La Vida Sobrenatural

La Vida Sobrenatural

SESIÓN 1: El Espíritu Santo

INTRODUCCIÓN

Cuando nacemos de nuevo, nacimos espiritualmente.

Dr A.L. Gill y su esposa, Joyce, son evangelistas i n t e r n a c i o n a l m e n t e conocidos y autores de más de 20 libros y videos de enseñanzas. Uno de ellos, Las [pic 1]

Promesas de Dios Para Todas Sus Necesidades, ha vendido más de siete millónes de copias. Tienen un ministerio dinámico acompañado por señales y prodigios dramáticos y por milagros de sanidad que los ha llevado a más de 60 naciones.

        1:         El Espíritu Santo         15

        2:         Los Dones del Espíritu Santo         21

        3:         Los Dones Vocales         25

        4:         Los Dones de Revelación         31

        5:         Los Dones de Poder          35

        6:         Los Dones de Sanidad         39

        7:         La Sanidad y la Gran Comisión          43

        8:         El Poder Sanador de Dios         47

        9:         Hablar Palabras de Sanidad         51

        10: Impartición Mediante la Imposición de Manos         55

Tenemos alma y espíritu, por lo tanto somos seres espirituales. Todos los días de nuestra vida, los vivimos en el terreno sobrenatural del Espíritu de Dios.

BOSQUEJO DE LA LECCIÓN[pic 2]

I.         EL CONOCIMIENTO DEL ESPÍRITU SANTO

El Espíritu Santo es una persona real. Tenemos que llegar a conocerle de manera íntima y personal. Pablo escribió sobre la comunión del Espíritu

Santo (2 Corintios 13:14b)

1. Una nueva manera de vivir.

1. Los dones del Espíritu Santo proveen una completa nueva manera de vivir para el creyente que es lleno del Espíritu Santo. a.         Al igual que Pedro salió de la barca y caminó hacia Jesús sobre el agua, nosotros también debemos salir de las áreas cómodas de la vida natural y caminar sobre “aguas espirituales”.

b.         Debemos de vivir en el Espíritu y operar en los nueve dones sobrenaturales en nuestra vida diaria.

1. “Entonces el Espíritu de Jehová vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos y serás mudado en otro hombre”  (1 Samuel 10:6).
2. El poder de la resurrección es para los que creen (Efesios 1:19-20).

1. Según Filipenses 2:5-8 cuando Jesús vino a esta tierra, se humilló y vino como hombre.

1. Por un tiempo dejó a un lado todos sus derechos y privilegios de deidad y vivió en esta tierra como hombre.
2. En los primeros treinta años de su vida no se registraron milagros.
3. Cuando fue bautizado por Juan, según Marcos 1:10-11, el Espíritu Santo vino sobre El.

• Inmediatamente los milagros empezaron a suceder en su ministerio.

1. “Y luego, cuando subía del agua, vio abrirse los cielos, y al Espíritu como paloma que descendía sobre él” (Marcos 1:10).

1. Fue entonces que Jesús, nuestro

ejemplo, ungido por el Espíritu Santo, empezó a operar en los dones sobrenaturales del Espíritu Santo.

1. “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos” (Lucas 4:18).

1. El mismo poder es nuestro hoy.

1. “Y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales” (Efesios 1:19-20).
2. “Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros” (Romanos 8:11).
3. Joel profetizó: “Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre todo carne y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñaron sueños y vuestros jóvenes verán visiones. Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días”  (Joel 2:28-29).

•         Jesús dijo en Lucas 24:49 que seríamos investidos de poder de lo alto. II.         EL BAUTISMO DEL ESPÍRITU SANTO

1. Era profetizado.

1. “Respondió Juan, diciendo a todos: Yo a la verdad os bautizo en agua; pero viene uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado; Él os bautizará en Espíritu Santo y fuego” (Lucas 3:16).
2. Jesús dijo, “. . . seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días” (Hechos 1:5).

1. Este será el poder para ser sus testigos.

•         “Pero recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta lo último de la tierra” (Hechos 1:8).

1. Empezó el día de pentecostés.

1. “Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. Y fueron todos llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas según el Espíritu les daba que hablasen” (Hechos 2:1-4).
2. Un milagro sucedió en sus bocas.
3. Pedro declaró a otros que “. . . recibiréis el don del Espíritu Santo” (Hechos 2:38b).

1. Los samaritanos recibieron este don.

1. “Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la Palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan; los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo; porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús. Entonces les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo” (Hechos 8:14-17).
2. Es un don. No tenemos que trabajar para obtenerlo.

1. Los gentiles recibieron este don

1. “Mientras aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el discurso. Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del Espíritu Santo. Porque les oían que hablaban en lenguas, y magnificaban a Dios” (Hechos 10:44-46).
2. Todo lo que tenemos que hacer hoy es recibir el don.

1. Los efesios recibieron este don

•         “Les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo. Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos dijeron: en el bautismo de Juan. Dijo Pablo: Juan bautizó con el bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría después de él, esto es, en Jesús el Cristo. Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. Y habiéndolos impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban”  

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