Fundación De Nueva Cádiz

República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Defensa

Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana

Núcleo Nueva Esparta

Realizado por:

Torres Rosa V-C.I: 17.118.573

Administración 74409-01M

Profesor: Justo Mejías

Sábado 18/01/2013

Índice

Introducción………………………………………………………………………………….03-04

Desarrollo………………………………………………………………………………………….05

Conclusión……………………………………………………………………………………..14-15

Bibliografía…………………………………………………………………………………………16

Anexos……………………………………………………………………………………………17-18

Introducción

La isla de Cubagua tiene una superficie de 22.438 Km2 con una dimensión de 9 kilómetros de largo por cerca de 3 de ancho aproximadamente, la cual pasó a formar parte del Estado nueva Esparta el 28 de enero de 1948. Su fama a raíz de su riqueza perlera fue su desgracia. Siendo considerada como el emporio perlero más importante del Nuevo Mundo.

Cubagua tuvo un significado muy importante a raíz de haber sido un reservorio especial de madreperlas productoras de perlas de las más exquisitas tallas, perfección y tamaño, como no hay otros mares. La transparencia de las aguas, profundidad, temperatura, arena y plancton, constituyen condiciones únicas e inimitables, como supieron apreciar los que en un determinado momento conocieron las fabulosas gemas del mar, que desde tiempo ancestral explotaban los Cubagüenses, como la primera de las cuatro agrupación humana que se instaló en la isla a partir del año 4.320 antes de Cristo.

La mayoría de los historiadores afirman, que Cubagua fue avistada por Colón el 15 de agosto de 1498, cuando en su tercer viaje, cambió la ruta hacia La Española, y se fue más al Sur para descubrir Trinidad y el Golfo de Paria, sin percatarse de que estaba frente a un Continente. Sin embargo, otros aseguran que fue cuatro años antes, en su Segundo Viaje en 1494, cuando viajaba en compañía de Cristóbal Guerra, pero ocultó el descubrimiento para quedarse con las perlas que debía declarar a la Corona.

Es así como “Cubagua“, como la llamaban los guaiqueríes, adquirió fama internacional, junto a “paraguachoa (Margarita)” y “cochén (coche)”, las otras dos islas que conforman la región insular del Estado Nueva Esparta.

Cubagua y la fama de sus perlas de tamaño razonable para muchos, cautivaron la avidez de comerciantes, aventureros y bandoleros, que se dirigieron hasta la isla con el solo propósito de obtener el fabuloso tesoro del mar, que sólo los guaiqueríes, nativos de la isla, conocían de su ubicación.

Sin embargo se considera, que motivado a la maldición de la perlas de Cubagua, se aniquilaron todas las civilizaciones nativas de Sudamérica quienes poco a poco fueron desapareciendo de sus lugares de origen.

Cubagua tiene también la primicia americana, en que en sus aguas se suscitó la primera batalla naval del continente.

En el presente trabajo se podrá conocer un poco más de lo que significo Cubagua en tiempos atrás, donde además de existir riquezas y desarrollo también su produjo los más crueles castigos y vejaciones que puedan existir en la humanidad.

Desarrollo

Cubagua fue descubierta en Agosto de 1498, en el curso del tercer viaje de Cristóbal Colón, y fue entonces cuando se tuvo conocimiento directo de la riqueza perlera existente en sus proximidades lo cual había de provocar el interés, por no decir la ambición desmedida, de los descubridores y posteriormente de la Corona Española.

A partir de 1499, se inicia la obtención de las perlas por el sistema de rescate con los indios. Siendo en este mismo año cuando Alonso de Ojeda llegó a la isla incitado por las maravillosas perlas narradas por los marineros. Con gran facilidad cambiaba cuentas de vidrio sin mayor valor, por preciosas perlas que los nativos intercambiaban ingenuamente, no obstante que para su obtención, constituía una actividad, propia de los nativos, que requería de gran habilidad y buenos pulmones para sumergirse por casi cinco minutos en cada inmersión, luego que el buceo dejó de ser un aspecto cultural de los nativos de la isla, para convertirse en una explotación inhumana que diezmó a los habitantes de Cubagua.

Varios historiadores apuntan las fechas de 1511 – 1512, como la del establecimiento de las primeras rancherías de españoles dedicados, desde entonces, a la explotación de los ostrales. Lugar donde también se albergaban los sediciosos comerciantes que, en su avidez, comenzaron a esclavizar a los nativos para asegurarse una provisión permanente de perlas, lo que fue diezmando poco a poco la mano de obra representada en los nativos guaiqueríes que, desde tempranas horas de la madrugada hasta llegada la noche, eran obligados a sumergirse para sacar las conchas de “madre perla” aferradas al fondo marino.

La impresionante cantidad de perlas que día a día sacaban los nativos del fondo del mar, aceleró la llegada de más y más comerciantes que fueron modernizando las rancherías, para convertirlas en una Villa de más de mil habitantes y con todos sus servicios, hecho que facilitó la conjunción de una sociedad organizada al mejor estilo de los puertos de Europa, donde funcionaban hosterías, tabernas, tiendas de víveres, almacenes, áreas residenciales, capillas; en fin, poco a poco fue creciendo una metrópolis comercial en esta parte del Caribe, como la primera en su tipo en todo el continente.

El auge comercial de Cubagua trajo consigo la instalación de un gobierno formal que construyó sus oficinas públicas, e instaló al Tesorero Real que vigilaba el pago del “quinto del rey” o llamado Quinto Real que debían entregar todos los comerciantes y explotadores de perlas de la isla, el cual fue instrumentado como un impuesto confiscatorio que obtendrían los Reyes Católicos y el Sumo Pontífice por la autorización de explotar en el Continente americano. Para el año de 1515 Cubagua era una metrópolis que deslumbraba por la cantidad de barcos que atracaban en sus puertos.

Es así como en Cubagua se instalan las Oficinas de Hacienda para el

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