Fichaje de Dalmasso

DALMASSO, M. (2008) “La semiótica de los 60/70. Un tiempo para ser pensado”. En: La semiótica de los 60/70. Sus proyecciones en la actualidad. Córdoba, Doctorado en Semiótica (CEA y FFyH). Universidad Nacional de Córdoba. Editoras: María Teresa Dalmasso y Pampa Arán. Introducción

Semiótica

“(…) Paolo Fabbri (…) postula la necesidad de llevar a cabo un giro semiótico. Dicho movimiento, a su criterio y a contrapelo del dominio de la semiosis peirciana, exigirá recuperar e concepto hjelmsleviano de función de signo. Sólo así la semiótica estaría en condiciones de dar cuenta de los objetos, entendido por Foucault como conjuntos orgánicos de formas y substancias. Dentro de este marco, lograr separar la noción de signo de la de representación exigiría el recurso de la narratividad y al estudio de las pasiones (…)” (Dalmasso 2008:7)

 “(…) La capacidad de la semiótica (sirve) para dar cuenta de formas de significación que, inscriptas en materialidades diversas, activan dispositivos de producción irreductibles a los modelos de la significación verbal (…)” (Dalmasso 2008:7)

 “(…) En la propuesta de Prieto (…) observamos que describe un sujeto integrado a las prácticas de un grupo social y condicionado por ellas en su manera de concebir el mundo (la realidad material). En lo que respecta Kristeva, comprobamos que la noción de intertextualidad (…) conlleva el cuestionamiento de la concepción del sujeto en cuanto origen del sentido. En ese marco, la emergencia de la subjetividad es pensada como proceso, se trata de un sujeto en tránsito, es decir un sujeto en permanente transformación (…)” (Dalmasso 2008:12)

 “(…) Prieto (…) sostiene que si bien considera probable –no evidente- que la lengua sea un sistema de signos capaz de ‘traducir’ toda significación, niega que se pueda concluir de ello que sea “condición sine qua non de toda interpretación de la realidad (…)” (Dalmasso 2008: 14)

 “(…) desde la semiótica, o con la semiótica, se incursiona, desde el punto de vista de su semantización, en el dominio de las prácticas sociales no simbólicas, de las que también nos servimos para ser en el mundo. Sin embargo, a nuestro criterio, hay una zona de la producción social del sentido, en cuyo funcionamiento semiótico juegan un papel fundamental los órdenes de lo indicial y de lo icónico (…)” (Dalmasso 2008:14)

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