El Significado De Esperando A Godot

En la vida cotidiana, los humanos solemos realizar interpretaciones de aspectos de la realidad que nos rodea. Principalmente, esto se ve reflejado cuando un espectador está ante obra de carácter artístico y se formula la pregunta ¿Por qué fue creada?, ¿Para qué?, ¿Por qué se utilizaron precisamente ciertos elementos y no otros? Justamente, en ese instante el espectador empieza a plantear interpretaciones tratando de dar un significado y sentido coherente a la obra que está presenciando. Un ejemplo de la anterior situación se puede generar frente a la famosa obra teatral conocida como “Esperando a Godot” (escrita por el poeta, novelista y dramaturgo Samuel Beckett en 1948) ya que a partir de la simple historia en la cual los personajes principales (Vladimiro y Estragón) tratan de encontrar diferentes formas de pasar el tiempo en un espacio limitado mientras esperan a Godot, el cual nunca se presenta a lo largo de la obra; se puede interpretar la obra de maneras distintas dependiendo del contexto que se utilice. Entonces, lo que se pretende con este escrito es explicar las posibles interpretaciones que se pueden obtener de los personajes y lo elementos espaciales de “Esperando a Godot”.

La obra podría tener una interpretación desde el punto de vista religioso, tal vez católico: simboliza una humanidad que está en la constante espera de un Dios que nos despoje de la condición de agonía (el constante fracaso de Vladimiro y Estragón al intentar evadir el tedio extremo de la espera), que nos ha impuesto el pecado original, aquel cometido por Adán y por Eva y por el cual nos fue impuesto el sufrimiento en vida. Esto se evidencia claramente en el siguiente dialogo entre los personajes principales: “-VLADIMIRO: ¿Y si nos arrepintiéramos? -ESTRAGÓN: ¿Y de qué? -VLADIMIRO: Pues... (Titubeando.) No hace falta entrar en detalles. ESTRAGÓN: ¿De haber nacido?” (Beckett, 1948, p.2).

Además de la interpretación religiosa global se podría especular acerca del uso de probables símbolos ligados a interpretaciones religiosas: el árbol disponible en el espacio limitado de la obra recuerda el pasaje bíblico del suicidio de judas (Vladimiro y Estragón pensaron en utilizarlo de la misma manera); recuerda también al árbol del bien y del mal que se exhibe en la narración de Adán y Eva de manera que simbolizaría la temática del pecado original que proviene de este árbol. Inclusive, si llegase a ser el árbol del bien y del mal, se estaría sugiriendo que la historia se lleva a cabo en un espacio supra terrenal por el simple hecho que este árbol solo se encuentra en el paraíso, mejor conocido como el edén; o recuerda, desde un punto de vista mitológico al árbol del conocimiento puesto que se creía que este árbol era una conexión vital entre el mundo de los humanos y el mundo de los dioses ( cabe recordar que Vladimiro y Estragón podrían estar en un espacio intermedio

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