1984, George Orwell

Universidad de Los Andes

Facultad de Humanidades y Educación

Escuela de Letras

1984 de George Orwell

Ensayo

Ana Cristina Álvarez Fernández

CI: 27.590.325

• El Poder

En la novela de George Orwell titulada 1984, se presenta un superestado llamado Oceanía, el cual está geográficamente conformado por el continente americano, Oceanía y el sur de África. Esta superpotencia está regida por un régimen totalitario, el cual está encabezado por el “Gran Hermano”, siendo éste una figura política que los proles y los trabajadores de los ministerios nunca han visto.

Se puede iniciar mencionando que, a lo largo del desarrollo de la obra, la noción del poder se hace evidente en varios aspectos, como lo son la obediencia, la sumisión y la identidad. Por esto, en la obra de Orwell, el protagonista llamado Winston Smith, el cual trabaja para el Ministerio de la Verdad, tiene que seguir todas las ordenes que le son dadas, sin la posibilidad de quejarse o evadir los mandatos, ya que, si incumple lo que se le manda, tendrá, sin duda, que lidiar con un castigo terrible.

En esta novela, el castigo es un factor clave, ya que los trabajadores son atemorizados por la llamada “policía del pensamiento”, pues saben cuan terribles son sus castigos. Esta policía del pensamiento se encarga de investigar si las personas están comenzando a dudar del partido, lo cual en neolengua se llama “crimental”. Si se piensa que se está cometiento este delito, el individuo puede ser “vaporizado” es decir, eliminado, pero no sin antes ser torturado de las maneras más atroces.

Consecuentemente, mediante el miedo originado por la amenaza del castigo, el partido se mantiene imperturbable en el poder, y por tanto, causa  en el partido exterior, en el interior y en los proles, una sumisión permanente y aceptada por los individuos.

Por otra parte, se produce un rechazo hacia lo distinto, por ejemplo, los miembros del partido rechazan a los proles por tener diferentes maneras de vivir, por tener casi ninguna prohibición, y por supuesto, por no formar parte de la élite que conforma el partido.

Este rechazo se debe al profundo sentido de identidad que reina entre los trabajadores de los ministerios, es decir, en los integrantes del partido interior y exterior, puesto que, todos tienen los mismos beneficios, las mismas ideologías políticas, el mismo uniforme, y el uso de la palabra “camarada” para referirse a los suyos, de esta manera se crea entonces una homogeneización y/o mismidad entre los trabajadores.

Resulta de gran importancia mencionar que, el adoctrinamiento que inicia desde temprana edad, la igualdad de condiciones económicas y el código de vestimenta son las maneras más eficaces de controlar al pueblo de Oceanía y mantener el régimen en el poder.

El adoctrinamiento se realiza a las personas desde la niñez, enseñándoles a obedecer, a saber cómo deben actuar, qué deben hacer y que no, y sobre todo, cómo deben servir al partido. Esto funciona como una especie de lavado mental, pues básicamente se está enseñando desde la niñez  a no pensar y sólo obedecer, es decir, hacer y pensar lo que el partido quiere.

Por otra parte, en Oceanía sólo existen dos clases sociales: la alta y la baja. En la clase social baja se encuentran los proles y los miembros del partido interior, sin embargo, en la clase  social alta se encuentran los que hacen posible la existencia del régimen, el partido exterior. La exterminación de la clase media se debe a que, antiguamente en el mundo distópico  en el que se sitúa 1984, la clase media era la única que podía destronar al gobierno de turno, y al destronarlo, se convertían ellos en el nuevo gobierno, es decir, en la nueva clase alta. Entonces, para evitar que esto sucediese, en Oceanía se extermina la clase media.    

Finalmente, el código de vestimenta permite que surja, en cada miembro del partido, una identificación con el otro, sabiendo que esa otra persona es parte de algo de lo que también se es miembro, esto crea en los personajes, una especie de empatía dada por la mismidad.

Al crearse entonces esta mismidad, los miembros del partido desarrollan un comportamiento peculiar hacia los que lo rodean, pues al observar un cambio de actitud, un gesto u otro carácter inusual en un “camarada”, éste puede ser delatado por los compañeros de trabajo, por su esposa/o o incluso por su propio hijo, pues, se estaría creando una situación en donde la mismidad se quiebra, y puesto que al poder absoluto le gusta la homogeneidad, sobrevendrá sobre el individuo el castigo y el rechazo.  

• La Mentira

En la novela de Orwell, uno de los aspectos relacionados con la mentira, es el poder que se otorga el partido para modificar la historia, debido a que en múltiples ocasiones se le atribuye la invención de distintos artilugios al partido, habiendo sido estos inventados anteriormente. En efecto, se menciona en reiteradas ocasiones en la novela, que la avioneta fue inventada por los miembros de la Ingsoc, siendo este hecho falso, pues Winston recuerda que ya había visto avionetas en el cielo antes de que el régimen se iniciara en el poder.  

Esto produce como consecuencia que se realicen cambios en los libros de historia, hecho que pasa desapercibido por los miembros del partido y por los proles, pues estos no saben nada del pasado antes de la llegada del régimen, debido a que han vivido toda su vida bajo las mentiras impuestas por la Ingsoc.

Por otro lado, el partido no sólo tiene la potestad de alterar la historia, sino que también pueden alterar los recuerdos de las personas. Por ejemplo, cuando vaporizan a alguien, sus datos y todo registro existente del individuo, es automáticamente borrado de todos lados, como si jamás hubiese existido, y sus allegados  eventualmente se olvidan de la existencia del susodicho, dado a que saben inconscientemente que la persona ha sido eliminada.

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