Evolución del cuento a partir de 1949.

Evolución del cuento a partir de 1940

El cuento hispanoamericano del siglo XX expresa las tendencias propias de cada etapa (realismo y naturalismo a principios de siglo, modernismo, vanguardias…) pero a partir de 1940 experimenta una importante renovación, tanto temática, ligada a la cultura urbana y a temas existenciales, como estilística, ligada a la asunción de las vanguardias y realismo mágico, que lo convierte en uno de los géneros literarios más originales y de mayor vitalidad de este siglo hasta nuestros días.

Entre los principales autores podemos destacar a Jorge Luis Borges y a Julio Cortázar.

Jorge Luis Borges (1899-1986),  asume en sus cuentos temas existenciales y filosóficos. Este se pregunta por el sentido de la vida, por la identidad, por el paso del tiempo e incluso por la muerte. Para abordar estos temas y elaborar un camino hacia la imaginación, va a utilizar símbolos. Utiliza, entre otros: el espejo, como símbolo de la identidad; el laberinto, para expresar el sin sentido de la vida; la inmensidad del espacio, como indignación sobre la muerte; y la circularidad del tiempo, para expresar el paso del tiempo. Es importante destacar el gran sentido del humor con que trata estos temas tan duros.

En su estilo personal encontramos mitos clásicos, citas literarias reales o ficticias de la literatura inglesa, alusiones históricas y reflexiones filosóficas, abundantes paradojas, y símbolos, como se ha visto anteriormente, dentro de un uso lingüístico que busca ser claro y comprensible. Cabe decir que aunque asume un gran compromiso social, este no se ve reflejado en sus obras.

Sus principales libros de cuentos son Ficciones (1944), El Aleph (1949) y El libro de Arena (1970).

Julio Cortázar es otro gran autor de cuentos, que pertenece a una generación posterior a Borges, a quien toma como gran referente. Aunque, cabe decir que este sobre todo trata de innovar y la verdad, que lo consigue. Por otro lado es importante añadir que la cultura precolombina y el compromiso social y político quedan muy relejados en su obra.

Cortázar, en sus cuentos, trata temas existenciales, fantásticos (fusión de realismo mágico y vanguardias) y sociopolíticos.

En cuanto a su estilo cabe decir que es creativo en el lenguaje, aunque eso sí, ante todo la estructura debía ser perfecta. También están muy presentes en sus obras, el juego y el humor surrealista.  

Sus cuentos se agrupan en Bestiario (1951), Final de juego (1956) y Las armas secretas (1959). En 1970 amplió un libro publicado en 1962, bajo el título Historias de cronopios y famas, que anuncia la visión irónica, rebelde y un tanto amarga de sus novelas posteriores, sobre todo Rayuela.

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