El sexto y su resumen
Enviado por stefany meca • 7 de Octubre de 2015 • Resumen • 832 Palabras (4 Páginas) • 582 Visitas
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EL SEXTO
Nos trasladaron de noche. Pasábamos directamente por una puerta del pabellón de celdas de la intendencia al patio del sexto.
Desde lejos pudimos ver, a la luz de los eléctricos de la ciudad, la mole de la prisión cuyo fondo, apenas iluminado mostraba puentes y muros negros. El patio era inmenso y no tenía luz. A medida que nos aproximábamos, el edificio del sexto crecía. Íbanos en silencio, y a unos veinte pasos empezamos a sentir su fetidez […]
Así es como JOSE MARIA ARGUEDAS empieza EL SEXTO, su cuarta novela en la cual nos narra el drama humano que se vive en una cárcel peruana ya que nuestra con exactitud, los atropellos, la corrupción, el homosexualismo y la desigualdad dentro de prisión.
Se dice que nadie es capaz de afirmar algo que no ha visto, pero sin embargo leer las anécdotas y escalofriantes escenas que vivió Gabriel Osborno (personaje que representa al autor de esta obra), nos hace testigos de los actos que realizan algunos presidiarios que abusan del poder que ejercen sobre los demás para cometer sus fechorías y un claro ejemplo es negro puñalada, personaje que fue capaz de violar a Libio Tasaico y al pianista quien muere a consecuencia de sus maltratos.
El sexto es una novela testimonial en la cual el dolor, la angustia, el sufrimiento y la muerte son elementos testimoniales además de reflejar la realidad peruana de la década de 1930, época en la cual los partidos, eran de carácter revolucionario que habían surgido en los años 1920 con la pretensión de transformar radicalmente al país es decir había lucha de los apristas y comunistas contra el régimen dictatorial de Benavides.
Los apristas acusan a los comunistas de estar al servicio de la Unión Soviética y de ser antipatriotas; a la vez los comunistas consideran a los apristas como intrigantes al servicio de los intereses de los explotadores para frenar así la auténtica revolución. Frente a esta disputa, el joven Gabriel se muestra como un individualista acérrimo: no comparte ninguno de esos fanatismos extremos, aunque se siente más cercano a los comunistas. Se podría definir que es independiente, aunque no indiferente a algunas conversaciones de política que entablaban sus compañeros del tercer piso, como lo podemos inferir del siguiente párrafo tomado de esta polémica novela:
[…] -Luis, ¿tiene ideas?-le pregunte -¿qué ideas?
-Luis quiere la revolución; odia a los gamonales y, a los yarquis, pero odia más a los comunistas. No es posible hacerle entender que la revolución soviética ha liberado obreros y a los campesinos de la tiranía de los terratenientes y de la burguesía y que es un poder nuevo en el mundo. […] salieron con las caras felices de esa reunión. Es una derrota de los rusos aunque sea una desgracia para España, me dijo Luis, hablando claramente, como pocas veces. “Tú has sido un campesino explotado”, le conteste. “A los tiranos los liquidaremos nosotros tarde o temprano; si el comunismo vence el mundo, no habrá salvación. Además afirmo riéndose “no he sido tan pobre como crees, mi padre es un campesino libre. Y me hace feliz que sirvientes por esta derrota de Rusia”. No quiso seguir discutiendo y se fue a su celda. Lo aplaudieron unos pocos compañeros que nos escuchaban .Torralba le dio un puntapié a uno de los que aplauden.se le vinieron encima tres o cuatro. Yo pude ponerme en medio, y pare la pelea. Amenazaron a Torralba con romperle los huesos después, pero no lo hicieron. Fueron a la celda de Luis y cantaron la Marsella aprista […]
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