ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Rebelion


Enviado por   •  17 de Diciembre de 2013  •  2.702 Palabras (11 Páginas)  •  238 Visitas

Página 1 de 11

“La novela consiste, básicamente, en una gran metáfora de la Revolución Rusa y su evolución hacia el estalinismo. Comienza con una reunión de todos los animales en torno al más venerable de todos los cerdos, Mayor, quien les anuncia el advenimiento de una Revolución que acabará con la tiranía del granjero (Mr. Jones), que hasta ese momento dominaba el entorno natural (la granja) con mano de hierro. Al día siguiente muere el Gran Cerdo Venerable, y poco después los animales, acaudillados por los cerdos, los más inteligentes de entre los mismo, expulsan en una Revolución al granjero Jones y a su esposa. El cuervo Moses, totalmente sumiso al poder fáctico del granjero, huye con él. Al principio, las decisiones en la granja se toman de forma mancomunada, pero bien pronto dos cerdos, Napoleón y Snowball, comienzan a crear partidos enfrentados. Napoleón no es un cerdo brillante, pero su voluntad es más fuerte que la de Snowball, de mente lúcida y grandes ideas, pero inseguro. Las disputas internas se inclinan a favor de Napoleón, quien se hace del poder y Snowball tiene que huir ignominiosamente de la granja. A partir de ese momento, los cerdos van imponiendo una dictadura cada vez más autoritaria. Los llamados heterodoxos van siendo silenciados o directamente eliminados, los cerdos van adoptando los modos de vida de los humanos y, en suma, el dicho “Todo el poder para los cerdos” acaba convirtiendo a los cerdos en hombres.

Es curiosa la claridad con que nos muestra el autor en esta metáfora la degeneración de los procesos revolucionarios en dictaduras; resulta sugestiva la manera en que Orwell exhibe el proceso de cómo salvadores y héroes se convierten al poco tiempo en dictadores, en tiranos. Rebelión en la granja ilustra en Napoleón la personalidad de los tiranos de la historia, su megalomanía, sus perversiones (Napoleón reafirma su virilidad fornicando con cerdas), sus delicadezas (Napoleón adorna su cola con moños de colores), sus villanías genocidas (las ejecuciones ocurridas en la granja por órdenes de Napoleón, por ejemplo la de las gallinas), sus instrumentos de dominación (Napoleón utilizaba de manera eficaz los discursos y la propaganda), y hasta qué punto pueden generar dolor, humillación y vejación (los animales de la granja recibían escasas raciones de comida por largas horas de trabajo).

George Orwell en su fábula plantea que al acumular un poder vertiginoso, el dictador llega los extremos de una crueldad vertiginosa. Lo que le ocurrió al cerdo Napoleón ocurrió a todos los que han sido grandes dictadores; llegan a acumular tal poder que se convierten en monstruos (aunque en la novela irónicamente Napoleón se convierte en humano); este poder crece aún más porque hay una abdicación de los gobernados a la resistencia, a frenar los excesos del dictador.

El presente ensayo tiene como objetivo demostrar que la lectura de Rebelión en la granja es ilustrativa en la cuestión política, pues analiza una multitud de fenómenos de esta especie y de ella pareciera desprenderse una cierta tendencia común en los personajes que poseen el poder en las sociedades. Con este propósito me centraré en el fenómeno del poder.

El autor de Rebelión en la granja analiza la naturaleza del poder de manera sencilla, así por ejemplo indaga los hechos - fenómenos políticos cercanos al concepto de poder, como son fuerza, violencia, coerción, influencia, autoridad, manipulación, dominio, dominación, y consenso. Teoría General de Sistemas, enfoques behavioristas, análisis de fines y medios, estudios de los centros de decisión, teoría de los grupos, enfoques teleológicos, enfoques psicológicos y psicoanalíticos, están reflejados en múltiples pasajes de la obra. Es una fabulosa radiografía política de la corrupción y el horror que rodean al poder sin límites.

Platón definió al poder como “el ejercicio del mando”. Desde entonces la idea que se tuvo del término fue muy cercana al concepto de mandar. Tenía poder el que podía mandar. Poder fue entonces capacidad de ordenar. Fue hasta el siglo XIX, con el positivismo, que se prestó atención a la relación política fundamental entre el mando y la obediencia; nociones correlativas que constituyen la esencia del poder. Cualesquiera que sean los problemas sociales, las técnicas políticas, las tendencias de las revoluciones, el ejercicio del poder – mando-obediencia – no variará ni en su esencia ni en sus presupuestos.

Rebelión en la granja nos enseña que el poder no sólo es la capacidad de dar órdenes, sino que exige, mediante muchos instrumentos, que esas órdenes sean obedecidas. No importa que se hable de un régimen autocrático o democrático, no importa que en nombre de la soberanía del pueblo o de la voluntad general se diga que cada uno y todos obedecen a todos, pero fundamentalmente a sí mismos: la relación mando-obediencia permanece.<2>

El poder, como nos los muestra el autor en su fábula, es una capacidad real –que puede ser legítima (Mr. Jones), autoritaria (la figura del cerdo Napoleón), legal (las asambleas y reuniones que se hacían en la granja los domingos por la mañana), violenta (los perros al servicio del tirano), manipuladora (Squealer)– de mandar de manera definitiva y eficaz de imponer obediencia. En términos más cortos, se puede comprender con la lectura que el poder es la capacidad de hacerse obedecer; Napoleón fue capaz por todos los medios, por todos los matices, de hacerse obedecer. El politólogo H. Lasswell<3> admite que si una decisión no es obedecida no se ha ejercido el poder, no obstante, afirma, la relación mando-obediencia se produce en muchos matices, matices que son abordados por George Orwell de manera espectacular. Así, queriéndolo o no, George Orwell, nos revela que el poder puede ser ejercido por el ejercicio de la fuerza, por manipulación, por coacción, por influencia o bien por consenso.<4>

Orwell exterioriza en su fábula la manifestación más flagrante del poder: cuando la obediencia se produce mediante el ejercicio de la fuerza. Lo anterior se puede ver claramente en el capítulo VII del libro, cuando describe las purgas y el exterminio de la oposición interna dentro de la granja. Napoleón ordena a los perros que desgarraran a los cerdos que habían protestado cuando éste abolió las reuniones de los domingos; las gallinas que habían soñado con Snowball, el enemigo de Napoleón, fueron destrozadas de igual manera; el ganso que había ocultado algunas espigas de maíz durante la cosecha, la oveja que había hecho “aguas” en el bebedero y las dos ovejas que persiguieron a un carnero, (“muy adicto a Napoleón”) cuando tosía, también fueron ejecutados. Francisco Piñón G.<5> afirma que “toda política es

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (17 Kb)
Leer 10 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com