ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Guerra Cristera


Enviado por   •  30 de Mayo de 2013  •  2.121 Palabras (9 Páginas)  •  413 Visitas

Página 1 de 9

LA GUERRA CRISTERA

Consistió en una fuerte lucha que duró 3 años (1926-1929) entre el gobierno y la iglesia, de la cual se prohibió hablar durante mucho tiempo en México.

La rebelión cristera se inició en julio de 1926 extendiéndose, entre mediados de 1927 y fines de 1929, por casi toda la república mexicana. No sólo se efectuó en los estados de Jalisco, Michoacán, Guanajuato, Zacatecas y Querétaro, sino que esta zona fue la de mayor efervescencia y actividad. Se han comprobado más levantamientos en el norte de la república, hasta Bacúm en Sonora, Concepción del oro en Zacatecas y Parras y Saltillo en Coahuila, además por el sur hasta Tapachula en Chiapas.

En el campo se dieron muchas manifestaciones de resistencia, y se conformaron en estados de sitio, es decir, la defensa de las iglesias por centenares de hombres y millares de manifestantes. Por su lado el gobierno tomó los levantamientos como: “una reacción de indios embrutecidos por el clero y sumidos en el fanatismo”.

En Marzo de 1926 el general Ortiz se presentó para detener a los sacerdotes de Valparaíso Zacatecas. En la mañana la población amaneció repleta de gente, armada, “pues habían acordado que si nos llevaba Ortiz se echarían sobre él. Dios no lo permitió”.

(Diario del padre Arroyo 1 de marzo de 1926 Fondo ARA).

Esta etapa se caracterizó por la realización de asambleas permanentes, donde el pueblo montaba guardia noche y día, así como grandes manifestaciones, peregrinaciones y procesiones que formaban una especie de insurrección no violenta

Los choques con el gobierno fueron más frecuentes a lado de las provocaciones puras y simples, todos los actos de las autoridades se sentían como agresiones, cierre de iglesias ejecución de los inventarios, detención a sacerdotes o dirigentes seglares, el desprecio con que el gobierno consideraba las gestiones pacíficas. Se mandaron papeles con peticiones al Presidente Calles, pero fue imposible. La opinión colectiva coincidía en un levantamiento en contra el gobierno.

En Cocula Jalisco los cinco barrios que lo conformaban estaban custodiados por mujeres y hombres que cuidaban los templos. El movimiento se fue gestando lo mismo en Coalcomán (Michoacán), que en Santa María del Valle (Jalisco), Cocula (Jalisco), o en Santiago Bayacora (Durango).

Después de haber tenido la Guerra de Reforma en 1859(durante la cual se enfrentaron dos grupos políticos en México: los conservadores que estaban en contra de la Constitución de 1867 contra los liberales) y la intervención francesa en 1867 los gobernantes de México llevaron a la practica una serie de medidas que proclamaban la separación de la Iglesia con el Estado, al igual que disminuyeron el papel social de la primera ya que se sancionaba a los funcionarios que asistían a actos religiosos, se confiscaron todas las propiedades eclesiásticas y abolieron las órdenes monásticas.

En 1917 se promulgó una nueva Constitución, en la que se estableció una política de intolerancia religiosa, incluyendo la prohibición de la Iglesia para poseer bienes raíces, prohibición del culto público fuera de las iglesias, al clero se le negó el derecho a votar, a la prensa religiosa se le prohibió referirse asuntos públicos , la educación primaria debería ser laica.

En 1926, el presidente Plutarco Elías Calles promovió instrumentos sobre el artículo 130 de la Constitución para ejercer severos controles, buscando limitar o suprimir la participación de las iglesias en la vida pública.

En señal de duelo, muchas iglesias del país suspendieron el culto y el clero convenció a los feligreses de boicotear al gobierno, como el no pagar impuestos, minimizar el consumo de productos comercializados por el gobierno, no comprar billetes de la Lotería Nacional, ni utilizar vehículos a fin de no comprar gasolina. Esto afectó de forma severa a la economía nacional.

Es un movimiento en legítima defensa de los derechos del pueblo a creer en Dios y a venerarlo; tampoco fue rebelión contra un gobierno legítimo, sino contra un gobierno usurpador, un gobierno impuesto por los grupos anticlericales, un gobierno que el pueblo no había elegido. Y no hubo alzamiento armado ni tácticas de resistencia civil católica hasta que no se agotaron todos los recursos legales y pacíficos posibles.

Los ciudadanos católicos formaron la Liga Nacional para la Defensa de la Libertad Religiosa en marzo de 1925. Su objetivo era lograr la libertad de culto por medios legales, pero fue declarada ilegal y operó de manera clandestina.

Ningún levantamiento popular mexicano, en el siglo veinte, puso en lucha a tanta gente, en un espacio tan extenso, en una gama social tan amplia.

En la Cristiana, volvieron a levantarse los antiguos zapatistas y villistas. La guerra cristera como guerra religiosa, tenía como fin la destrucción de los grupos anticatólicos, como constitucionales, orgánicos, reglamentarios. Logrando ese fin, cesaría desde luego el movimiento de defensa armada de los católicos mexicanos, como lo expresó el general Gorostieta del comité ejecutivo de la Liga Defensora de la Libertad Religiosa: "Nuestra fuerza esta constituida por un pequeño ejército, pobre en armas, riquísimo en virtudes militares, que lucha cada día con más éxito por libertarse de una jauría rabiosa que los esclavizaba, por un pueblo entero que está decidido a conquistar todas las libertades y que tienen puestos sus ojos no en la promesa del episcopado, sino en la obligada transacción a que tiene que someterse el gobierno".

Los cristeros estaban conscientes de que la Nación peligraba y que era necesario salvarla, empezando por la iglesia católica, como Palomar Vizcarra afirmaba: "que era y es, la base de la patria". Al proceder así, no sólo seguían el ejemplo de Iturbide, sino el de los conservadores, el primero dijo: ¨la nación es la patria¨ y Miramón proclamó: ¨La religión es la patria y el que no ame la religión es un traidor”

El Movimiento Cristero

La radicalización hizo que en zonas del Bajío (Guanajuato, Jalisco, Querétaro, Aguascalientes, Nayarit, Colima, Michoacán y parte de Zacatecas), en la Ciudad de México, y en la península de Yucatán creciera un movimiento social que reivindicaba los derechos de libertad de culto en México. La dirigencia del movimiento, cercana pero autónoma respecto de los obispos mexicanos, creyó viable una salida militar al conflicto. En enero de 1927, empezó el acopio de armas; las primeras guerrillas estuvieron compuestas por campesinos. El apoyo a los grupos armados fue creciendo, cada vez se unían más personas a las proclamas de ¡Viva

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (13 Kb)
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com