ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Jinete sin cabeza: leyenda de tuman


Enviado por   •  10 de Diciembre de 2014  •  Informe  •  1.026 Palabras (5 Páginas)  •  2.698 Visitas

Página 1 de 5

(2011, 06). Jinete sin cabeza: leyenda de tuman. BuenasTareas.com. Recuperado 06, 2011, de http://www.buenastareas.com/ensayos/Jinete-Sin-Cabeza-Leyenda-De-Tuman/2301332.html

Dicen los naturales de Lambayeque ( junto a los demás pueblos ) que en tiempos muy antiguos que no saben numerarlos, vino de la parte septentrional de Perú, con gran flota de balsas, un padre Compañas, un hombre de mucho valor y calidad llamado Naylamp que consigo traía muchas concubinas, mas la mujer principal, dícese haberse llamado Ceterni.

Trajo en su compañía mucha gente que como capitán y caudillo lo venían siguiendo, mas los que entre ellos tenían más valor eran sus oficiales que fueron 40. Así uno fue Pita Zofi que era trompetero o Tañedor de unos grandes caracoles, que entre los indios es muy estimado, otro Ñinacola, que era el que tenía cuidado de sus andas y sillas, y otro Ñinagintue a cuyo cargo estaba la bebida de aquel Señor a manera de escanciador, otro llamado Fonga (Fongasigde) que tenía el cargo de derramar polvo de conchas marinas en la tierra que su Señor hollaba al pisar, otro Occhocalo era su cocinero, otro tenía cuidado de las unciones y color con que el Señor adornaba su rostro, a éste llamaban Xam Muchec, Allopcopoc, tenía a su cargo preparar los baños del Señor; otro principal muy estimado era Llapchillulli, encargado de labrar sus camisetas y ropa de plumas, con esta gente (y otros definidos oficiales y hombres de cuenta) tenía adornada y autorizada su persona y casa.

Este Señor Naylamp con todo su séquito vino a asentarse y tomar tierra en la boca de un río, (ahora llamado Faquisllanga) y habiendo allí dejado sus balsas entraron en tierra adentro deseosos de hacer asiento en ella, y habiendo andado por espacio de media legua fabricaron unos palacios a su manera, a los que llamaron Chot, y en esta casa y palacios pusieron con devoción bárbara un ídolo que consigo traían a semejanza del rostro de su mismo caudillo. Este era labrado en una piedra verde, a quien llamaron Llampellec (que quiere decir figura y estatua de Naylamp).

Habiendo vivido muchos años en paz y quietud esta gente y habiendo su Señor y caudillo tenido muchos hijos, vino el tiempo de su muerte, y a fin de que entendiesen sus vasallos que la muerte tenía jurisdicción sobre él, lo sepultaron escondidamente en el mismo aposento donde había vivido, y publicaron por toda la tierra, que él,. Por su misma virtud, había tomado alas y había desaparecido.

Quedó con el imperio y mando de muerto Naylamp, su hijo mayor Cium, el cual se casó con una moza llamada Zolzoloni; y en esta y en otras concubinas tuvo 12 hijos varones, cada uno de los cuales fue padre de una copiosa familia, y habiendo vivido y señoreado muchos años este Cium, se metió en una bóveda bajo tierra, y alli se dejo morir (y todo a fin de que posteridad lo tuviese por inmortal y divino). A su fin y muerte gobernó Escuñain al cual le ducedió Mascuy, y a éste le sucedió Cuntipallec y tras el cual gobernó Allascunti y

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (6 Kb)
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com