Receta para una vida mejor Aumentar nuestras buenas acciones y disminuir las malas

Receta para una vida mejor

Aumentar nuestras buenas acciones y disminuir las malas

*En este primero de enero, todos están haciendo sus metas de nuevo año. Un nuevo año representa una oportunidad de cambio en nuestra vida para bien. Pero este cambio no es muy fácil que digamos.

*Antes de hablar de una nueva vida, debemos analizar el pasado. Ver nuestras acciones, errores, logros, virtudes, entre otras cosas. De igual manera, no ver solo lo nuestro, sino también lo de los demás, las cosas con las que se relacionan con nuestra existencia, como por ejemplo el trabajo, la escuela, el gimnasio, deporte, etc. Debemos analizar cada pequeña parte, de manera que podamos juntarlas y establecer la fórmula para nuestras metas de este nuevo año. Primeramente, hay que hacer un recuento de nuestras buenas acciones, porque se empieza con lo bueno, no hay que olvidar ninguna, y a continuación cuando tengamos la vista general de todas, hay que proponernos, en un futuro, a aumentarlas tanto como podamos, de igual modo buscar la forma de ser una especie de iniciativa para que los que nos rodean, lo hagan también. Seguidamente, analizaremos las malas acciones, así mismo, no pasaremos por alto ninguna, puesto que, si mentimos en esta parte, estaremos haciendo otra mala acción. Después de que tengamos todas estas malas acciones acumuladas en nuestra mente, pasaremos a la parte más importante, saber a reflexionar sobre ellas. Debemos utilizarlas como un arma, pero no me refiero a un arma para hacer daño, sino más bien un arma para acabar con lo negativo de nuestra vida. Nuestra reflexión consiste en disminuir estas malas acciones, escribo disminuir porque es muy difícil no cometer ninguna, sin embargo, es posible disminuirlas, y además depende de cada uno de nosotros la proporción en que disminuya.

Posteriormente de tener el producto de nuestra reflexión, hay que reunir mucho valor, valor para hacer lo que nos proponemos, porque cualquiera puede pensar, pero pocos pueden hacer. Aunque tengamos nuestros objetivos determinados, solo nuestra fuerza de voluntad logrará que lo podamos cumplir, como por ejemplo la diferencia entre un hombre que quiere ser doctor, y el hombre que es doctor. Aunque sea difícil, el cambio inicia en las pequeñas obras, ya que reuniéndolas obtendremos nuestra receta para una vida mejor.

*Por último, se podría decir, que la receta consta solo de aumentar y disminuir, pero depende de cada uno utilizar cualquiera de estos términos en sus buenas o malas acciones. Y adicionalmente, depende, de igual manera, de cada uno tener el coraje para cumplirlo.

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