Cabezas rapadas y cintas argentinas

TRABAJO PRÁCTICO N°2: “Cabezas rapadas y cintas argentinas”

PROFESORA: Rafaela Bitrán

PROFESOR AYUDANTE: Emiliano Tortorela

ALUMNAS:

Abigail Bek

Victoria González

Jessica Serain

Ivana Turica

FECHA DE ENTREGA: 13 de Octubre de 2016

        En el texto de Beatriz Sarlo, “Cabezas rapadas y cintas argentinas”, se relatan ciertos hechos en una escuela primaria de Buenos Aires a principios del siglo XX. En ellos, podemos reconocer rasgos autoritarios del sistema educativo, obediente al proceso de disciplinación  de la modernidad según lo comprende Foucault. Él afirma que el proceso de disciplinación “ha hecho funcionar el espacio escolar como una máquina de aprender, pero también de vigilar, de jerarquizar, de recompensar”. (pg. 170, capítulo 5 “Los cuerpos dóciles” del libro Vigilar y Castigar, etc…).

        La que Beatriz llama “mañana de las cabezas rapadas”, se ve claramente el intento de recompensar las disidencias de aquellos alumnos a los que se les rapó la cabeza haciendo evidente el proceso de homogeneización que busca destacar las diferencias (como en este caso es ser inmigrante) en los individuos que no obedecen al ideal que el sistema disciplinario pretende alcanzar y hacer cumplir. Así confirma y refuerza dicha homogeneidad, donde lo individual se ve como algo negativo.

        A partir de una multiplicidad de procesos de origen diferente, que se apoyan unos sobre otros, convergiendo en un método general.

        “En lugar de plegar uniformemente y en masa todo lo que le está sometido, separa, analiza, diferencia, lleva sus procedimientos de descomposición hasta las singularidades necesarias y suficientes. Encausa las multitudes móviles, confusas, inútiles de cuerpos y de fuerzas en una multiplicidad de elementos individuales” (pg. 158, capitulo 6 “los medios del buen encauzamiento” del libro Vigilar y Castigar, etc…)

        “REGLAS EXPLÍCITAS”.

        En el texto de Beatriz podemos identificar esta actitud en

        La disciplina fabrica “cuerpos dóciles”, es decir, cuerpos sometidos y ejercitados. Se puede ver la forma del cuerpo dócil en lo material en la forma en la que les rapan la cabeza (acción explícita), y en forma simbólica como lo expresa Beatriz al final de su texto

                El método de acción de la disciplina recae en el detalle. (Para Michel Foucault, en su libro Vigilar y castigar, la disciplina es “una anatomía política del detalle”) El conjunto de acciones específicas conforman un orden que queda establecido a partir de acciones específicas, que su simplicidad de detalle vuelve al orden general invisible dándole un carácter de ley implícito que se ve cuando la maestra toma esta decisión sin que se le dé la orden específica de hacerlo sino que a partir de una adaptación de otras reglas que insinuaban estas ciertas conductas o de maneras de comportarse.

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