Historia De La Polvora

Historia de la Pólvora

500.000 años A.C. el hombre del paleolítico competía en base a sus fuerzas con las bestias para el alimento y el lugar de descanso. Luego descubrió que con algunas materias primas de las que disponía (piedras / maderas), su poder de defensa y ataque sería mayor. Así se comenzó a utilizar esos elementos como utensilios y armas.

Desde ese momento, pasando por el periodo neolítico, donde el hombre aprendió a pulir la piedra, dándole formas determinadas y más idóneas; el descubrimiento por parte de los Sumerios (2.500 años A.C.), la aparición de carros como armas de combate, las tácticas de combate, las catapulta, la utilización de elefantes y barcos, el fuego griego, las ballestas y los arcos (1.200 años A.C.); el hombre se fue preparando y perfeccionando para el más catastrófico de los productos de la civilización... La Guerra.

Sin duda, cada uno de estos inventos marcó importantes etapas en el proceso evolutivo, pero hubo uno que dejo en el recuerdo todo lo anterior, que provoco vaivenes inesperados en la historia, destruyo y creo nuevas civilizaciones, y cambio conductas, actitudes y formas de pensar, que perfeccionó al máximo el ataque y la defensa... La Pólvora.

El porqué de esta afirmación tan categórica es fácil de deducir, superado ya el combate cuerpo a cuerpo (por espadas, hachas, armaduras, etc.), el combatiente tuvo que buscar eliminar a su contrincante a la distancia (armas, ballestas, arcos, etc), para poder acceder a la toma de fortificaciones que protegían a las ciudades más importantes y para la lucha entre embarcaciones. Estos elementos tenían un relativo poder y sin duda triunfaba el que podía arrojar el elemento más dañino a mayor distancia y con mayor fuerza de ataque.

Al parecer la Pólvora en la escena, no cabía duda de quien era el ganador, de aquel que poseía la formula, esa mezcla de sustancias que al encenderse se provocaba una importante masa gaseosa capaz de empujar un proyectil hacia el blanco con una fuerza inusitada para la época.

¿Quién fue el primero que la tuvo en su poder?, ¿Quién la invento? La historia y la leyenda tienen muchos y contradictorios testimonios.

La pólvora, el primer explosivo conocido, fue descubierta por casualidad en China en torno al siglo IX. Su hallazgo parece ser fruto de las investigaciones de algún alquimista que, en su búsqueda del elixir de la eterna juventud, dio por accidente con la fórmula del explosivo. De hecho las primeras referencias a la pólvora las encontramos en textos herméticos advirtiendo de los peligros de mezclar determinadas sustancias.

En el siglo X ya se utilizaba con propósitos militares en forma de cohetes y bombas explosivas lanzadas desde catapultas. Se sabe que ya en el año 1.126 se utilizaban cañones hechos de tubos de bambú para lanzar proyectiles al enemigo. Más tarde esos tubos serían sustituidos por otros de metal más resistente; el más antiguo del que se tiene noticia data de1290.

Desde China el uso militar de la pólvora pasó a Japón y a Europa. Se sabe que fue usado por los mongoles contra los húngaros en 1241 y que Roger Bacon de la Universidad de Oxford publicó un libro en el que explicó los métodos de hacer la pólvora, en el 1242. Hasta ese momento Europa sólo había contado con un producto inflamable llamado "fuego griego" que sin embargo no podría competir con la efectividad del recién llegado invento.

Marco Polo en el año 1.275 aseguro haber visto en la antigua China, fuegos de artificio. Los biógrafos de Alejandro Magno que a la entrada del soberano a Babilonia hizo girar una girándola (artificio multicolor).

Concentrando los datos existentes que se hallan archivados en la biblioteca de París, un manuscrito de Marcus Gralcus titulado “Liber Ignium” (del fuego) que data del siglo XIII a.C., donde se descubre un compuesto explosivo formado por: seis partes de salitre, dos partes de azufre y dos partes de carbón vegetal (prácticamente el mismo compuesto empleado en la Pólvora al principio de este siglo).

Numerosos perito coinciden en señalar que el Monje alemán llamado Berthold Schwart, como el descubridor de la Pólvora en el año 1.313. Este monje fue ejecutado por orden del Rey Wenceslao IV (Emperador alemán), por haber vendido su producto a la Republica de Venecia.

En 1886 Paul Vielle inventó un tipo de pólvora sin humo hecho con nitrocelulosa gelatinizada mezclada con éter y alcohol. Esta mezcla se pasaba por unos rodillos para formar finas hojas que después se cortaban con una guillotina al tamaño deseado. El ejército francés fue el primero en usar este nuevo tipo de explosivo, que no formaba humo y era mucho más potente que el anterior, y otros países europeos no tardaron es seguir su ejemplo. Muchas otras innovaciones se sucedieron en el campo de los materiales explosivos hasta llegar a la actualidad, pero sin duda la aparición de la pólvora en occidente en la Edad Media fue el acontecimiento más significativo.

Sea cual fuera el origen de la Pólvora apareció en el mundo y se vendió rápidamente. Estamos en condiciones de aceptar que la Pólvora utilizada en esa época, es la que hoy se conoce como Pólvora negra, cuyo compuesto es: Carbón vegetal, que es el elemento de combustión; 8 % de azufre, baja la temperatura de combustión y 12 % de nitrato de potasio, elemento que durante la combustión libera oxígeno y permite que este continué o se produzca en un recipiente cerrado.

Así mismo definiremos a la Pólvora en general como:” un compuesto químico que al entrar en combustión por medio de un estímulo externo, desprende una masa calórica y otra gaseosa, cuando se quema la pólvora y produce gases. Esta última si es correctamente encausada tiene la propiedad de desplazar cuerpos duros”.

En sus comienzos se constituían por simples mezclas de elementos que generalmente se la mezclaban en el mismo momento de usarlas. A la pólvora negra también se la llama mecánicas por estar formadas por mezclas de sustancias combustibles y comburentes (sustancia que genera oxígeno para poder producirse la combustión), y sin procesos químicos que intervengan. Es extremadamente sensible al calor y a la fricción; y la ignición se produce por la rápida oxidación del carbón y el azufre usando el oxígeno liberado del nitrato de potasio, y al quemarse libera una gran cantidad de calor pudiendo llegar hasta alrededor de los 1700 grados.

Cómo en sus comienzos no se lograba un graneado muy homogéneo en tamaño y forma ya que la irregularidad daba formas tal cómo esférica, en tabletas, hexagonales, cúbicas y demás; la combustión era muy variable provocando efectos indeseables cómo la explosión del arma misma.

Las primeras mezclas de las que

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