GEOGRAFÍA HUMANA

REGLEXIÓN: “QUERER ES PODER”

Los hechos sociales y el querer del individuo

En la cotidianeidad de nuestro tiempo muchas personas, a mi pensar, han podido escuchar el dicho: “Querer es poder”. Dicho conocido y popular que – sin darnos cuenta – está inserto en nuestro inconsciente colectivo, produciendo efectos en la constitución del sujeto moderno, quien pretende o quiere lograr alcanzar una posición ventajosa.

Según este dicho basta con que el individuo quiera, es decir que tenga el deseo, la voluntad o la intención de concretar algo para que lo pueda hacer. De tal forma, que la persona ponga en evidencia sus afectos hacia lo que quiere lograr u obtener, lo que luego se convertiría en poder.

Probablemente, el hombre a raíz de una superación consciente respecto a su evolución en los diferentes ámbitos, ha ido originando una consciencia generalizada basada en la frase “querer es poder”, en base a la cual el ser humano ha desarrollado una nueva mentalidad que le permite consolidar los logros deseados. Sin embargo, al parecer este “deseo” del hombre – muchas veces – parecería que no se manifiesta como tal en la realidad.

Dicho lo anterior, esta frase se ve amenazada por fenómenos sociales como hechos, fuerzas y corriente, que configuran y controlan nuestras vidas. Estas fuerzas se convierten en una amenaza para el “querer es poder”, pues el ser humano nace y vive en una sociedad que, según Durkheim instituye al individuo humano. En este contexto, se evidencian hechos sociales “como modos de actuar, de pensar y de sentir, exteriores al individuo, dotados de un poder de coacción en virtud del cual se imponen sobre él” . En efecto, el querer efectuar ese deseo o intención del individuo, es decir dicho comportamiento en específico se ve limitado por la sociedad, mirada como algo externo a la gente, en la medida que tales factores como las corrientes y los hechos sociales forman el ambiente y posición social, las que afectan la opinión que tiene la persona acerca del mundo y efectivamente lo que puede o no realizar.

En definitiva, el dicho “querer es poder” puede ser considerada como una frase de carácter positivo que en muchas ocasiones favorece nuestro comportamiento, derribando barreras que imposibilitan efectuar lo que ansiamos por medio del desarrollo de cualidades, que permiten generar confianza en la persona. Sin embargo, si analizamos el dicho desde una perspectiva sociológica, es decir teniendo en cuenta las experiencias personales en el contexto de aquello que está sucediendo en el mundo que nos rodea, se puede evidenciar que no siempre lo que queremos se puede realizar. Esto, debido a que el individuo humano está inserto en una sociedad, donde por medio de la interacción social se producen hechos, fuerzas y corrientes sociales que, empujando al ser humano a un estado de grupo, en virtud de “una

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