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Ideologia Nazi en Alemania


Enviado por   •  30 de Enero de 2017  •  Ensayo  •  1.855 Palabras (8 Páginas)  •  246 Visitas

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Tema: Ideologia Nazi en Alemania

Problema: ¿La ideología Nazi todavía influye en el pueblo alemán, en la actualidad?

Hipótesis: En la actualidad, el pueblo alemán no sufre de ninguna cris económica, social por ende no existe alguna manera nazca el nazismo otra vez, liderado por el partido político nacional alemán.

Objetivos:

-Saber porque aun la ideología Nazi perdura en la actualidad.

-Identificar en que partes de Alemania lo ideología ha afectado mas.

-Encontrar ideologias parecida a la Nazi.

-Hasta que punto afecta la psicología del aleman influenciado por esta ideología.

-Saber que eventos en la historia de Alemania han sido influenciado por la ideología Nazi.

Justificación:

El grupo escogió el tema de la ideología nazi en Alemania debido a que es un tema el cual se debe de profundizar, pues en Alemania aun hay el 1%   del pueblo que aun están de acuerdo con sus ideales, es cierto que el partido alemán a cambiado mucho de los ideales, persiste el del racismo, y aun son   82,600 de personas las que tienen el pensamiento que tuvo Hitler

Haz pensado que seria de los pueblos de hoy en día aun mantuvieran, o peor aún fueran dominados por la ideología nazi? Pues el partido Nacional Decromático Alemán (Nazi). Pues en la actualidad este partido del cual todos tienen un mal sabor de boca sigue queriendo tomar fuerza. Aunque sus inicios en la política son muy oscuros, y sus verdaderos propósitos son muy notorios la gente siempre mostró apoyo hacia este partido, el partido surgió al calor de la cultura racista, derechista y ultranacionalista de los Freikorps, unidades paramilitares que combatieron los levantamientos comunistas que se produjeron al término de la Primera Guerra Mundial. Aprovechando la crisis tanto económica como social, los líderes del tan famoso partido decidieron cargarle los males a un inocente, el pueblo judío.

Contexto

Intentos actuales de retomar poder y fuerza:

Un intento del ministro del interior, Otto Schily, de prohibir la NPD en 2003 no logró tener éxito al descubrirse, en el transcurso del proceso de legalización, que al menos un tercio de los dirigentes nacionales del partido eran agentes infiltrados del Ministerio del Interior alemán, en lo que supuso un cierto escándalo político que invalidó las posibilidades de ilegalización, ya que se descubrió que eran precisamente esos líderes los que fomentaban algunos actos violentos que pudieran ser achacables al NPD. Tradicionalmente, el NPD se caracterizó por la radicalidad de su discurso ideológico y por la falta de organización cuando estaba representado en un parlamento regional. En los últimos años, sin embargo, se ha observado la tendencia del NPD de tratar de crear cierta estabilidad en su trabajo parlamentario en Sajonia y Mecklemburgo-Pomerania Occidental, pretendiendo ser una alternativa electoral seria que se preocupa de los problemas de las personas de la calle para abrirse a un mayor número de votantes posibles. Todos los demás partidos alemanes con representación parlamentaria a escala federal (socialdemócratas, democristianos, socialcristianos, verdes, liberales y poscomunistas) o regional excluye cualquier pacto o cooperación con el NPD.

El nazismo, fue la ideología gobernante en Alemania entre los años 1933 y 1945. Sin embargo, este pensamiento se viene desarrollando desde años antes, alrededor de 1920. Tampoco tuvo su fin en 1945 con la Segunda Guerra Mundial, pues los grupos nazis siguieron existiendo de forma clandestina, derivando en lo que conocemos como el nacionalismo, hasta la actualidad. Un tema muy actual es el escándalo de los jóvenes grupos neonazis existentes no sólo en Alemania, sino en otros muchos países. A pesar del término "neonazi", no quiere decir que hayan surgido de nuevo, pues nunca se extinguieron. Tras la derrota alemana dos organizaciones secretas: ODESSA y Die Spinne se encargaron de la evacuación de jerarcas nazis. Tras la guerra Karl Heinz Prister fue el "cerebro" del neonazismo, pues se encargó de internacionalizarse y del reclutamiento de nuevos jóvenes. Actualmente, los jóvenes americanos son muy propensos a caer ante este tipo de ideologías, debido al profundo racismo existente y al odio entre los blancos y negros. Pues los blancos culpan a las minorías culturales de problemas sociales tales como la violencia, la delincuencia, el aumento del desempleo, etc. De esta forma han surgido grupos racistas, en su mayoría relacionados con el nazismo. Entre ellos está el White Power, grupo de jóvenes blancos que tienen como objetivo a personas de distinto color; el Ku Klux Klan, formado por protestantes; el Skinhead Nazi, y el Stormfront, formado por activistas pro-blancos, entre otros grupos de jóvenes que aún siguen con esta ideología

A pesar de recibir el nombre de neonazis, este movimiento no es nada nuevo, ya que después de la Segunda Guerra Mundial, el grupo siguió actuando de forma clandestina en Alemania. Algunos neonazis comenzaron a integrarse en eventos deportivos como el fútbol, pasando a cometer actos perjudiciales, como los insultos y las agresiones contra los jugadores y los aficionados negros. La clase social que ha provocado el movimiento neonazi se hace, a menudo por los jóvenes que se encuentran sin perspectivas, como los desempleados que acumulan un odio y buscan un objetivo para la justificación. A menudo se les inculca que los responsables de estas circunstancias se deben a la existencia de inmigrantes (negros, latinos, turcos, polacos…) que ocupan su condiciones. No obstante, este hecho chocante no se corresponde a menudo con la realidad, porque los inmigrantes realizan trabajos excluidos por los nativos, tales como limpieza de ventanas, limpieza de coches, la construcción, el lavado de platos, entre otras actividades que ganan salarios bajos y que han sido despreciados por muchas personas a lo largo del tiempo.

Sin embargo, la dura tarea de reconciliación con el pasado nazi ha sido un proceso largo, difícil y que estuvo marcado por un largo periodo de amnesia colectiva que impregnó al país en los primeros años de posguerra. Nadie había sido nazi, nadie había aclamado a Hitler y nadie había tenido conciencia de los crímenes antes de 1945. Con excepción del juicio de Nurenberg, gran número de criminales nazis no fueron perseguidos y pudieron continuar su carrera en la vida civil, después de una purga simbólica que recibió el nombre de amnesia fría, un fenómeno alentado por el primer canciller de la joven República, Konrad Adenuaer, quien justificó la presencia de altos funcionarios nazis en su Gobierno, en el aparato judicial y en los organismos de seguridad con una frase legendaria: “La máquina debe seguir funcionando”.

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