EPISTEMOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN BIOGRÁFICO-NARRATIVA EN LA EDUCACIÓN

La sociedad actual atraviesa un sinfín de adversidades, cambios y mejoras que llevaran a la actualización permanente de cada individuo, para esto el sistema educativo debe centrarse en las necesidades globales, pero también en el contexto local donde ambas partes puedan ser aceptadas, moldeadas y aplicadas en la vida cotidiana.

Ante esta situación surge la necesidad de analizar y reflexionar la intervención de la practica pedagógica como profesores de educación básica, donde el objeto de estudio que surgirá a partir de creencias, coadyuvara a transformar el saber y hacer y con ello generar conocimientos validos que den cuenta a la sociedad que la intervención del rol del profesor (a) desde su individualidad, su sentir y su pensar, pueden aportar alternativas de mejora e intervención desde el curriculum y su rol profesional.

Es en este sentido de reflexión debemos humanizarnos y tomar a nuestros educandos como seres pensantes y únicos, los cuales necesitaran obtener conocimientos de acuerdo a sus necesidades. La transmisión de conocimientos no es suficiente para lograr una transformación positiva en el alumno.

Es necesario tomar la historicidad de cada docente durante su formación, ya que desde mi propia perspectiva se pueden adquirir momentos, actividades, lugares y roles que ayudaron a crear conocimiento y que se volvieron significativos para la formación de identidad del docente.

Formamos parte de un sistema que ha creado paradigmas que muchas veces limitan nuestras intervenciones como docentes. Por un lado, requerimos una sensibilidad que nos permita comprender el motivo por el cual las y los estudiantes hacen lo que hacen en la escuela, y por otro la actuación del docente hacia la formación estudiantil.

El docente con una identidad bien definida puede aportar estrategias a partir de su conocimiento previo y de las nuevas tendencias sociales, donde el resultado será una adquisición de conocimientos significativa.

La educación ha sido y será la fuente fundamental para que todas las sociedades puedan desarrollar su cultura, lengua y tradiciones, para esto cada una de ellas ha desarrollado una manera particular de ofrecer educación a sus nuevas generaciones.

La sociedad actual demanda una educación más centrada a las nuevas tendencias globales, para esto es deber del profesor brindar las herramientas fundamentales para que cada uno de sus alumnos pueda llegar a ser analítico, crítico y reflexivo como lo va necesitando nuestro presente y futuro contemporáneo.

La educación como ya mencione con anterioridad es la base principal para el desarrollo de cada cultura, por esta razón es importante analizar los modelos educativos y la funcionalidad de cada uno.

En siglos pasados se centraba el trabajo en  el profesor y de cómo este enseñaba los contenidos o temas que se realizarían en el aula, para esto el niño era simplemente un objeto el cual debía escuchar y obedecer lo que su maestro le enseñaba; básicamente se planteaba que el niño memorizara y no analizara lo que se le estaba enseñando.

El niño siempre será el punto de partida para la educación, es importante que aunque nuestra sociedad se encuentra en constante cambio todo se enfoque al proceso de enseñanza-aprendizaje y que el docente utilice todos sus conocimientos, habilidades y destrezas para lograr que el discente sea analítico, crítico y reflexivo.

Durante el paso del tiempo se han desarrollado corrientes y teorías pero es necesario poder discernir  los que posiblemente funcionan  para el proceso enseñanza- aprendizaje así como  los que llegan a ser obsoletos para la pedagogía,  la tarea es reunir los métodos pertinentes para desarrollarlos en contextos adecuados como la escuela.  La sociedad necesita de un cambio grande y para un cambio grande es necesaria la renovación de las estructuras y  los fundamentos.

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