EL JARDÍN DE LOS SENDEROS QUE SE BIFURCAN, CUENTO POLICIAL O TRATADO FILOSÓFICO

EL JARDÍN DE LOS SENDEROS QUE SE BIFURCAN, CUENTO POLICIAL O TRATADO FILOSÓFICO

El tiempo como preocupación metafísica

Resumen: Una de las preocupaciones metafísicas constantes en la obra de Jorge Luis Borges es el tiempo, el cual ha sido representado en forma de laberinto que se ramifica en el “El jardín de senderos que se bifurcan” (1941). Se trata de un cuento con una estructura literaria y filosófica compleja, en el que el autor permite entrever algunas de sus posturas filosóficas. Borges desafía al lector llevándolo a diferentes lecturas de una misma distrayéndolo del objetivo final de la historia, creando así su propio laberinto de bifurcaciones en su relato.

Palabras clave: Tiempo, Filosofía, Laberinto, Ramificaciones.

En la historia de la humanidad el hombre ha tenido siempre una preocupación por el tiempo. Filósofos, matemáticos, físicos, astrónomos entre muchos otros han estudiado el tiempo desde sus diferentes campos y era de esperarse que en la literatura también fuera un tema digno de ser tratado. El escritor y poeta argentino Jorge Luis Borges en su cuento “El jardín de los senderos que se bifurcan” retrata alrededor de la historia de Yu Tsun una postura filosófica acerca de la infinidad de posibilidades en el tiempo. El

jardín de senderos que se bifurcan asume la tesis de la existencia de un tiempo bifurcado.

El jardín de senderos que se bifurcan es una enorme adivinanza, o parábola, cuyo tema es el tiempo; esa causa recóndita le prohíbe la mención de su nombre. Omitir siempre una palabra, recurrir a metáforas ineptas y a perífrasis evidentes, es quizá el modo más enfático de indicarla. Es el modo tortuoso que prefirió, en cada uno de los meandros de su infatigable novela, el oblicuo Ts’ui Pên. (…) no emplea una sola vez la palabra tiempo. La explicación es obvia: ”El jardín de senderos que se bifurcan” es una imagen incompleta, pero no falsa, del universo tal como lo concebía Ts’ui Pên. A diferencia de Newton y de Schopenhauer, no creía en un tiempo uniforme, absoluto. Creía en infinitas series de tiempos, en una red creciente y vertiginosa de tiempos divergentes, convergentes y paralelos. Esa trama de tiempos que se aproximan, se bifurcan, se cortan o que secularmente se ignoran, abarca todas la posibilidades.” (Borges, 1941, p. 9)

Este cuento contiene las ideas básicas de la filosofía de Borges, el tiempo cíclico, la simultaneidad del pasado, presente y futuro, el carácter laberíntico del mundo, los distintos puntos de vista y pensamientos de la humanidad en distintos contextos de tiempo. El laberinto de la historia no es físico, sino temporal, lo que se bifurca no es el jardín sino los instantes. Al llegar a un instante existen múltiples posibilidades a seguir, y el tiempo puede transcurrir y transcurre sobre las múltiples opciones que

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