La historia de bronce

La historia de bronce o historia oficial fue hecha, para reforzar el nacionalismo del país y para que los individuos sintieran orgullo por aquellas personas que lucharon y/o murieron por este, y todo esto lleva a que los habitantes se sientan bien con su pasado en común y con eso este identificados con el país y se sientan verdaderamente parte de él.

Pero para lograr esto algunos historiadores han llenado la historia de cosas reales e imaginarias, de cuentos perfectos y a veces exagerados, llenado libros con sucesos impresionantes y nombres de individuos “importantes” para el país, de valientes personas a los que llaman héroes a los cuales los habitantes tienen que recordar y adorar. También para lograr la identificación de personas por su patria se hizo en calendario cívico-histórico con fechas inolvidables donde el pueblo celebra determinada cosa, por ejemplo el inicio de la independencia, el nacimiento o la muerte de algún “héroe” etc. y esto ha funcionado bien a lo largo del tiempo, de ejemplo está este país, porque gracias a todo lo mencionado la gente tiene un sentimiento nacionalista y se hacen llamar orgullosamente mexicanos.

Un ejemplo de la gran influencia de la historia para México es el 13 de septiembre día celebrado por los mexicanos por la muerte de los “Niños héroes”. Aquel 13 de septiembre de 1847 fue la última batalla de Estados Unidos contra México de la invasión norteamericana de la cual salió ganador el invasor y desde ese día este país tiene mucho poder sobre el destino de México, cosa por lo cual se debería recordar ese día, pero no es así.

Todo este recuerdo por los cadetes del Colegio Militar comenzó con Miguel Miramón cuando mencionó a sus compañeros, después todo el crédito de esa batalla se los llevaban Lucas Balderas, Gelati, Xicoténcatl, Cano y el general Anaya, y en 1882 se hizo un monumento para conmemorar a los cadetes participantes, pero fue en 1908 cuando por fin se les llamó “niños héroes” y esto gracias a un poema de Amado Nervo, después de ahí vinieron muchas historias sobre la vida y acciones de los valientes cadetes que murieron en esta atroz batalla, como Vicente Suárez, Francisco Márquez, Fernando Montes de Oca o Augusto Melgar que lucharon contra los invasores hasta caer muertos, pero el cadete que destacó más en esta hazaña fue Juan Escutia quien vio la derrota segura y se enredó la bandera mexicana y se tiró con el fin de protegerla muriendo por los golpes en la roca, y gracias a este personaje los mexicanos recuerdan ese día y lo mencionan con orgullo.

A pesar de que la mayoría de textos muestran que fue Juan Escutia quien se aventó, aún quedan muchas dudas sobre este, ya que no se ha confirmado su inscripción al Colegio militar, su actuación en la batalla o su existencia. También hay autores que dicen que fueron otros quienes se aventaron como Xicoténcatl, Agustín Melgar o Fernando Montes de Oca.

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