Historia De La Tinta
tierno1764 de Junio de 2013
4.964 Palabras (20 Páginas)845 Visitas
Historia de la Tinta:
La tinta es un líquido que contiene varios pigmentos o colorantes utilizados para colorear una superficie con el fin de crear imágenes o textos. Comúnmente se considera que la tinta es utilizada en bolígrafos o pinceles; sin embargo, es utilizada extensivamente en toda clase de impresiones.
Se atribuye la invención de la tinta a los chinos, quienes la inventaron unos 2500 años antes de Cristo. Las primeras tintas estaban hechas con tinturas vegetales naturales.
Ya en las primeras pinturas rupestres creadas por el hombre en las cuevas y paredes rocosas, se encuentran rastros de emulsiones coloreadas con las que pintaban sus trazos.
La tinta se comenzó a usar en la antigüedad para escribir en papiro. Consistía en la unión de un pigmento llamado negro de humo, cola y sustancias aromáticas, y había que mezclarlas con agua para luego usarlas. Fueron las conocidas con el nombre de tinta china, y eran prácticamente permanentes porque el carbón del negro de humo es químicamente inerte y la luz del sol no lo decolora ni lo afecta de ninguna manera. En la actualidad se utilizan para dibujos y artesanías, y se fabrican de todos los colores, con diversos tintes sintéticos que reemplazan al negro de humo.
La tinta china es negra y originaria de Asia. La tinta de nuez fue utilizada por muchos artistas antiguos para obtener coloración marrón-dorado utilizada en sus dibujos.
Se han encontrado también en Egipto antiguas escrituras en negro y rojo, en papiros escritos con cálamo, en algunos hipogeos. Los egipcios escribían sobre rollos de papiro, que se obtenían cortando en tiras esta planta, colocando las tiras en capas, mojándolas, prensándolas y dejándolas secar. Los emperadores del Imperio Romano Oriental firmaban sus edictos con una tinta purpúrea hecha con una secreción de la glándula hipo branquial del murex, un género de molusco gasterópodo que producía la púrpura. El emperador León prohibió el uso de ésta a cualquier persona que no fuera miembro de la realeza. En el antiguo Imperio Romano este pigmento se usaba exclusivamente para teñir el borde de la toga de los senadores y las capas de los generales. Los antiguos pintores y calígrafos eran funcionarios del Estado y disfrutaban de muchos privilegios.
Se escribían también algunos libros con letras de oro o plata, tales como los libros sagrados traducidos por los setenta y dos intérpretes copiados en pergamino con letras de oro que Eleazar, príncipe de los sacerdotes envió a Tolomeo II Filadelfo, ejemplar que demuestra la antigüedad de esta costumbre. En el imperio de Oriente estuvo tan admitida la práctica de escribir en oro que la historia de Constantino hace mención del oficio de crisographos o escritores de letras de oro.
Se escribía antiguamente con tinta colorada que llamaban indiferentemente milton, minium, cinabrio y sinopis cuyas voces explica Plinio. De este color se servían para las letras mayúsculas, para los títulos y sinopsis de los capítulos de las leyes, cuyo resumen facilitaba la memoria y la inteligencia.
Cuando aparecieron las lapiceras estilográficas o plumas, se fabricaron tintas especiales con agentes humectantes que facilitan su salida de la pluma y su rápida penetración en el papel, con un secado rápido. Los bolígrafos usan tintas más similares a las de imprenta y necesitan mayor concentración de tintes que la estilográfica, porque son mucho más finas.
Han aparecido también, cintas entintadas para máquinas de escribir, y en la actualidad, tintas de impresoras para computadoras, así como impresoras láser que emplea un tóner en polvo. También algunas máquinas de fax funcionan con papel sensible al calor.
La tinta negra más permanente es la de hierro, una tinta de nuez de agallas que se obtiene de la combinación de una sal de hierro con una mezcla de ácido gálico y tanino en agua. Este compuesto tiene poco color al aplicarlo sobre el papel, pero al secar se torna negro.
Hasta mediados del siglo XX se usaron los tinteros de escritorios y escuelas, donde se colocaba la tinta para la escritura de documentos y trabajos.
Tintas para Imprenta:
Las primeras que se utilizaron en Europa estaban hechas de negro de humo mezclado con barniz o aceite de linaza hervido. El desarrollo de las tintas de color tuvo lugar a finales del siglo XVIII; en el siglo siguiente se consiguió incorporar a la fabricación de estas tintas una gran variedad de pigmentos, gracias a la aplicación de secantes. Más tarde, y para obtener tintas que pudieran ser utilizadas en diferentes clases de papel y de prensas, se incorporaron barnices con diferentes grados de rigidez. Con la introducción de las prensas para periódicos, con bobinas de papel continuo, se sustituyeron los barnices por aceites minerales. La manufactura de la tinta no alcanzó hasta el siglo XX el grado de complejidad que el proceso tiene en la actualidad: mezclar el pigmento con el aglutinante, moler la mezcla entre rodillos, añadir secantes y, cuando los pigmentos son químicos, filtrar.
Las tintas de imprenta se parecen más a la pintura que a la tinta para escritura y son menos fluidas. Existen varias clases de tinta para imprenta; la elección depende de las técnicas de impresión, de la velocidad con que se vaya a hacer ésta y de la clase de papel que se vaya a utilizar. La tinta de imprenta negra más simple, que se emplea en las prensas tradicionales de baja velocidad, está hecha de negro de humo en aceite de linaza, al que generalmente se ha añadido un secante. Los métodos de impresión complejos requieren tintas que a veces tienen hasta 15 ingredientes, que afectan su rendimiento, su aspecto y su duración. En muchas tintas modernas los aceites utilizados tienen la ventaja de un secado más rápido que permite una mayor velocidad de impresión.
Tintas para Multicopista:
En las multicopistas de oficina o máquinas copiadoras se suelen emplear dos variedades de tinta. En las hectográficas, se usa una tinta con una gran concentración de tinte en una solución de glicerina o de alcohol. La tinta de multicopista tiene negro de humo o carbono en un aglutinante oleoso. La tinta de las cintas mecanográficas y de los sellos de caucho está compuesta de tintes en agua, con la glicerina necesaria para evitar que se seque en la cinta o en el tampón o cojinete.
Sistemas de Impresión modernos:
Los sistemas de impresión son procesos utilizados para reproducir textos o imágenes, como la imprenta, litografía, tipografía, flexografía, grabado y serigrafía. Todas estas técnicas utilizan mecanismos sencillos que consisten en aplicar sustancias colorantes a un soporte, ya sea de papel o plástico, para realizar múltiples reproducciones.
Litografía:
En la actualidad, la técnica más importante y versátil es una variante de la litografía. El inspector cartográfico alemán Aloys Senefelder fue quien sentó sus principios básicos a finales del siglo XVIII, gracias a sus experimentos con métodos de fabricación de superficies de impresión en relieve utilizando un proceso de corrosión con ácidos. Se convirtió pronto en una técnica popular, ya que permitía al artista producir muchas copias de un dibujo a mano alzada.
Las planchas litográficas constituyen las superficies de impresión más económicas en la actualidad, lo cual ha contribuido enormemente al éxito del proceso. El sistema es planográfico, la forma de piedra. El soporte es el papel, la tinta es grasa, la presión es plana y la impresión es directa. Ventajas: Facilidad para realizar la forma que se usaba para las imágenes en el siglo XIX. Desventajas: Fácil pérdida de imagen, fragilidad de la forma, dificultades de archivo y lentitud del sistema.
Offset:
El sistema es el planográfico, la forma de aluminio y plástico, el soporte de papel, la tinta es grasa, la presión es rotativa y la impresión es indirecta. Ventajas: Sistema más cuidado y estandarizado por los fabricantes de maquinaria de impresión, acabados y materias primas. Tiene muchos avances tecnológicos. Puede realizar grandes ediciones económicas, en breve espacio de tiempo, de gran calidad sobre cualquier tipo de papel. Desventajas: Derivados de un complicado proceso de impresión, en el que el agua es su principal problema, porque obliga a mantener un equilibrio agua-tinta en toda la tirada, lo que genera altibajos en la entonación. La tinta, el papel, el agua y la velocidad generan problemas de difícil solución, como es el arrancado, el aumento de punto o el repintado.
Tipografía:
La tipografía, la forma más antigua de impresión, nació con el invento del tipo de imprenta metálico y móvil fundido a mediados del siglo XV, y durante cinco siglos fue la única técnica de impresión para grandes tiradas. A mediados del siglo XX, y a pesar de su superioridad en cuanto a claridad de impresión y de densidad de la tinta, la tipografía cedió su predominio al offset por ser un proceso mucho más rápido.
El sistema es el relieve, la forma es de plomo, y el soporte el papel. La tinta es grasa, la presión es planocilíndrica y la impresión es directa. Ventajas: Nitidez al imprimir los caracteres, con cierta calidad si los tipos de letra son nuevos y el papel es liso y blando. Útil en trabajos especiales, como en impresos numerados y perforados. Permite corrección de errores o cambios de última hora en la misma máquina de impresión y es económica. Desventajas: Tendencia al aplastamiento y cegado de las aristas de los tipos y puntos de los grabados. Se emplea en tiradas de tamaño no muy grandes sin color ni ajustes excesivos.
Impresión Flexográfica:
...