HISTORIA DE LA INGENIERIA EN MEXICO

La contribución de los ingenieros a sus comunidades y el reconocimiento de sus gobernantes se remonta a los orígenes de la civilización, Arquímedes y sus diseños para la defensa de Siracusa en el siglo III a. c. , el renacimiento en Italia fue el lugar propicio para la manifestación del ingenio humano con Leonardo Da Vinci gracias a su gran creatividad y talento en sus diseños conceptuales del helicóptero, el submarino, el tanque de guerra, puentes, fortificaciones y canales, Galileo Galilei encontró en el tiempo de la contrarreforma la seguridad en la libertad  de pensamiento para luego ser eclipsado por la inquisición , su obra perduró en sus discípulos entre ellos Evangelista Torriceli quien desarrolló algunos principios mecánicos y el principio del barómetro que demostraba la presencia de presión atmosférica así como el principio de Torriceli de importancia fundamental en la hidráulica, Domenico Guglielmini matemático, hidrólogo y médico, Isaac Newton, Daniel Bernoulli, también las primeras academias de ciencias aportaron en el proceso de reconocimiento y desarrollo del talento como actividad relevante.

La ingeniería prehispánica en México tiene su lugar con los aztecas , extraordinarios ingenieros hidráulicos y civiles, la impresión que causó a los conquistadores el nivel alcanzado por esta civilización se refleja en las crónicas del narrador de la conquista de México:  “… Y de que vimos cosas tan admirables no sabíamos qué decir, o si era verdad lo que por delante parecía, que por una parte en tierra había grandes ciudades, y en la laguna otras muchas, y veíamoslo todo lleno de canoas y en la calzada muchos puentes de trecho en trecho, y por delante estaba la gran ciudad de México…”

El conocimiento de la química fue evidente ya que se usó el tequesquite -sales alcalinas -  para condimentar y facilitar la cocción de las legumbres y como detergente alcalinizante ligero; la sal común fue apreciada por los antiguos mexicanos, se dice que su carencia fue motivo de guerra entre aztecas y tlaxcaltecas, también conocieron el alumbre, la mica, el yeso  y la calcita, trabajaron la turquesa, el jade, el azabache, el ojo de gato, el rubí y el ámbar, usaban en forma exclusiva piedras preciosas verdes de fluorita (fluoruro de calcio) mineral del que México es el segundo productor mundial.

Cristal de roca bellamente trabajado, barro y adobe en la edificación de las más antiguas construcciones del Valle de México, vidrio volcánico para construir armas, hule como pegamento y en la medicina, tejidos con fibras de magueyes  y agaves, papel con la corteza del árbol amatl, azúcar por evaporación de aguamiel, pulque por fermentación, los aztecas conocían también los siete elementos de los alquimistas -oro, plata , cobre, estaño, mercurio, plomo y hierro- , pero a pesar de todo este conocimiento y tecnología la conquista de América se logró fundamentalmente por el dominio de las armas de los conquistadores.

Tras la conquista los transportes fue uno de los más agudos problemas, en 1590 el gobierno virreinal ordena al Ingeniero miliar italiano Juan Bautista Antonelli el trazo de un camino carretero de México a Veracruz el cual es considerado el primero en su género en el nuevo mundo. La ingeniería hidráulica se usa en México desde principios de la época virreinal, una de las primeras transferencias tecnológicas que hicieron los españoles entre el viejo y el nuevo mundo.  

De los oficios aplicados a la construcción de la vida civil la minería fue de los más importantes, la búsqueda de yacimientos minerales se incrementó notablemente por los españoles, primero y sus descendientes mestizos después, así fueron descubiertos grandes distritos mineros además de los grandes yacimientos de Durango y Chihuahua que aportaron principalmente minerales preciosos, y que fueron enviados a España.

La expansión española por el territorio novohispano privilegió tres intereses técnico-científicos: La cartografía (militar) , la medicina (botánica) y la minería (metalúrgia),  algunas de las principales actividades de los ingenieros de la Nueva España fueron las expediciones científicas y militares , fundación de ciudades y presidio y reconstrucción de fortificaciones. Estudios recientes afirman que el Real Cuerpo de Ingenieros Militares cuantificó un total de 787 individuos a lo largo del siglo XVIII que estuvieron en América y Filipinas.

La expulsión de los jesuítas de todos los dominios de España impulsó para el año 1768 que los ingenieros destinados al Nuevo Continente obtenían la promoción automática a una categoría superior y el regreso a España tras cinco años de servicio con un aumento notable del número de ingenieros.

La ingeniería de origen europeo coadyuvó a resolver los grandes problemas que se habían suscitado en la minería novohispana, la cual fue la mayor fuente de riqueza y actividad del virreinato, el proceso de recuperación de la plata por amalgamación de mercurio fue calificado como “el mejor legado de Hispanoamérica a la metalurgia universal”.

Alexander von Humboldt describía a la Casa de la Moneda de México como “la más grande y rica en todo el mundo”, durante siglos las minas mexicanas habían sido explotadas sin medida y sin planeación por lo que se procuran las Ordenanzas de Minería, un conjunto de leyes que permitieran el desarrollo armónico de la industria apoyada en la formación de profesionales con sólida base científica, también se erige el Real Tribunal de la Minería , con lo que se inicia una fecunda etapa de la Ingeniería mexicana.

El vasco Fausto de Elhuyar fue quien descubrió el elemento químico hoy llamado tugnsteno, se encargó del Real Cuerpo de Minería de la Nueva España en 1792 , fue el primer profesor de química en México, y encabezó el Real seminario de Minería, la escuela de ingenieros más antigua de América Latina y una institución que es el asiento del primer instituto de investigación científica del continente con un programa dividido en cuatro años que incluía Matemáticas, Física, Química, Topografía, Dinámica, Hidráulica , laboreo de minas , lenguas y dibujos, así como la práctica activa en algún real de minas, aquí se editan los primeros libros técnicos y científicos de la época. En 1774 dos criollos ilustrados en representación del gremio minero proponen al Rey Carlos III la creación de un Colegio Metálico con la intención de aumentar la producción de metales preciosos. Este Colegio de Minería además de ser la primera casa de las ciencias en México destacó por ser la cuna de importantes instituciones científicas como el Instituto de Geofísica, el Instituto de Matemáticas, la Facultad de Ciencias, el Instituto de Geología, el Instituto de Química, el Instituto de Ingeniería y la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México.

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