El Seductor De La Patria

Era hace una vez en México; si es que podíamos llamarle así, pues buscábamos… ¿En realidad buscábamos algo? La lucha por el poder es desde tiempos inmemorables fuente de guerras, levantamientos, creaciones de ideas, dogmas, que intentan descifrar de dónde venimos y para imponer hacia dónde vamos, la lucha para saber quién sabe la verdad, por lo que siempre es relativa difusa sobre todo manipulada, creamos para destruir o destruimos para crear “a nuestra imagen y semejanza” una sociedad utópica.

Hay muchas ironías dentro de especie humana, tan grandes como ridículas que nos demuestran lo defectuosos que somos como especie; tan cargados de una genética defectuosa, una mente sin límites, aunque tan frágil, una visión interna y externa tan fácil de cubrir, así como los muchos vicio-tipos en los cuales perdemos objetividad; aunque siempre pasamos por alto la más importante de todas que es el egoísmo.

El caso de la Conquista de España sobre los diferentes Imperios en Mesoamérica, implico el hecho de que se encontraron con personas Civilizadas y con mejores condiciones de vida viéndolo desde el punto de vista espiritual, alimenticio, y de salud. Ver Hombres de tierras lejanas quiero creer que pudieron ser buenos anfitriones y dejar a un lado la teoría de que eran vistos como dioses, si estaban: mugrosos, desde luego hambrientos, enfermos ni se diga; por lo que para mí la nobleza de estas culturas imponentes fue para mí la principal caída ante los oportunistas plebes, pues vieron una oportunidad para crecer en el estatus social al que pertenecían, el interés personal siempre es justificado.

Todos sus defectos como virtudes fueron heredadas se mezclaron con las de los nativos, y muchos de esos defectos tanto genotípicos, fenotípicos que se reflejan en identidad que viene aquejándonos hasta en la actualidad como: sociedad y de individuos. Si bien se toman en cuenta todos los factores, aceptando los aciertos junto con los errores desde un punto de vista crítico y objetivo se puede hacer una conjetura sana de una especie insana. Sin embargo es la aceptación de la realidad y mirarnos donde nos encontramos en nuestro entorno social y el mundo.

Antonio López de Santa Anna nos muestra su vida desde el punto de vista biográfico, pudo o no ser modificado por su encomendado o no, pero tomando en cuenta el desarrollo de la historia y nos va mostrando cómo se desenvuelve un país bajo el Virreinato de la Nueva España, en cuanto el va creciendo va surgiendo un nuevo estado, mostrando que así como cambian los Intereses personales cambian los intereses nacionales, pues así se hace política hasta la actualidad, sólo que ahora tienen asesores que tampoco tienen la menor idea; por lo que los tiempos cambia.

Algo muy arraigado en la personalidad del mexicano es el hecho de hacernos pendejos, ante las situaciones, dejando las cosas a medias sin medir las consecuencias de lo que puede pasar, pues queremos creer que tenemos el control de los problemas y simplemente dejamos para después las cosas, algo que analizando a los Estadounidenses tenían bien claros sus objetivos y misiones para llevar acabo el desarrollo de poner pieza por pieza a la Nación, que no por algo es lo que la hace ser en la actualidad el país más líder a la cabeza de las decisiones económicas y políticas.

Estas situaciones no eran ajenas a Santa Anna, dándose una importancia en cierto punto exagerada, con buenas ideas aunque al final de cuentas desperdiciadas por no tomar las riendas en algunos puntos que pudieron ser de buena función en la toma de decisiones para el país. Una actitud aplaudible es la manera de defender sus ideales con su propia sangre, ¿a costa de que sirven los ideales y defenderlos si se hacen las cosas a medias? Esa fue la causa por la cual murió en una miseria existencial, ahogándose en recuerdos y aferrándose al pasado que ya lo había olvidado como héroe y lo recordaba como traidor.

Siempre solemos voltear al pasado arraigándonoslos a lo que tuvimos y no al que pudimos tener en la creación de acciones tangibles, olvidándonos de el súper Yo y crear en conjunto lo que pudo ser el no meterle la cabeza en el agua a los Estados Unidos Mexicanos trayéndolo con el puro tehuacanaso durante 200 años que con ímpetu de guerrero azteca no se sede sin ningún motivo a caer de la grandeza que tuvo en sus épocas prehispánicas esperando a resurgir cuando se tomen las cuentas claras y llevar al país por el rumbo que debió de tomar desde su “independencia”, esperando a que nuestra genética haga su parte haciendo justicia a la parte podrida que se tiene.

Antonio siempre salto al frente de los levantamientos armados por lo que cada que tenía que limpiar los platos rotos de los demás, lo hizo con una gran fuerza y hazaña por el bien del México y su futuro, acompañado del elogio que esto le traería si salía vencedor de las batallas libradas, pues él defendía la sagrada Constitución y las leyes que emanaban de su poder queriendo que se respetara, para que se hiciera cumplir y no fuera solo un papel más que hubiera servido de pretexto para alejarse del seno de la madre patria, saqueando sus riquezas naturales y despilfarrarlo todo en vicios como gallos, pulque, vestidos, carros y fiestas que después habrían de olvidarse, mostrándonos como el hijo rebelde emancipado que moriría victima de sus propios vicios.

El mundo vivía una época de grandes cambios, políticos, ideológicos, económicos y se reacomodaba el sistema político de los países, cerrándonos entre nosotros el paso de aquellas ideas europeas que le dieron el salto de las Monarquías a estados democráticos, aunque algunos solo hayan dejado a los Reyes como representatividad diplomática pero la toma de decisiones entre el parlamento de gente tendría

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