Prisiones en Honduras Reseña

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Contenido

Contenido        1

Introducción        2

Cárceles de Máxima seguridad en Honduras        3

Lo bueno y lo malo        4

Lo bueno        4

Lo malo        4

Conclusión        6

Bibliografía        7

Introducción

En este ensayo daré mi opinión acerca de las nuevas cárceles de máxima seguridad en Honduras, denominadas “El Pozo” y “La Tolva”. Dando mi punto de vista acerca de lo bueno y lo malo que tienen estas nuevas cárceles, haré la mención del mejoramiento del cuerpo de policía que labora dentro de las prisiones y la nueva forma de recreación y rehabilitación que los presidiario reciben, tanto para no estar de ocioso como para hacer algo productico.

Cárceles de Máxima seguridad en Honduras

Hoy en día, lo más resaltante que tiene Honduras es la delincuencia, narcotráfico y problemas con las maras, antes de la creación de los complejos “El Pozo” y “La Tolva”, los delincuentes que eran líderes de maras manejaban y organizaban todas sus fechorías desde los centros penales donde residían, acondicionados muy cómodamente.

Esta problemática ocurría por varias razones, una de ellas era la despreocupación por parte del cuerpo de policía, porque todos estaban asombrados de como vivan los reclusos, si es que se les podría llamar así, pero pocos se hace la pregunta: ¿Por qué los policías permiten eso?, la respuesta es sencilla, son sobornados y compran su silencia. Tal vez si, las instalaciones no eran las adecuadas, había hasta 20 reclusos en una celda para 4 u 8, pero el estilo de vida de algunos reclusos parece más como si estuviese en una habitación de un hotel.

Otro problemática en estos  centros penales era el ocio, pasaban casi todo el día haciendo nada, solo estaban ahí perdiendo el tiempo, recibiendo su “castigo”. Las fugas también eran, o aún lo son en ciertas cárceles de Honduras, una problemática en las cárceles hondureñas, ya que no era gran cosa escaparse, total que el cuerpo de policía a duras penas tenían control de los reos que tenían detenidos.

Ya explicado el panorama anterior, miremos ahora este nuevo lado de la moneda, se construyeron dos nuevas cárceles de máxima seguridad en Honduras, muy similares entre sí, ambas con diseños de cárceles estadounidenses. Cuentan con un personal capacitado, o sea policías hondureños un poco menos corruptos, vigilancia las 24 horas del día, muros de concreto en el perímetro y totalmente aisladas de la civilización.

Algo positivo que leí en un artículo era que parte de los alimentos que se sirven en los reclusorios son cultivados ahí mismo, esto quieres decir que en cierta medida yo están de ociosos todo el día, cuentan con muchas más actividades de rehabilitación que en los centros penales anteriores.

Las celdas están diseñadas para dos reos al mismo tiempo, la capacidad máxima de reclusos en “El Pozo” son de 2,000 presos, y de “La Tolva” son para 1,300 presos.

Lo bueno y lo malo

Lo bueno

1. Más seguridad y tranquilidad por parte de los hondureños al saber que si van a encerrar a un asesino, violador o narcotraficantes, se quedara encerrado y cumplirá con su condena.
2. Generación de más empleos, tanto como para el cuerpo de policías como para los que ayudaron a construir estas obras.
3. Se tomaron las medidas necesarias para realizar este tipo de obras, que eran más que necesarias para Honduras, y frenar las extorciones que venían desde los centros penales.

Lo malo

Si, las cosas en Honduras al parecer suelen tener siempre un lado negativo.

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