ADMINISTRACIÓN DE NEGOCIOS GESTIÓN DE PYMES

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ADMINISTRACIÓN DE NEGOCIOS

GESTIÓN DE PYMES

PANADERIA Y PASTELERIA “LA LUCHA”

ALUMNOS

Joycibeth Castillo Gamero

Miguel Llerena Bustamante

Diana Loayza Chuquicaña

Emily Perez Aneyra

Xiomara Postigo Coaguila

SEMESTRE: IX

AÑO:       2017

“Los alumnos declaran haber realizado el presente de acuerdo a las normas de la Universidad Católica San Pablo”.

PASTELERIA Y PANADERIA “LA LUCHA”

1. HISTORIA:

En el año 1892, dos señoritas tenían un local en la Plaza España en donde preparaban sus productos y los llevaban a hornear a la calle Rivero anteriormente llamada Guañamarca, dichos productos eran horneados en un horno de piedra que era calentando con capo y es en ese mismo local es en donde vendían sus deliciosos pasteles siendo sus especialidades el alfajorillo, alfajor de miel, guaguas, alfandoque entre otros productos, cuando el negocio creció, tuvieron la necesidad de contratar personal para la elaboración de sus productos, es ahí en donde ingresa a trabajar Don José Cipriano Vilca el cual con el pasar de los años se casó con una de las hermanas llamada Nicolasa, es ahí donde adquieren definitivamente el local de Rivero y comienzan a sacar  la pastelería adelante con el nombre “El Sol”.

Al quedar viudo Don José Cipriano,  pasó muchos años solo, para luego casarse nuevamente en el año 1944 con Doña Carmen Valdivia Delgado la cual era también viuda, quien tenía tres hijos Andrés, Pastora y Juana, se siguió manteniendo la tradición de la pastelería a cargo de ambos, hasta que en 1956 decidieron retirarse del negocio y tomaron la decisión de alquilar la pastelería a su hija   Pastora y así nieta Yolanda, hija de Juana (falleció al poco tiempo de dar a luz), pasando ellas a administrar el negocio, siempre bajo la supervisión de Don José.

Luego de unos años Don José falleció a la edad de 92 años un 15 de Junio de 1959, quedando así a cargo Pastora Ortiz con su esposo Ángel Miranda y Yolanda Linares y su esposo Yleano Acosta (que a la vez era ahijado de Don José), siempre bajo la supervisión de Doña Carmen Valdivia.

Al fallecer Don José se tuvieron que modificar los  documentos de la Propiedad  en Registros Públicos, y razón social en la Municipalidad Provincial  en el año 1961, por lo que se pensó originalmente por el apodo de “La Cagalucha”, denominación que se les dio en esa época por cuanto Don José era conocido como Don Lucho, él era una persona bastante lisurienta, ya que cuando un producto no salía como él quería, gritaba “ya la ca……”, es de ahí que los clientes que concurrían a la pastelería le pusieron ese nombre, el cual es conocido hasta la fecha, se desestimó dicha denominación por ser un tanto grotesco, es por ello que se optó por cambiarle el nombre el que tiene hasta la actualidad “La Lucha”, todo continuó igual  hasta el fallecimiento de Doña Carmen el 6 de mayo de 1973.

Así fueron pasando los años y poco a poco se fueron implementando más productos, se agrandó la tienda principal ubicada en la calle Rivero 213 y 215 y al ver que el negocio iba creciendo a pasos agigantados se decidió abrir la primera sucursal ubicada en la Avenida La Paz en el año de 1998, luego siguió la tienda en la calle Peral en el año 2000 y la última tienda hasta la actualidad ubicada en la calle San José en el año 2003.

Luego de haber avanzado tanto y haber implementado nuevos productos, rescatar pasteles de antaño y estar siempre presentes  en las fechas importantes que se celebran en nuestra ciudad como son los Carnavales con sus deliciosos confites de anís, ajonjolí, almendra, coco, nuez, maní, trigo y castaña; Semana Santa con los bizcochos de canela, natilla y Guatemala, bizcocho en forma de zapatito con sabor a anís, que solo se elabora en esta fiesta religiosa; y la fecha más importante en noviembre mes de las guaguas, ya que según la tradición a raíz del carnaval, en noviembre nacían muchos niños por el desenfreno que existía al festejar los carnavales, haciendo parodia de esto es que se celebran los bautizos con guaguas durante todo el mes de noviembre.

En el año 2004 es que Don Yleano Acosta y Doña Yolanda de Acosta; Doña Pastora de Miranda y Don Ángel Miranda decidieron retirarse dejando a cargo a sus hijos para que continúen con esta tradición hasta la actualidad, teniendo a la fecha más de 100 años de funcionamiento, manteniendo las recetas originales y lo más importante son los dos hornos de piedra  calentados diariamente a ccapo, con más de 100 años de antigüedad, llamados Cipriano y Dionicio, lo que da ese sabor inigualable a cada uno de sus productos.

1. EVOLUCION:

El compromiso que se tiene con la empresa es perdurar con la tradición y el legado, pues es nuestra identidad familiar, es por ello que mantendremos muchas tradiciones de antaño en la preparación del pan y pasteles.

Se busca honrar la memoria de Don José Cipriano pues el inicio el negocio con mucho esfuerzo hecho  andar el proyecto y queremos continuar más allá de un sentido económico un sentido de sentimiento de identidad que se transmita de generación en generación

1. INVERSION, FINANCIAMIENTO, CAPITAL:

La inversión inicial de la empresa “LA LUCHA” es desconocida hasta el día de hoy, pues al ser una empresa netamente familiar y tradicional, los aspectos contables y financieros pasaron a ser simples tareas del día a día.

Las ganancias obtenidas, se volvieron a reinvertir en la empresa, como por ejemplo en la compra de algunas máquinas necesarias para la producción.

Las decisiones de compra o de financiamiento las toma la Sra. Mabel Paz Ortis, ella se encarga de la contabilidad de la empresa. Adicional a ello cuenta con asesoramiento de un contador y abogado externos.

1. FODA:

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1. ANALISIS PESTEL:

• Factores políticos (P): Al ser una empresa antigua, La Lucha tiende a respetar mucho sus tradiciones, sobre todo en cuanto al modo de realizar sus productos.

También se respeta el cargo que ocupa el gerente otorgado de manera hereditaria entre las familias participantes, llegando así hasta la generación actual.

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