El Factor Fred, Ensayo

EL FACTOR FRED

Ensayo

El mundo y la actividad económica que dentro de él se desempeña, hace que cada día más empresas, negocios, obras y proyectos se desarrollen, haciendo que crezca la sociedad, pero también exigiendo más de ella misma. En ese sentido, obviamente se han desarrollado nuevas profesiones para cubrir las necesidades, y algunas otras han caído en desuso, siendo reemplazadas por otras o simplemente se volvieron obsoletas y dejaron de ejercerse; ciertamente hay empleos que son más importantes en cuanto a jerarquías organizacionales, pero más allá de los organigramas, existen personas para las que su empleo no es sólo su forma de ganarse la vida, sino que es, en sí mismo, su vida. En el libro “El Factor Fred”, escrito por Mark Sanborn, se presenta la vida de un cartero llamado Fred, una persona con un empleo común, en una ciudad común, pero que no es nada común como ser humano.

Mark Sanborn, autor del libro, es un escritor de fama internacional, que se ha especializado en programas sobre liderazgo, especialmente en cuanto a conferencias se refiere, en ámbitos como el servicio al cliente, la motivación laboral, el trabajo en equipo, la creación de valor dentro de una organización y muchos otros temas de interés tanto para quienes se desenvuelven en el mundo empresarial, como para quienes no lo hacen. Sanborn es uno de los más destacados conferencistas, a tal grado que fue presidente de la Asociación Nacional de Conferencistas en Estados Unidos, vertiendo en cada una de sus apariciones todos sus conocimientos adquiridos a lo largo de 30 años trabajando y estudiando el tema del liderazgo, lo que le ha posicionado como asesor de empresas y universidades de enorme prestigio a nivel mundial.

El Factor Fred es sin duda un libro aleccionador y alentador, pero lo más destacado de él es el hecho de que enfrenta al lector a una realidad que quizá se ha perdido de foco: todos merecemos en buen trato y más cuando se está ofreciendo un servicio, ya que todos como clientes consumidores esperan obtener lo mejor a cambio del dinero que se paga. Obviamente el término “lo mejor”, puede remitir a lujo, exclusividad, marcas famosas, etc., pero sin duda, lo mejor puede estar en cualquier parte y Fred lo sabe.

Fred es un cartero, para el cual los retos de la vida son la sal y la pimienta de la misma, pero que, sobre todo, se ve a sí mismo como su competencia más fuerte, es él el factor a mejorar, el elemento principal de su trabajo y un irremediable entusiasta para el cual las barreras, problemas y conflictos cotidianos no son nada más que aspectos a vencer que pueden ser superados con mucha creatividad, inteligencia y sobre todo actitud. Es la actitud de Fred ante las cosas lo que hace que su visión de las mismas sea diferente y en consecuencia, su forma de actuar cuando les hace frente.

Fred sabe que no está exento de sufrir reveses, que toda labor conlleva problemas y retos, por eso mismo, sabe que la clave para que el trabajo no sea visto como tal, no es solo amar lo que se hace, sino hacerlo con creatividad, de manera comprometida con el cliente y con uno mismo, mostrar entusiasmo por lo que se hace y hacerlo con calidad, aspirar a la excelencia, dar excelencia y con ello un inmejorable espíritu de servicio que se traducirá en clientes satisfechos. Cada uno de los pasajes mostrados en el libro, son el día a día de Fred, y podrían ser la cotidianeidad de cualquiera, cada uno de los clientes representan por alguna razón un reto en específico, que desde la perspectiva de Fred es fácil de vencer con 4 principios básicos.

El primer principio es “Todos sin excepción alguna marcamos la diferencia”; en la actualidad se tiende tanto a la individualidad, aún dentro del colectivo que todos como sociedad conformamos, sin embargo, dentro de esa individualidad, tan tendiente a ser diferente, a destacarse, a ser el mejor, se ha olvidado que toda persona en sí misma es importante; no existe en sí mismo un empleo o labor que deba ser más importante que otro, aun cuando es verdad que los líderes son necesarios y que éstos deben tener una preparación mayor, ¿qué sería de un excelente líder sin bases, sin trabajadores que puedan llevar a buen puerto un proyecto? Nada, simplemente esa nave no podría ir a ningún lado, una cabeza sin cuerpo no sirve para nada y no hay un empleo que deba ser considerado como de menor categoría, así como el desempeño no debe ser determinado por el empleo que se realiza; muchas veces el intentar sobresalir se vuelve una obsesión, sin darse cuenta que hacer lo que te gusta, de la mejor manera posible es la mejor forma de sobresalir, la premisa es hacer todo con calidad y buena actitud y el éxito llega por

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