendo en cuenta la gran cantidad de gente pobre y de clase media, no se puede garantizar una educación de calidad para todos.

El lucro no solo divide aun más la sociedad sino que impide el desarrollo educacional para todos los chilenos, y el del país, ya que la educación es el principal pilar para el desarrollo de la sociedad.

Si queremos de verdad pasar a otro estado de desarrollo, tenemos que hacer un cambio radical en el modo en que educamos a nuestro país. Debemos construir un sistema

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