Aldo Ferrer
Enviado por ro_pons91 • 28 de Abril de 2014 • 2.530 Palabras (11 Páginas) • 327 Visitas
La economía primario-exportadora (1860-1930)
El golpe militar del 6 de septiembre de 1930 fue liderado por el General José Félix Uriburu y derrocó al presidente Hipólito Yrigoyen de la Unión Cívica Radical.
En la segunda mitad del siglo XIX, la Argentina se incorporó al orden mundial como un exportador de alimentos y materias primas de origen agropecuario. Esta etapa del desarrollo argentino concluyó con la crisis económica internacional de los años treinta. En este período, el liderazgo del crecimiento descansó en las exportaciones. Las corrientes migratorias poblaron las ciudades y la Argentina alcanzó un alto ingreso per cápita. Su economía era, sin embargo, vulnerable y dependiente.
Las condiciones sociopolíticas
Marco institucional y político
La formación de las instituciones democráticas argentinas en el período fue una de las experiencias más notables en el escenario internacional.
Las elites
Como la tierra era el principal recurso y su dominio la mayor fuente de poder, el comportamiento de los terratenientes y la debilidad de los otros sectores sociales fueron decisivos en el curso de los acontecimientos. La ocupación del territorio fue consumada por la Conquista del Desierto del general Roca. El latifundio resultó la unidad económica dominante, a diferencia de otros países, donde la conformación de los farmers ayudó a la consolidación de la democracia.
La concentración del poder económico y la ausencia de intereses asociados a la industria convirtieron a la economía argentina en un satélite de la potencia hegemónica. El grado de extranjerización del sistema productivo fue extraordinario.
Las ideas económicas
Dado el comportamiento de la elite, el librecambio se convirtió en la ideología oficial del sistema y prevaleció en todo el período. La defensa de la posición industrialista descansó en Vicente López y Carlos Pellegrini, pero fueron derrotados por la inserción masiva de la producción agropecuaria argentina en el mercado mundial. La Argentina siguió adherida al liderazgo británico y a la postura librecambista.
El Estado
La ideología librecambista contaba con el respaldo de la mayor parte de la opinión pública. El Estado no hizo diferencia alguna entre el capital nacional y el extranjero. El sistema primario-exportador y la ideología política librecambista entraron en crisis con la caída de la Bolsa en 1929. El colapso de la economía internacional reveló la vulnerabilidad de la economía argentina. Por suerte, la capacitación de la fuerza de trabajo y otros factores favorables proporcionaban una importante base de sustentación para un cambio de rumbo.
Derecho de propiedad y costos de transacción
Los derechos de propiedad estuvieron plenamente garantizados y los costos de transacción eran bajos.
Integración social
Un rasgo notable del sistema fue la incorporación de la mayor parte de la población del país y de las corrientes inmigratorias a una economía de mercado de alcance nacional.
Las variables económicas
Ahorro e inversión
Dado su ingreso per cápita, la Argentina alcanzó en el período tasas de ahorro e inversión considerables. El aumento de la inversión contribuyó a sostener una tasa de crecimiento del producto, que permitió la expansión del empleo y la incorporación a la fuerza de trabajo de los contingentes inmigratorios.
Ventajas competitivas
El desarrollo de la producción agrícola y ganadera se basó en la expansión de la frontera productiva y en la penetración del cambio técnico en las explotaciones. El avance de la educación común y la extensión agrícola elevaron la capacitación de la fuerza de trabajo y permitieron un uso más eficiente de recursos. El avance tecnológico se derramó a otras actividades asociadas con el desarrollo urbano, pero éstos fueron los límites del desarrollo tecnológico en el período. El abastecimiento de bienes de capital y otras manufacturas descansó en las importaciones. El nivel de industrialización de la estructura productiva era muy bajo. El país era incapaz de generar ventajas competitivas asentadas en la difusión del progreso técnico más allá de la producción primaria.
Balance de pagos
En virtud del fuerte crecimiento de las exportaciones, el balance de pagos argentino se sostuvo en todo el período sobre bases sólidas.
Precios
En la mayor parte de la etapa, prevaleció la estabilidad de precios y del tipo de cambio del peso.
La industrialización sustitutiva de importaciones (1930-1975)
Ante la caída de las exportaciones, la capacidad de pagos externos era insuficientes para sostener el nivel previo de importaciones. La política librecambista sólo podía agravar la profundidad de la crisis y fue progresivamente abandonada. Las nuevas condiciones internacionales contribuyeron al crecimiento de la producción industrial sustitutiva de importaciones. En la Argentina, las exportaciones de manufacturas de origen industrial alcanzaron mayor significación con el correr del tiempo, no se trató simplemente de reemplazar importaciones por producción nacional.
El primer tramo del proceso abarca desde 1930 hasta mediados de 1940, ocupándose toda la frontera sustitutiva de la industria liviana. Hacia 1950, la industria había permitido un notable incremento en el autoabastecimiento de manufacturas. Sin embargo, la Argentina no había logrado converger con los países líderes. Su producto per cápita era bastante menor. La vulnerabilidad externa había cambiado de naturaleza, pero el país no había logrado aumentar su autonomía. Esta vulnerabilidad y el desorden fiscal crearon las condiciones para caer, a partir del golpe de 1976, en la trampa de la deuda externa. Durante el período de la industrialización sustitutiva de importaciones el país no logró constituir un sistema de capitalismo nacional.
Las condiciones sociopolíticas
Marco institucional y político
Entre 1930 y 1976, la Argentina alcanzó un récord mundial: sin estar en guerra, fue el país más inestable del mundo. La constante fractura del orden institucional agravó los desequilibrios macroeconómicos.
Las elites
La antigua elite dirigente cedió paso a nuevos cuadros asociados a la producción industrial. Además, el peronismo confirió protagonismo a los sindicatos. En la Argentina, el liderazgo económico fue delegado en subsidiarias de corporaciones transnacionales, que comenzaron a ganar posiciones dominantes.
Ideas económicas
Con el ascenso de Perón, el librecambio fue rechazado frontalmente y la intervención del Estado fue plenamente justificada. La doctrina peronista no sólo era antiimperialista, sino que se proclamaba anticapitalista. En la
...