Analisis De El Lector De B.S.

La obra El lector (Der Vorleser) es una novela corta que ilustra los acontecimientos vergonzosos a los que sometieron a todos aquellos que apoyaron el régimen nazi, escrita por el juez Bernhard Schlink en 1995, originalmente escrita en alemán y debido a su rotundo éxito fue traducida a un total de 37 idiomas. Es considerada la opera prima del autor, aunque también posee una lista de títulos exitosos anteriores a El lector.

El lector trata de Michael Berg, un juez que hace una retrospección a su adolescencia en donde se ve involucrado con una mujer mayor, Hanna Schmitz, a quien reencuentra en su juventud, ahora como acusada de crímenes de guerra efectuados durante el régimen nazi. La obra aborda tema como la memoria, literatura, historia alemana postmoderna y la vergüenza de las generaciones predecesoras ante los hechos. Se podría decir que su tesis nos dice que los crímenes de guerra cometidos por el régimen nazi han dejado un sentimiento de culpa y vergüenza sobre las generaciones que no se vieron involucradas en el movimiento y la guerra.

La obra El Lector se divide en tres partes principales: la primera y la segunda parte constan de un total de 17 capítulos mientras la tercera sólo llega a tener 12. Podemos decir que la historia se divide en tres tiempos diferentes; durante la adolescencia, juventud y adultez de Michael o en la época post-nazismo donde aún era un tema delicado en Alemania, durante el periodo de juicio al que sometieron a los simpatizantes del régimen y después, cuando éstos ya se encontraban prisioneros o habían sido castigados. O bien, como una obvia alusión al tercer reigh como era conocido el régimen de Hitler.

Ahora bien, la estructura interna del relato podemos notar que la narración se da en homodiegético pues es una narración en primera persona, dada por el mismo Michael en in extrema res, haciendo una retrospección al pasado. Podemos encontrar que el tono del narrador no es nostálgico y de alguna manera recuerda con algo de vergüenza su pasado, como una metáfora sobre el pensamiento alemán sobre los acontecimientos del pasado. Podemos apreciar una etopeya dentro del relato que nos narra Michael es de indiferencia y al mismo tiempo de pena por su pasado, algo que él mismo nos comenta: ya no siente nada por Hanna o lo que pasó, pero aun así sabe que paso y lo avergëunza.

Podemos también identificar varios espacios a lo largo de la novela, aunque entre todos destacan sólo tres: el apartamento de Hanna, el juzgado y la cárcel. En el primero podemos apreciar que es donde el joven Michael y Hanna se encontraban a escondidas, manteniendo una relación de bajo perfil, lo que podría aludir al tiempo en el que los recientemente cometidos crímenes de guerra no se aludían de manera directa. El segundo de los espacios es el juzgado en que se llevan a cabo los juicios contra las mujeres que formaron parte de la SS, incluida Hanna; podríamos decir que

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