La Evaluación En La Escuela Maternal

Por el hecho de que la evaluación está en contacto con niños pequeños es imposible realizar diagnósticos o pronósticos con estos pequeños aunque esta sienta la presión de ser una fuente de información hacia los padres acerca de la educación de sus hijos así como para que los docentes tengan claro los resultados de sus enseñanzas. Ayuda también para basar proyectos futuros eliminando todo aquello que dé resultados negativos y aumentar lo que de resultados sobresalientes, las renovaciones frecuentes son necesarias para generar estas medidas de calidad educativa.

La evaluación tiene dos grandes funciones: evaluación formativa, guía en la búsqueda de objetivos, y evaluación sumativa, medir los resultados alcanzados. Es difícil captar los aprendizajes de los niños, intervienen varios factores, la evaluación de fenómenos complejos se dificulta cuando se trata de niños muy pequeños. No predice ni anuncia capacidades a futuro, cuando se hace algún pronóstico escolar, a menudo se ve desmentido. La evaluación ayuda a ver con claridad, mas no funciona para poder ver el futuro.

La evaluación no es el resultado final, ya que puede retroceder. Los educadores están conscientes del resultado de unas largas vacaciones y el peligro de que los conocimientos adquiridos desaparezcan durante estas semanas de descanso. Es necesario mantener cierta estabilidad, toda adquisición desaparece con cierta rapidez si no es mantenida.

No es una calificación, no trabajos calificados por ende no es posible la clasificación entre los alumnos. Cada niño trabaja para sí mismo, en relación con las familias que buscan situar a sus hijos con los otros es necesario dejarles claro que las evaluaciones no son para clasificar sino para arrojar luz sobre los caminos personales. Desgraciadamente no podemos impedir que se hagan comparaciones, pero se debe tener muchísimo cuidado con las conversaciones que en ocasiones tienen las docentes acerca de sus alumnos, es muy común que entre docentes comenten acerca de su falta de madurez, mala conducta, o incapacidad para realizar ciertos trabajos pensando que los niños no escuchan, pero ellos están al tanto de todo y esto se debe evitar.

La evaluación es un estado en proceso, por eso su valor es relativo. La evaluación es una medida así que es necesario tener algo mas con que compararla y busca alcanzar un objetivo, o sea una meta visible de la cual la docente pone en acción estrategias para poder llegar a resultados claros. Hay que tener una idea de las conductas de que son capaces los niños en el momento de evaluación. Mientras más complejo es el objetivo, más se dificulta definir los criterios de evaluación.

La enseñanza en grupo en los niños pequeños es rica y facilita la entrada y permanencia en la escuela elemental. Tienen una influencia de las interacciones con sus pares, y una necesidad de despejar al alumno de su casa por más positivo que sea su contexto. La escuela maternal tiene claro que el niño no es lo suficientemente maduro como el adulto, pero tampoco un bebe. Él está familiarizado con los sentimientos por el que todo humano pasa, como lo es el sufrimiento, o el coraje. Tal vez no tenga la capacidad mental ni física pero el desarrollo social lo llevará poco a poco a la realización de ello.

Uno de los objetivos de la evaluación es asegurar una enseñanza de calidad en el niño creando un ámbito de respeto, no hablando negativamente de él, disciplinándolo justamente, así como respetar su voluntad y familia.

Los objetivos pueden salir de algunas actividades complejas, por ejemplo en un espectáculo de marionetas se buscará, la participación del niño, adquisición de gestos, que respondan a interrogaciones de la obra, etc. Estos objetivos varían durante el transcurso del ciclo, ya que

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