“Marty, una lección de vida”.

“Marty, una lección de vida”.

“Marty” es un hombre a quien le suceden una serie de decepciones, infortunios  y malos ratos, que después son recompensados  con gran cantidad de sorpresas agradables y motivadoras para el alma; es, hasta cierto punto, una historia “agridulce”. Siendo un niño a quienes sus padres no querían, no desearon, y “planearon” únicamente para obtener intereses propios; no contaba con el apoyo moral, psicológico ni económico de ellos, era también un chico a quien molestaban y acosaban, siendo un chiquillo que por fuerzas ajenas a su voluntad no tuvo ilusiones-como la de los reyes magos-, tuvo que enfrentar grandes adversidades a su pequeña edad… sin embargo, y a pesar de todo lo mal que le podía ir, también existieron razones, y más que nada personas, que le ayudaron a mejorar su vida, a apreciar lo que tenía y a disfrutar de ella, logrando así ser un buen alumno, compañero, amigo, y hasta presidente de la nación.

En mi opinión es una linda trama, pero la encuentro poco realista, dudo mucho que todas las personas que puedas encontrarte en la vida tengan filosofías de vida tan agradables como las de este libro; al parecer hasta los niños tenían un vocabulario muy amplio y hablaban como adultos (no dudo que puedas encontrarte con niños así, simplemente creo que hubiera sido más adecuado un lenguaje más común en niños de la edad que manejan en la historia). Tampoco me agradó mucho que citara a tantos autores de libros y obras diferentes, algunas veces ni siquiera les daba el crédito. Finalmente y resumiendo, lo encuentro como una historia motivacional que si bien no logra motivarte como tal o no necesitabas motivación, algo  te ha de enseñar la lectura, que si se lee con calma, es amena.

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