“LO QUE UN PROFESOR NECESITA PARA UNA ENSEÑANZA SIGNIFICATIVA.”

“LO QUE UN PROFESOR NECESITA PARA UNA ENSEÑANZA SIGNIFICATIVA.”

La escuela es nuestra segunda casa como estudiantes, aprendemos cosas nuevas, experimentamos, jugamos, nos divertimos, cometemos errores que nos hacen reflexionar y mejorar día con día. Enriquecemos nuestros conocimientos y los valores, analizamos el porqué de la cosas, sin duda alguna nos preparamos para nuestro futuro.

Para lograr ser una persona preparada se necesita mucho esfuerzo, dedicación, empeño y sobre todo hacer las cosas porque nos nace, no solo por cumplirlas. En este caso la intervención de nosotros como futuros docentes es de suma importancia, somos quienes guiamos a los alumnos en la preparación de su vida, damos algún consejo o les brindamos nuestra ayuda.

Ser profesor no es una cosa sencilla, debemos tener el carácter que nos ayude a trabajar en conjunto con los jóvenes. Debido a esto nos comprometemos a estar preparados, estar en constante actualización, ser innovadores al momento de aplicar las estrategias, así como también en la elaboración de planificaciones. Todo sea con el fin de mejorar la educación.

Desde mi punto de vista, como futura docente, es necesario conocer y cumplir con cada uno de los programas que nos ayudan en ámbito laboral; perfil de egreso, plan y programas para el maestro, al igual que los rasgos de normatividad. Conocer cada programa, nos ayuda a comprender mejor y saber cómo actuar con los jóvenes. Por esto, al diseñar una planificación se toman en cuenta los conocimientos, habilidades y actitudes de los alumnos, después de cada jornada es importante reflexionar y analizar cómo funcionó la planificación, si es necesario hacer modificaciones que mejore el ambiente de trabajo dentro y fuera del aula.

Habrá momentos en los que la improvisación será necesaria, pues no todo resulta como lo planeamos, en algunas ocasiones los contenidos de las asignaturas no son del interés de los jóvenes o todo lo contrario los alumnos presentan una actitud positiva y se hace más practico el contenido de la materia. Para tener la atención y no hacer enfadosa la clase, es importante diseñar estrategias que retengan la atención de los chicos en el tema, hacer actividades que sean de interés para los jóvenes o dar claros ejemplos relacionados con la vida.

La forma en que nos expresamos, desde el tono de voz, los movimientos corporales, los gesto y la postura física, influyen en las actitudes de los alumnos, puesto que si presentas una buena imagen, aun cuando estés cansada o tengas algún pendiente, el trabajo se podrá realizar de buena manera. Actuar con naturalidad repercute en el estado de ánimo de cada estudiante ya que les brindamos la confianza necesaria y aceptamos las propuestas de trabajo en un cierto tiempo.

La buena relación con los alumnos es indispensable, porque tienes una comunicación

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