Analisis del libro "Los 7 habitos de la persona altamente aplicada"
Enviado por Benjamin Ramirez • 14 de Abril de 2018 • Ensayo • 3.504 Palabras (15 Páginas) • 149 Visitas
Victoria Privada
1er Hábito: Ser Proactivo
Actualmente es bien conocida la frase de que el ser pobre es una enfermedad mental, muchos lo encuentran algo insólito, después de todo el mundo es el que es y tenemos que aprender a movernos en él, a veces puede parecer que las condiciones nos superan y los problemas del mundo se nos viene encima, en ese momento hay que elegir entre si dejarnos llevar con la corriente o si nos aventuramos y forjamos nuestro camino a través de ella. En la segunda elección reside el primero de los hábitos, el ser proactivo no es simplemente el actuar en el momento, es el principio de reaccionar acorde a unos valores determinados sin importar que clase de circunstancias se ciernen sobre el individuo, podría ser que llueva, podría haber un ambiente triste en tu lugar de trabajo, incluso que no estás pasando el mejor momento con tu pareja, a pesar de estar en una situación desfavorable, esto no impedirá a una persona segura de sus principios a continuar con lo que en un inicio se ha puesto como meta, el logro de sus objetivos supera con diferencia esos estímulos negativos.
Esto está arraigado a la naturaleza del ser humano, se suele presentar en unos individuos más que otros, pero son como músculos que se pueden entrenar y ejercitar regularmente para que se puedan desarrollar con el paso del tiempo.
Tomar la iniciativa es un punto importante en esta teoría, es importante tener la responsabilidad de que las cosas suceden, de crear nuestras propias oportunidades y desarrollar nuestras habilidades, si esperamos que algo o alguien aparezca para que nosotros mismos actuemos en consecuencia nos convertiríamos en personas reactivas e incapaces de hacer o pensar por nosotros mismos y dejándonos por las condiciones del mundo que nos rodea.
2do Hábito: Empiece con un fin en mente
¿Qué es lo que más deseas en la vida? ¿Cuáles son tus metas? ¿Cómo quieres ser recordado? ¿Cuál es el legado que quieres dejar atrás? Estas son preguntas que conviene hacerlo desde el mismo presente, marcarnos unos objetivos concretos son importantes para conocer en qué dirección queremos guiar nuestro día a día a partir de hoy. Se puede tener objetivos como “ser famoso” o “ser millonario” pero son metas que aunque parezcan atractivas son guiadas por caprichos o ideales que terminan no siendo lo que uno piensa en un principio, para determinar por cual fin debemos actuar y cual deberíamos concentrar nuestros esfuerzo es tan solo cuestión de conocernos a nosotros mismos, que valores nos guían nuestras conducta y que valoramos como lo más importante y le dedicamos la mayor parte de nuestra atención.
Todas las cosas se crean dos veces, primero el ideal y luego la obra, se hace el plano y luego se construye, se hace un presupuesto y luego se pone en acción el proyecto. Esto no significa que la acción se hará como se planeó al pie de la letra, en el camino habrá obstáculos, habrá problemas que surgirán de ninguna parte que intentaran frenar el camino que se ha comenzado, pero no se planeó con la idea de detenerse, es necesario no estancarse y abrirse a las posibilidades que aparecen a cada momento, ampliar los horizontes significa buscar soluciones en aquellos lugares en los que nunca pensaste en primer lugar, aprovechándose de cada pequeña oportunidad que te presenta la vida para ser mejor.
Entendiendo esto pasamos a lo que es el liderazgo y la administración, se pueden definir y diferenciar claramente diciendo que el liderazgo es el indicador que nos lleva en la dirección correcta y por el camino adecuado para llegar a nuestra meta, y por su parte la administración se encarga de que a lo largo de ese camino las decisiones y acciones que tomemos se apliquen de forma eficiente y eficaz, buscando el aprovechamiento de las fortalezas y cubriendo sus debilidades.
Hay que saber además escribir nuestro propio guion, o dicho de otra forma, reescribir la forma en la que vivimos apoyándonos en la manera en la que otro han sabido escribirla, pues el mundo actual está cambiando a un ritmo que puede resultar terrorífico, por lo que es importante no quedarse estancado, siempre adaptarse a los tiempos en los que se vive, aprendiendo y respetando de todas las formas que tiene el ser humano de interpretar el mundo que le rodea.
3er Hábito: Establecer primero lo primero:
Una vez hemos comprendido la importancia del primer y segundo hábito, solo en ese momento, seremos capaces de pasar al tercer hábito, recordando lo que establecimos anteriormente sobre el liderazgo y la administración, este hábito está basado casi enteramente en la administración de uno mismo y desde un inicio se basa en la voluntad independiente. La voluntad independiente significa actuar en lugar de “ser actuado”, llevar pro-activamente a cabo el programa que hemos desarrollado a través de los otros tres dones.
Establecer que debe ser lo primero, es decir nuestras prioridades, no es una cuestión simplemente de decidirlo, también de aplicarlo cada día de manera consecutiva en busca del logro mismo de esos deseos, esto significa que es una cuestión de disciplina y quien sea fiel a dichos valores y enseñanzas podrá cumplir cualquier meta que se proponga sin importar que los deseos más efímeros que aparezcan se pongan en el camino.
Desde el punto de vista empresarial, podemos reconocer a 4 generaciones que han dado su propio punto de vista sobre cómo llevar la administración del tiempo, las mismas encuentran su base en la revolución social, la revolución agrícola, la revolución industrial y la revolución informática, respectivamente.
- La primera se basó en las notas y listas de tareas.
- La segunda se caracterizó en las agendas y en intentar programar los acontecimientos.
- La tercera es la administración del tiempo en la actualidad, se basa en priorizar unos valores concretos, establecer la importancia de las actividades diarias en base a dichos valores y buscar el cumplimiento de las metas a partir de este proceso.
A pesar de haber sentado las bases para la administración del tiempo actualmente, los administradores han empezado a darse cuenta de los errores del mismo, pues queriéndose anticipar a los sucesos futuros planeando cada situación con anterioridad, ejercen demasiada presión sobre quienes deben ejecutar las tareas a veces impidiéndoles aprovechar el tiempo en base a las circunstancias del momento.
- En la cuarta generación finalmente en vez de buscar el solo cumplimiento de los planes, esta misma depende tanto de la expectativa como de la realización.
Victoria Pública
4to Hábito: Piensa en ganar/ganar
Una vez que hemos conseguido una victoria interior, esa confianza que necesitamos como persona la aplicaremos para con los demás, aprendiendo nosotros mismos de ellos y ellos con nosotros construyendo de esa forma relaciones de confianza y colaboración. Nos introducen el concepto de cuenta bancaria emocional, la cual es una metáfora para describir todas las acciones que realizamos para construir una relación de amistad, compañerismo y hasta sentimental. Podemos interpretar como “depósitos” las siguientes acciones:
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